Tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil (PDQ®) : Tratamiento - información para profesionales de salud [NCI]

Esta información es producida y suministrada por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés). La información en este tema puede haber cambiado desde que se escribió. Para la información más actual, comuníquese con el Instituto Nacional del Cáncer a través del Internet en la página web http://cancer.gov o llame al 1-800-4-CANCER.

Información general sobre el sarcoma de tejido blando infantil

Se han logrado mejoras notables en la supervivencia de niños y adolescentes con cáncer. Entre 1975 y 2020, la mortalidad por cáncer infantil disminuyó en más del 50 %.[1,2,3] Los niños y adolescentes sobrevivientes de cáncer necesitan un seguimiento minucioso, ya que es posible que los efectos secundarios del tratamiento del cáncer persistan o se presenten meses o años después de este. (Para obtener información sobre la incidencia, el tipo y la vigilancia de los efectos tardíos en niños y adolescentes sobrevivientes de cáncer, consultar Efectos tardíos del tratamiento anticanceroso en la niñez.

El rabdomiosarcoma, un tumor de músculo estriado, es el sarcoma de tejido blando más frecuente en niños de 0 a 14 años y representa cerca del 50 % de los tumores en este grupo etario.[2] En el ámbito de la pediatría, los otros tipos de sarcoma de tejido blando se llaman en conjunto sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos y representan alrededor del 3,5 % de todos los tumores en los niños.[2,4] Para obtener más información sobre el rabdomiosarcoma, consultar Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil.

Los tumores que no son rabdomiomatosos a menudo se clasifican según el tipo de tejido sano del cual se originan. Estos tejidos abarcan, entre otros, varios tipos de tejido conjuntivo, tejido del sistema nervioso periférico, tejido muscular liso y tejido vascular. La clasificación también incluye los tumores indiferenciados que no se vinculan con un tipo de tejido establecido con claridad. Para obtener más información sobre los tumores vasculares infantiles, consultar Tratamiento de los tumores vasculares infantiles.

Distribución del sarcoma de tejido blando según la edad y el tipo histológico

Los sarcomas de tejido blando en niños son un grupo heterogéneo de tumores malignos que surgen en el tejido mesenquimatoso primitivo y representan el 6 % de todos los tumores infantiles (rabdomiosarcomas, 3 %; otros sarcomas de tejido blando, 3 %).[2]

En 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó una revisión de la clasificación de tumores de tejido blando y hueso. Esta incluyó varias actualizaciones a los esquemas de clasificación, nomenclatura, asignación de grados y estratificación del riesgo existentes. En especial, la clasificación revisada incluye entidades descritas de manera reciente y tiene en cuenta las alteraciones moleculares.[5]

En el Cuadro 1 se presenta la distribución de los sarcomas de tejido blando de acuerdo con el tipo histológico y la edad, según la información del 2000 al 2015 del Surveillance, Epidemiology, and End Results (SEER) Program. En la Figura 2 también se observa la distribución de los subtipos histológicos por edad.

Cuadro 1. Distribución por edad de los sarcomas de tejido blando en niños de 0 a 19 años (SEER 2000–2015)a
Edad <5 años Edad 5–9 años Edad 10–14 años Edad 15–19 años Edad <20 años Todas las edades (incluso adultos)
TNEPp = tumores neuroectodérmicos primitivos periféricos; SEER = Surveillance, Epidemiology, and End Results.
a Fuente: Base de datos SEER.[6]
Todos los sarcomas de tejido blando y otros sarcomas extraóseos 1124 773 1201 1558 4656 80 269
 
Rabdomiosarcomas 668 417 382 327 1794 3284
Fibrosarcomas, neoplasias de nervio periférico y otras neoplasias fibrosas 137 64 112 181 494 6645
  Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos 114 33 41 77 265   4228
  Tumores de vaina de nervio 23 31 70 102 226   2303
  Otras neoplasias fibromatosas 0 0 1 2 3   114
Sarcoma de Kaposi 2 1 2 10 15 7722
Otros sarcomas de tejido blando específicos 237 238 559 865 1899 49 004
  Tumor de Ewing y tumor de Askin de tejido blando 37 36 72 113 258   596
  TNEPp de tejido blando 24 23 42 56 145   402
  Tumor rabdoide extrarrenal 75 8 9 4 96   205
  Liposarcomas 4 6 37 79 126   10 749
  Tumores fibrohistiocíticos 43 73 142 223 481   13 531
  Leiomiosarcomas 11 14 19 41 85   14 107
  Sarcomas sinoviales 12 39 141 210 402   2608
  Tumores de vasos sanguíneos 12 9 11 32 64   4238
  Neoplasias óseas y condromatosas de tejido blando 1 6 16 14 37   1018
  Sarcoma alveolar de partes blandas 4 5 22 33 64   211
  Sarcomas de tejido blando de diversos tipos 14 19 48 60 141   1339
Sarcomas de tejido blando sin especificación 80 53 146 175 454 13 614

Los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos son más frecuentes en adolescentes y adultos,[7] y la mayor parte de la información sobre el tratamiento y la evolución natural de la enfermedad en pacientes más jóvenes se ha obtenido de estudios en adultos. La distribución de estos tumores por edad de acuerdo con el estadio (Figura 1), subtipo histológico (Figura 2) y sitio tumoral (Figura 3) se muestran más adelante.[8]En el diagrama se muestra la distribución de los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos por edad de acuerdo con el estadio.
En el gráfico se observa la distribución de los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos por edad de acuerdo con el subtipo histológico.
En el gráfico se observa la distribución del sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso por edad de acuerdo con el sitio del tumor.

Factores de riesgo

A continuación se enumeran algunos factores genéticos y exposiciones externas asociadas con la formación de sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos:

  • Factores genéticos.
    • Síndrome de Li-Fraumeni: los pacientes con síndrome de Li-Fraumeni (suele originarse por cambios hereditarios oncógenos en el gen supresor de tumores TP53) tienen un aumento en el riesgo de presentar tumores de tejido blando (en especial, sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso), sarcomas óseos, cáncer de mama, tumores de encéfalo y leucemia aguda.[9,10]
    • Poliposis adenomatosa familiar: los pacientes con poliposis adenomatosa familiar tienen un aumento en el riesgo de presentar fibromatosis tipo desmoide.[11]
    • Gen RB1: las mutaciones germinales en el gen RB1 se han relacionado con un aumento en el riesgo de presentar sarcomas de tejido blando; en especial, leiomiosarcoma; el riesgo es mayor en los niños menores de 1 año que recibieron alquilantes.[12,13]
    • Gen SMARCB1: las mutaciones germinales o deleciones en el gen SMARCB1 (INI1) se han asociado con un aumento en el riesgo de presentar tumores rabdoides extrarrenales.[14]
    • Neurofibromatosis de tipo 1: alrededor del 4 % de los pacientes con neurofibromatosis de tipo 1 presentan tumores malignos de vaina del nervio periférico, que suelen aparecer tras una latencia prolongada; algunos pacientes presentan múltiples lesiones.[15,16,17]
    • Síndrome de Werner: este síndrome se caracteriza por inestabilidad cromosómica espontánea que produce aumento de la susceptibilidad al cáncer y envejecimiento prematuro. Se ha notificado un exceso de sarcomas de tejido blando en pacientes con síndrome de Werner.[18]
    • Complejo de esclerosis tuberosa: este complejo se asocia con diversos tumores que exhiben diferenciación perivascular de células epitelioides (PEComas), incluso linfangioleiomiomatosis y angiomiolipomas hepáticos y renales.[19,20,21]
    • Inmunodeficiencia combinada grave por deficiencia de adenosina–desaminasa: se notificó que los pacientes con inmunodeficiencia combinada grave por déficit de adenosina–desaminasa tienen un aumento del riesgo de presentar dermatofibrosarcoma protuberante multicéntrico que, por lo general, aparece a una edad promedio de 8,9 años.[22]
  • Exposición a riesgos externos.
    • Radiación: algunos sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos (en especial, el histiocitoma fibroso maligno) se presentan dentro de los límites de un sitio irradiado antes.[23,24,25,26,27]
    • Infección por el virus de Epstein-Barr en pacientes con síndrome de inmunodeficiencia adquirida: se estableció un vínculo entre algunos sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos (por ejemplo, leiomiosarcoma) y la infección por el virus de Epstein-Barr en pacientes con síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).[23,28]

Cuadro clínico inicial

Aunque el sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso surge en cualquier parte del cuerpo, suelen formarse en el tronco y las extremidades.[29,30,31] Estas neoplasias a veces se manifiestan como una masa sólida asintomática y en otros casos producen síntomas por invasión local en estructuras anatómicas adyacentes. Rara vez, estos tumores surgen en el tejido encefálico. En estos casos, el tratamiento depende del tipo histológico.[32]

Los síntomas sistémicos (por ejemplo, fiebre, pérdida de peso y sudoración nocturna) son poco frecuentes. Se han notificado casos de hipoglucemia y raquitismo hipofosfatémico en pacientes con hemangiopericitoma (ahora identificado como tumor fibroso solitario según el sistema de clasificación revisado de la Organización Mundial de la Salud), y casos de hiperglucemia en pacientes con fibrosarcoma de pulmón.[33]

Evaluación para el diagnóstico y la estadificación

Cuando se identifica una lesión sospechosa, es fundamental llevar a cabo una evaluación diagnóstica completa, seguida de una biopsia adecuada. Se usan los siguientes procedimientos para obtener imágenes de la lesión antes de iniciar cualquier intervención:

  • Radiografías simples. Las radiografías simples sirven para descartar el compromiso óseo y detectar las calcificaciones que a veces se observan en tumores de tejido blando como el osteosarcoma extraesquelético o el sarcoma sinovial.
  • Tomografía computarizada (TC) de tórax. La TC de tórax es esencial para evaluar la presencia de metástasis.
  • TC o imágenes por resonancia magnética (IRM) de abdomen. Es posible usar TC o IRM de abdomen para obtener imágenes de los tumores intraabdominales; por ejemplo, el liposarcoma.
  • IRM de las extremidades. La IRM es esencial para las lesiones en las extremidades.
  • Tomografía con emisión de positrones (TEP) y gammagrafía ósea.
    • Rabdomiosarcoma. En niños con rabdomiosarcoma, la tomografía con emisión de positrones-tomografía computarizada (TEP-TC) es más eficaz que las imágenes convencionales para identificar la enfermedad en ganglios linfáticos, huesos, médula ósea y tejidos blandos. Los autores de un estudio de comparación de imágenes indicaron que es posible eliminar el uso de las gammagrafías óseas con tecnecio Tc 99m como procedimiento de estadificación.[34]
    • Otros sarcomas de tejido blando. En un estudio retrospectivo, se completaron 46 TEP en 25 pacientes pediátricos con sarcoma de tejido blando.[35] El valor predictivo positivo de encontrar enfermedad metastásica fue del 89 % y el valor predictivo negativo fue del 67 %. En un estudio pequeño de 9 pacientes con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso, se indicó que la TEP-TC era más exacta y rentable para identificar las metástasis a distancia que cualquiera de las modalidades solas.[36] No se ha estudiado de manera prospectiva el uso de esta modalidad para el sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso en los niños.

      En un estudio prospectivo de pacientes pediátricos con sarcoma que se sometieron a biopsia de ganglio linfático centinela, se examinaron 28 pacientes. Los resultados de la biopsia de ganglio linfático centinela fueron positivos para compromiso en 7 de 28 pacientes, entre ellos 3 pacientes cuyas TEP-TC fueron negativas para compromiso tumoral. Estos resultados de las biopsias de ganglios linfáticos centinelas condujeron a cambio en el tratamiento de 7 pacientes cuya enfermedad metastásica se determinó mediante la biopsia. Además, 3 de 7 (43 %) pacientes en quienes se comprobó el compromiso maligno de los ganglios centinelas, obtuvieron resultados negativos para compromiso tumoral en las imágenes transversales y funcionales (TEP). La TEP-TC sobrestimó el compromiso ganglionar en más pacientes que el número confirmado mediante biopsia de ganglio linfático centinela. Igual como se indicó en informes previos, los 2 tipos de tumores no rabdomiosarcomatosos del estudio fueron el sarcoma epitelioide y el sarcoma de células claras.[37]

Las características de las imágenes de algunos tumores son sumamente orientadoras del diagnóstico. Por ejemplo, se describieron las características de las imágenes del sarcoma fibromixoide infantil de grado bajo y del sarcoma alveolar de partes blandas que sirven para ayudar a diagnosticar estas neoplasias raras.[38]

Estrategias para la toma de biopsias

Aunque desde el punto de vista patológico los tumores del tejido blando no rabdomiosarcomatosos se distinguen del rabdomiosarcoma y del sarcoma de Ewing, la clasificación de este tipo de sarcoma a menudo es difícil. Para el diagnóstico del sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso, se puede usar biopsia con aguja gruesa, biopsia por incisión o biopsia por escisión. En la medida de lo posible, el cirujano que realizará la resección definitiva debe participar en la decisión sobre el tipo de biopsia. La ubicación inadecuada de las incisiones o de las agujas de biopsia puede afectar la capacidad para obtener márgenes negativos.

Dada la importancia diagnóstica de las translocaciones y otros cambios moleculares, es esencial una biopsia con aguja gruesa o una biopsia por incisión pequeña que permita obtener suficiente tejido tumoral para el análisis histológico convencional e inmunocitoquímico, al igual que otros estudios, como microscopia óptica y electrónica, citogenética, hibridación fluorescente in situ y patología molecular.[39,40] Las técnicas de biopsia con aguja deben garantizar un muestreo tisular adecuado. En ocasiones, es necesario obtener múltiples muestras de tejido. De 530 casos de presuntas masas de tejido blando de pacientes (en su mayoría adultos) que se sometieron a biopsia con aguja gruesa, se demostró que 426 (80 %) eran tumores de tejido blando, de los cuales 225 (52,8 %) eran malignos. La biopsia con aguja gruesa permitió diferenciar el sarcoma de tejido blando de las lesiones benignas con una sensibilidad del 96,3 % y una especificidad del 99,4 %. El subtipo del tumor se designó de manera correcta en el 89,5 % de las lesiones benignas y en el 88 % de los sarcomas de tejido blando. La tasa de complicaciones fue del 0,4 %.[41] Los aspectos a tener en cuenta durante el procedimiento de biopsia son los siguientes:

  • La biopsia con aguja gruesa de un tumor ubicado en tejido profundo puede causar un hematoma, que luego repercute en la resección o la administración de radiación porque el volumen irradiado debe abarcar el hematoma.
  • Por lo general no se recomienda la biopsia con aguja fina porque es difícil determinar el diagnóstico histológico exacto y el grado tumoral de este grupo heterogéneo de tumores.
  • Es posible que la biopsia se guíe con ecografía, TC o IRM con el fin de garantizar que sea representativa.[42] La guía por imagen es muy útil; en especial para lesiones profundas y con el fin de evitar cambios quísticos o tumores necróticos.[43]
  • Las biopsias por incisión no deben comprometer la posibilidad de hacer una resección local amplia posterior.
  • Se desaconsejan las biopsias por escisión de la lesión, ya que solo son apropiadas para lesiones superficiales pequeñas (<3 cm).[44,45] Si se contempla el uso de una biopsia por escisión, se recomienda obtener una IRM para definir el área de compromiso ya que quizás sea necesario someter al paciente a una cirugía o radioterapia posterior.
  • En distintas series institucionales, se demostró la viabilidad y eficacia de la biopsia de ganglio centinela como procedimiento de estadificación en pacientes pediátricos con sarcomas de tejido blando.[46,47,48,49,50,51] La utilidad de la biopsia de ganglio linfático centinela se limita al sarcoma epitelioide, el sarcoma de células claras y el rabdomiosarcoma de tronco y extremidades.[37]
  • Se evitan las incisiones transversales en las extremidades para disminuir la pérdida de piel durante una resección posterior y porque estas exigen que se abarque un volumen transversal de tejido mayor en el campo de radiación. También se evitan otros procedimientos quirúrgicos radicales antes del diagnóstico definitivo.

    Por estas razones, se recomienda mucho la biopsia abierta o varias biopsias con aguja gruesa para obtener suficiente tejido tumoral para los estudios cruciales y, para evitar restringir las opciones de tratamiento en el futuro.

Resección no planificada

En los niños sometidos a una resección no planificada de un sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso, es frecuente que se recomiende una resección posterior debido a que se encuentra compromiso tumoral de la pieza extirpada en muchos pacientes.[52,53] En un análisis de una sola institución con adolescentes y adultos, se comparó un grupo de pacientes sometidos a resección no planificada de un sarcoma de tejido blando y un grupo de control de pacientes emparejados según el estadio. En este análisis retrospectivo, la resección inicial no planificada de un sarcoma de tejido blando aumentó el riesgo de recidiva local, metástasis y muerte; este incremento fue mayor para los tumores de grado alto.[54][Nivel de evidencia C1] En este caso, se anticipa una segunda resección.

Anomalías cromosómicas

Muchos sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatoso se caracterizan por presentar anomalías cromosómicas. Algunas de estas translocaciones cromosómicas producen la fusión de 2 genes dispares. El transcrito de fusión resultante se puede detectar con facilidad mediante técnicas de reacción en cadena de la polimerasa; esto facilita el diagnóstico de estas neoplasias con translocaciones.

Algunas de las anomalías más frecuentes de los tumores de tejido blando no rabdomiosarcomatosos se describen en el Cuadro 2.

Cuadro 2. Anomalías cromosómicas frecuentes del sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatosoa
Tipo histológico Anomalías cromosómicas Genes comprometidos
a Adaptado de Sandberg,[55]Slater et al.,[56]Mertens et al.,[57]Romeo,[58]y Schaefer et al.[59]
Sarcoma alveolar de partes blandas t(x;17)(p11.2;q25) ASPSCR1::TFE3[60,61,62]
Histiocitoma fibroso angiomatoide t(12;16)(q13;p11), t(2;22)(q33;q12) y t(12;22)(q13;q12) FUS::ATF1,EWSR1::CREB1,[63]EWSR1::ATF1
Sarcomas con reordenamiento deBCOR inv(X)(p11.4;p11.2) BCOR::CCNB3
Sarcomas con reordenamiento deCIC t(4;19)(q35;q13) y t(10;19)(q26;q13) CIC::DUX4
Sarcoma de células claras t(12;22)(q13;q12) y t(2;22)(q33;q12) EWSR::ATF1,EWSR1::CREB1[64]
Fibrosarcoma congénito (infantil) o nefroma mesoblástico t(12;15)(p13;q25) ETV6::NTRK3
Dermatofibrosarcoma protuberante t(17;22)(q22;q13) COL1A1::PDGFB
Fibromatosis desmoide Trisomía 8 o 20, pérdida de 5q21 CTNNB1orAPCmutations
Tumores desmoplásicos de células redondas t(11;22)(p13;q12) EWSR1::WT1[65,66]
Hemangioendotelioma epitelioide t(1;3)(p36;q25)[67] WWTR1::CAMTA1
Sarcoma epitelioide Inactivación deSMARCB1 SMARCB1
Crondrosarcoma mixoide extraesquelético t(9;22)(q22;q12), t(9;17)(q22;q11), t(9;15)(q22;q21) y t(3;9)(q11;q22) EWSR1::NR4A3,TAF2N::NR4A3,TCF12::NR4A3,TFG::NR4A3
Hemangiopericitoma t(12;19)(q13;q13.3) y t(13;22)(q22;q13.3) LMNA::NTRK1[68]
Fibrosarcoma infantil t(12;15)(p13;q25) ETV6::NTRK3
Tumor miofibroblástico inflamatorio t(1;2)(q23;q23), t(2;19)(q23;q13), t(2;17)(q23;q23), t(2;2)(p23;q13) y t(2;11)(p23;p15)[69] TPM3::ALK,TPM4::ALK,CLTC::ALK,RANBP2::ALK,CARS1::ALK,RAS
Miofibromatosis infantil Mutaciones de ganancia de función PDGFRB[70]
Sarcoma fibromixoide de grado bajo t(7;16)(q33;p11) y t(11;16)(p11;p11) FUS::CREB3L2,FUS::CREB3L1
Tumor maligno de vaina de nervio periférico 17q11.2, pérdida o reordenamiento de 10p, 11q, 17q y 22q NF1
Condrosarcoma mesenquimatoso del(8)(q13.3q21.1) HEY1::NCOA2
Mioepitelioma t(19;22)(q13;q12), t(1;22)(q23;q12) y t(6;22)(p21;q12) EWSR1::ZNF44,EWSR1::PBX1,EWSR1::POU5F1
Liposarcoma mixoide o de células redondas t(12;16)(q13;p11) y t(12;22)(q13;q12) FUS::DDIT3,EWSR1::DDIT3
Tumor mesenquimatoso mixoide primitivo de la infancia Duplicación interna en tándem BCOR
Tumor rabdoide Inactivación deSMARCB1 SMARCB1
Fibrosarcoma epitelioide esclerosante T(11;22)(p11;q12) y t(19;22)(p13;q12) EWSR1::CREB3L1,EWSR1::CREB3L3
Tumor fibroso solitario inv(12)(q13q13) NAB2::STAT6
Sarcoma sinovial t(x;18)(p11.2;q11.2) SS18::SSX
Tumor tenosinovial de células gigantes t(1;2)(p13;q35) COL6A3::CSF1

Pronóstico y factores pronósticos

El pronóstico del sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso varía en gran medida según los siguientes factores:[71,72,73]

  • Sitio del tumor primario.
  • Tamaño del tumor.
  • Grado tumoral. Para obtener más información, consultar la sección Importancia pronóstica de la clasificación tumoral por grados.
  • Tipo histológico del tumor.
  • Profundidad de la invasión tumoral.
  • Presencia de metástasis y sitio del tumor metastásico.
  • Resecabilidad del tumor.
  • Uso de radioterapia.

En una revisión de una serie grande de adultos con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso, se encontró que los pacientes con sarcomas superficiales de extremidades tuvieron un pronóstico mejor que aquellos con tumores profundos. De modo que, además del grado y el tamaño, se deberá considerar la profundidad de la invasión tumoral.[74]

En varias series de adultos y niños, se observó que los pacientes con tumores grandes o invasores tienen un pronóstico significativamente más precario que el de aquellos con tumores pequeños no invasores. En una revisión retrospectiva de sarcomas de tejido blando en niños y adolescentes, se indica que el límite de 5 cm para los adultos con sarcoma de tejido blando quizás no sea apropiado en niños más pequeños, en especial, los lactantes. En la revisión se identificó una interacción entre el diámetro del tumor y el área de superficie corporal.[75] Se ha cuestionado esta relación y es necesario estudiarla más para determinar las consecuencias terapéuticas de dicha observación.[76]

Algunos sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatoso en niños tienen mejores desenlaces. Por ejemplo, el pronóstico es excelente en pacientes que presentan un fibrosarcoma infantil durante la lactancia o antes de cumplir los 5 años. Este desenlace excelente se debe a que la cirugía sola logra curar a una cantidad significativa de estos pacientes, el tumor es muy quimiosensible y responde bien al larotrectinib, un inhibidor específico de la cinasa del receptor de tropomiosina.[23,77]

A menudo, los sarcomas de tejido blando en niños mayores y adolescentes tienen un comportamiento semejante a los de pacientes adultos.[23,78] En un gran estudio prospectivo multinacional del Children's Oncology Group (ARST0332 [NCT00346164]) participaron pacientes menores de 30 años con diagnóstico reciente. Se asignó a los pacientes al tratamiento de acuerdo con su grupo de riesgo (definido por la presencia de metástasis, resecabilidad del tumor y los márgenes, así como el tamaño y grado del tumor; para obtener más información consultar la Figura 4).[79][Nivel de evidencia B4]

Diagrama en el que se muestra el grupo de riesgo y la asignación al tratamiento para el ensayo ARST0332 del Children's Oncology Group.

Cada paciente se asignó a 1 de 3 grupos de riesgo y a 1 de 4 grupos de tratamiento. Los grupos de riesgo fueron los siguientes:[79]

  1. Riesgo bajo: tumor de grado bajo no metastásico con resección R0 (resección completa con márgenes negativos al microscópico) o R1 (márgenes positivos al microscopio) o tumor de grado alto ≤5 cm con resección R1.
  2. Riesgo intermedio: tumor de grado alto no metastásico con resección R0 o tumor de grado alto >5 cm con resección R1 o tumor no resecado de cualquier tamaño o grado.
  3. Riesgo alto: tumor metastásico.

Los grupos de tratamiento fueron los siguientes:

  1. Cirugía sola.
  2. Radioterapia (55,8 Gy).
  3. Quimiorradioterapia (quimioterapia y 55,8 Gy de radioterapia).
  4. Quimiorradioterapia neoadyuvante (quimioterapia y 45 Gy de radioterapia; luego, cirugía y refuerzo de radioterapia según los márgenes, y quimioterapia continuada).

La quimioterapia incluyó 6 ciclos de ifosfamida (3 g/m2 por dosis) administrada por vía intravenosa en los días 1 a 3, y 5 ciclos de doxorrubicina (37,5 mg/m2 por dosis) administrada por vía intravenosa en los días 1 y 2 cada 3 semanas, con ajuste de la secuencia de acuerdo con el momento de la cirugía o la radioterapia.

De los 550 pacientes inscritos, se incluyó en el análisis a 529 pacientes evaluables; los resultados de supervivencia se muestran en el Cuadro 3.

Cuadro 3. Resultados de supervivencia del ensayo ARST0332 del Children's Oncology Group
Supervivencia sin complicaciones a 5 años Supervivencia general a 5 años
Grupo de riesgo Episodios/pacientes Estimación (%) Episodios/pacientes Estimación (%)
Bajo 26/222 88,9 (84,0–93,8) 10/222 96,2 (93,2–99,2)
Intermedio 84/227 65,0 (58,2–71,8) 55/227 79,2 (73,4–85,0)
Alto 63/80 21,2 (11,4–31,1) 52/80 35,5 (23,6–47,4)

Los pacientes pediátricos con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso localizado no resecado tienen un pronóstico precario. Solo casi un tercio de los pacientes que recibe tratamientos multimodales permanece sin enfermedad.[71,80]; [81,82][Nivel de evidencia C1] En una revisión italiana de 30 pacientes con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso en sitios viscerales, solo 10 pacientes sobrevivieron a los 5 años. Los factores de pronóstico desfavorable fueron: incapacidad para lograr la resección completa, tamaño tumoral grande, invasión tumoral, subtipo histológico y sitios pleuropulmonares.[83][Nivel de evidencia C1]

El European Pediatric Soft Tissue Sarcoma Study Group (EpSSG) realizó un ensayo prospectivo de pacientes menores de 21 años con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso. El grupo analizó a 206 pacientes con sarcoma sinovial y 363 pacientes con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso de tipo adulto. El tratamiento se administró después de asignar los pacientes a los grupos de riesgo (consultar la Figura 5).[84] Al cabo de una mediana de seguimiento de 80 meses (intervalo intercuartílico, 54,3–111,3) para 467 sobrevivientes, la tasa de supervivencia sin complicaciones (SSC) a 5 años fue del 73,7 % (IC 95 %, 69,7–77,2 %) y la tasa de supervivencia general (SG) fue del 83,8 % (IC 95 %, 80,3–86,7 %). La supervivencia por grupo de tratamiento se indica en el Cuadro 4.[84]

En la imagen se observa un plan de tratamiento para pacientes con sarcoma sinovial o sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatoso de tipo adulto.

Cuadro 4. Desenlaces de supervivencia por grupo de tratamiento en el EpSSG NRSTS 2005 Study
Grupo de tratamiento Tasa de supervivencia sin complicaciones a 5 años (IC 95 %) Tasa de supervivencia general a 5 años (IC 95 %) Tasa de recidiva local
IC = intervalo de confianza; EpSSG = European Pediatric Soft Tissue Sarcoma Study Group; NRSTS = sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso.
Cirugía sola 91,4 % (87,0–94,4 %) 98,1 % (95,0–99,3 %)  
Radioterapia adyuvante sola 75,5 % (46,9–90,1 %) 88,2 % (60,6–96,9 %) 6,7 % (1/15)
Quimioterapia adyuvante con radioterapia o sin esta 65,6 % (54,8–74,5 %) 75,8 % (65,3–83,5 %) 10,8 % (7/65)
Quimioterapia neoadyuvante con radioterapia o sin esta 56,4 % (49,3–63,0 %) 70,4 % ( 63,3–76,4 %) 14,2 % (16/113)

Los autores concluyeron que la terapia adyuvante podría omitirse sin repercusión desfavorable en el grupo de pacientes asignados a cirugía sola. También concluyeron que todavía persiste una dificultad clínica importante, que es mejorar el desenlace de los pacientes con un sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso de tipo adulto y riesgo alto que se someten a resección inicial y aquellos que no se someten a resección inicial.[84]

En un análisis conjunto realizado por centros pediátricos de los Estados Unidos y Europa, el desenlace fue mejor en aquellos pacientes cuya resección tumoral se consideró completa que para los pacientes cuya resección fue incompleta. El desenlace fue mejor para los pacientes sometidos a radioterapia que para los pacientes que no la recibieron.[81][Nivel de evidencia C1]

El tratamiento ideal para cada paciente se debe determinar de modo cuidadoso e individual usando estos factores pronósticos antes de iniciar el tratamiento porque la morbilidad a largo plazo se debe reducir al mínimo mientras la supervivencia sin enfermedad se aumenta al máximo.[30,85,86,87,88,89]

Resúmenes relacionados

Para obtener información sobre otros tipos de sarcoma, consultar los siguientes s:

  • Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil.
  • Tratamiento de los tumores vasculares infantiles.
  • Tratamiento del sarcoma de Ewing y los sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas de hueso y tejido blando (sarcoma de Ewing extraóseo, neuroepitelioma periférico y tumor de Askin).
  • Tratamiento de los tumores de estroma gastrointestinal infantiles.
  • Tratamiento del sarcoma de tejido blando.

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Clasificación histopatológica del sarcoma de tejido blando infantil

Clasificación de los sarcomas de tejido blando de la Organización Mundial de la Salud

El sistema de clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el cáncer representa la nomenclatura común para el cáncer en todo el mundo. En los Estados Unidos, el American Joint Committee on Cancer (AJCC) adoptó este sistema para la estadificación del sarcoma y el College of American Pathologists (CAP) lo usa en los protocolos oncológicos de sarcomas de hueso y tejido blando. La 5.a edición de la clasificación de la OMS para los tumores de tejido blando y hueso se publicó en 2020.[1]

La clasificación por grados para los tumores de tejido blando es un tema polémico. La clasificación de la OMS del año 2020 representa el consenso de varios patólogos expertos en tejidos blandos y genetistas, así como oncólogos, radiólogos y cirujanos. Esta edición además incorpora aspectos morfológicos e información genética en la clasificación. Por ejemplo, se incluyó una categoría de tumores nuevos llamada neoplasias de células fusiformes con reordenamiento de NTRK, mientras que el fibrosarcoma infantil se excluyó de este grupo. En esta clasificación también se define los sarcomas indiferenciados de células pequeñas de hueso y tejido blando, y se separa el sarcoma de Ewing de entidades como los sarcomas con reordenamiento de CIC, los sarcomas con reordenamiento de BCOR y las neoplasias con genes de fusión de EWSR1 con otros genes compañeros diferentes a ETS. El sarcoma de Ewing ahora se ubica en el mismo segmento, pero no en la misma sección de tumores óseos, con el fin de reflejar la variabilidad en los sitios de presentación clínica y las diferentes translocaciones asociadas con esta entidad.[1]

  1. Tumores adipocíticos.
    1. Tumores adipocíticos benignos.
      • Lipoma sin otra indicación (SAI).
      • Lipomatosis.
      • Lipomatosis neural.
      • Lipoblastomatosis.
      • Angiolipoma SAI.
      • Miolipoma.
      • Lipoma condroide.
      • Lipoma de células fusiformes
      • Tumor lipomatoso atípico de células fusiformes o pleomórfico.
      • Hibernoma.
    2. Tumores adipocíticos intermedios (localmente invasores).
      • Tumor lipomatoso atípico.
    3. Tumores adipocíticos malignos.
      • Liposarcoma bien diferenciado, sin otra indicación.
      • Liposarcoma desdiferenciado.
      • Liposarcoma mixoide.
      • Liposarcoma pleomórfico.
      • Liposarcoma mixoide pleomórfico.
  2. Tumores osteocondrales.
    1. Tumores osteocondrales benignos.
      • Condroma SAI.
    2. Tumores osteocondrales malignos.
      • Osteosarcoma extraesquelético.
  3. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos.
    1. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos benignos.
      • Fascitis nodular.
      • Fascitis proliferativa.
      • Miositis proliferativa.
      • Miositis osificante y pseudotumor fibroóseo de los dedos.
      • Fascitis isquémica.
      • Elastofibroma.
      • Hamartoma fibroso de la infancia.
      • Fibromatosis colli.
      • Fibromatosis hialina juvenil.
      • Fibromatosis con cuerpos de inclusión.
      • Fibroma de vaina tendinosa.
      • Fibroblastoma desmoplásico.
      • Miofibroblastoma.
      • Fibroma aponeurótico calcificante.
      • Tumor fibroblástico positivo para EWSR1::SMAD3 (nuevo).
      • Angiomiofibroblastoma.
      • Angiofibroma celular.
      • Angiofibroma SAI.
      • Fibroma nucal.
      • Fibromixoma acral.
      • Fibroma de Gardner.
    2. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos intermedios (localmente invasores).
      • Tumor fibroso solitario benigno.
      • Fibromatosis de tipo palmoplantar.
      • Fibromatosis de tipo desmoide (antes denominada tumor desmoide o fibromatosis agresiva).
      • Lipofibromatosis.
      • Fibroblastoma de células gigantes.
    3. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos intermedios (metastatizan con poca frecuencia).
      • Dermatofibrosarcoma protuberante sin otra indicación.
        • Dermatofibrosarcoma protuberante pigmentado.
        • Dermatofibrosarcoma protuberante fibrosarcomatoso.
        • Dermatofibrosarcoma protuberante mixoide.
        • Dermatofibrosarcoma protuberante en forma de placa.
      • Tumor fibroso solitario SAI.
      • Tumor miofibroblástico inflamatorio.
        • Sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide.
      • Sarcoma miofibroblástico.
      • Tumor fibroblástico superficial positivo para CD34.
      • Sarcoma fibroblástico mixoinflamatorio.
      • Fibrosarcoma infantil.[2]
    4. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos malignos.
      • Tumor fibroso solitario maligno.
      • Fibrosarcoma sin otra indicación.
      • Mixofibrosarcoma.
      • Sarcoma fibromixoide de grado bajo.[3]
      • Fibrosarcoma epitelioide esclerosante.
  4. Tumores de músculo esquelético.
    1. Tumores de músculo esquelético benignos.
      • Rabdomioma SAI.
    2. Tumores de músculo esquelético malignos.
      • Rabdomiosarcoma (embrionario, de células fusiformes o esclerosante, alveolar y pleomórfico). Para obtener más información, consultar Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil.
      • Ectomesenquimoma.
  5. Tumores de músculo liso.
    1. Tumor de músculo liso benigno e intermedio.
      • Leiomioma SAI.
      • Tumor de músculo liso de potencial maligno incierto.
    2. Tumor de músculo liso maligno.
      • Leiomiosarcoma sin otra indicación.

      El angioleiomioma se reclasificó bajo los tumores perivasculares.

  6. Tumores denominados fibrohistiocíticos.
    1. Tumores denominados fibrohistiocíticos benignos.
      • Tumores tenosinoviales de células gigantes SAI.
        • Tumor tenosinovial de células gigantes de tipo difuso.
      • Histiocitoma fibroso benigno profundo.
    2. Tumores denominados fibrohistiocíticos intermedios (metastatizan con poca frecuencia).
      • Tumor fibrohistiocítico plexiforme.
      • Tumor de partes blandas de células gigantes SAI.
    3. Tumores denominados fibrohistiocíticos malignos.
      • Tumor tenosinovial de células gigantes maligno.
  7. Tumores de vaina de nervio periférico.
    1. Tumores de vaina de nervio periférico benignos.
      • Schwannoma SAI (incluye las variantes).
      • Neurofibroma SAI (incluye las variantes).
        • Neurofibroma plexiforme.
      • Perineurioma SAI.
      • Tumor de células granulosas SAI.
      • Mixoma de vaina de nervio.
      • Neuroma circunscrito solitario.
      • Meningioma SAI.
      • Tumor tritón benigno o coristoma neuromuscular.
      • Tumor híbrido de vaina de nervio.
    2. Tumores de vaina de nervio periférico malignos.
      • Tumor maligno de vaina de nervio periférico sin otra indicación.
        • Tumor maligno de vaina de nervio periférico epitelioide.
      • Tumor melánico maligno de vaina de nervio periférico.
      • Tumor de células granulosas maligno.
      • Perineurioma maligno.
  8. Tumores pericíticos (perivasculares).
    1. Tumores pericíticos (perivasculares) benignos e intermedios.
      • Tumor glómico SAI (incluye las variantes).
        • Glomangiomatosis.
      • Miopericitoma.
        • Miofibromatosis.
        • Miofibroma (la clasificación de la OMS más reciente incluye el hemangiopericitoma).
        • Miofibromatosis infantil.
      • Angioleiomioma.
    2. Tumores pericíticos (perivasculares) malignos.
      • Tumor glómico maligno.
  9. Tumores de diferenciación incierta.
    1. Tumores de diferenciación incierta benignos.
      • Mixoma sin otra indicación.
      • Angiomixoma de gran malignidad.
      • Tumor angiectásico hialinizante pleomórfico.
      • Tumor mesenquimal fosfatúrico SAI.
      • Tumor epitelioide perivascular benigno.
      • Angiomiolipoma.
    2. Tumores de diferenciación incierta intermedios (localmente invasores).
      • Tumor fibrolipomatoso hemosiderótico.
      • Angiomiolipoma epitelioide.
    3. Tumores de diferenciación incierta intermedios (metastatizan con poca frecuencia).
      • Fibroxantoma atípico.
      • Histiocitoma fibroso angiomatoide.
      • Tumor fibromixoide osificante SAI.
      • Tumores mixtos SAI.
      • Tumores mixtos malignos, SAI.
      • Mioepitelioma SAI.
    4. Tumores de diferenciación incierta malignos.
      • Tumor mesenquimal fosfatúrico maligno.
      • Neoplasia de células fusiformes con reordenamiento de NTRK (nuevo).
      • Sarcoma sinovial sin otra indicación.
        • Sarcoma sinovial de células fusiformes.
        • Sarcoma sinovial bifásico.
        • Sarcoma sinovial poco diferenciado.
      • Sarcoma epitelioide.
      • Sarcoma alveolar de partes blandas.
      • Sarcoma de células claras sin otra indicación.
      • Condrosarcoma mixoide extraesquelético.
      • Tumor desmoplásico de células redondas pequeñas.
      • Tumor rabdoide SAI (extrarrenal).
      • Tumor epitelioide perivascular maligno.
      • Sarcoma de la íntima.
      • Tumor fibromixoide osificante maligno.
      • Carcinoma mioepitelial.
      • Sarcoma indiferenciado.
      • Sarcoma de células fusiformes indiferenciado.
      • Sarcoma pleomórfico indiferenciado.
      • Sarcoma de células redondas indiferenciado .
  10. Tumores vasculares.
    1. Tumores vasculares benignos.
      • Hemangioma SAI. Para obtener más información, consultar Tratamiento de los tumores vasculares infantiles.
      • Hemangioma intramuscular.
      • Hemangioma arteriovenoso.
      • Hemangioma venoso.
      • Hemangioma epitelioide.
      • Linfangioma SAI.
      • Linfangioma quístico.
      • Hemangioma en penacho adquirido.
    2. Tumor vascular intermedio (localmente invasor).
      • Hemangioendotelioma kaposiforme.
    3. Tumores vasculares intermedios (metastatizan con poca frecuencia).
      • Hemangioendotelioma retiforme.
      • Angioendotelioma papilar intralinfático.
      • Hemangioendotelioma compuesto.
      • Sarcoma de Kaposi.
        • Sarcoma de Kaposi de crecimiento lento clásico.
        • Sarcoma de Kaposi endémico de África.
        • Sarcoma de Kaposi relacionado con el SIDA.
        • Sarcoma de Kaposi iatrogénico.
      • Hemangioendotelioma pseudomiogénico (similar al sarcoma epitelioide).
    4. Tumores vasculares malignos.
      • Hemangioendotelioma epitelioide sin otra indicación.
        • Hemangioendotelioma epitelioide con fusión WWTR1::CAMTA1.
        • Hemangioendotelioma epitelioide con fusión YAP1::TFE3.
      • Angiosarcoma.

Con el incremento del uso de técnicas de secuenciación de última generación y un mayor conocimiento de los inhibidores de tirosina–cinasas aprobados de forma reciente que se dirigen a NTRK y a otros genes, se han identificado nuevos subgrupos de lesiones de tejidos blandos en pediatría que se caracterizan por fusiones de cinasas y presentan características morfológicas similares. Es importante identificar estas entidades raras porque algunas de ellas podrían ser susceptibles al tratamiento con nuevos fármacos. A continuación se describen algunos ejemplos de estas lesiones.[4]

  • Los tumores neurales similares a la lipofibromatosis son tumores superficiales, que por lo común afectan a los niños, y las células son inmunorreactivas para S100. Estos tumores por lo general tienen fusiones en NTRK1, pero es infrecuente que alberguen fusiones en RET o en ALK.
  • Los tumores de células fusiformes positivos para S100 y CD34 que se asemejan a los tumores malignos de vaina del nervio periférico de grado intermedio predominan en niños y adultos jóvenes, y es posible que afecten los huesos y los tejidos blandos. Presentan fusiones en diferentes genes, como RAF1, BRAF, NTRK1 o NTRK2.
  • Las lesiones similares al fibrosarcoma infantil tienen características morfológicas similares a las del fibrosarcoma infantil y afectan con mayor frecuencia a pacientes menores de 2 años. Se forman sobre todo en los sitios intrabdominales. A menudo presentan fusiones que involucran otros genes, como BRAF, NTRK1 o MET.
  • Los sarcomas de células fusiformes con características hemangiopericíticas y miopericíticas a veces afectan a los niños y tienen fusiones en NTRK1.
  • Los sarcomas de células fusiformes positivos para la fusión en RAF1 se encuentran en niños y adultos y a menudo surgen en el tronco. Casi nunca presentan gran malignidad.
  • Los tumores de tejidos blandos positivos para la fusión en BRAF se han relacionado con variantes similares al fibrosarcoma infantil o a los sarcomas de células fusiformes que se asemejan a tumores malignos de vaina de nervio periférico. Estos tumores se han notificado en niños y a menudo afectan la cavidad abdominal.
  • Los tumores positivos para la fusión en RET afectan sobre todo a niños y tienen un fenotipo similar a los de los tumores positivos para la fusión en NTRK. Es posible que exhiban diferenciación fibroblástica y de tipo neural. Estos tumores responden al selpercatinib, un inhibidor de RET de molécula pequeña muy selectivo.[5]

Referencias:

  1. WHO Classification of Tumours Editorial Board: WHO Classification of Tumours. Volume 3: Soft Tissue and Bone Tumours. 5th ed., IARC Press, 2020.
  2. Steelman C, Katzenstein H, Parham D, et al.: Unusual presentation of congenital infantile fibrosarcoma in seven infants with molecular-genetic analysis. Fetal Pediatr Pathol 30 (5): 329-37, 2011.
  3. Evans HL: Low-grade fibromyxoid sarcoma: a clinicopathologic study of 33 cases with long-term follow-up. Am J Surg Pathol 35 (10): 1450-62, 2011.
  4. Antonescu CR: Emerging soft tissue tumors with kinase fusions: An overview of the recent literature with an emphasis on diagnostic criteria. Genes Chromosomes Cancer 59 (8): 437-444, 2020.
  5. Ortiz MV, Gerdemann U, Raju SG, et al.: Activity of the Highly Specific RET Inhibitor Selpercatinib (LOXO-292) in Pediatric Patients With Tumors Harboring RET Gene Alterations. JCO Precis Oncol 4: , 2020.

Sistemas de estadificación y clasificación por grados para el sarcoma de tejido blando infantil

La estadificación clínica tiene una función importante para pronosticar el desenlace clínico y determinar el tratamiento más eficaz del sarcoma de tejido blando infantil. Por ahora, no hay un sistema de estadificación bien aceptado que sea válido para todos los sarcomas infantiles. El sistema del American Joint Committee on Cancer (AJCC) que se usa en adultos no se ha validado en estudios pediátricos.

Aunque no se dispone de un sistema de estadificación estandarizado para los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos en los niños, en la actualidad se usan dos sistemas para estadificar este tipo de sarcomas en niños:[1]

  • Sistema de estadificación quirúrgico-patológico. El sistema de estadificación quirúrgico-patológico que se emplea en el Intergroup Rhabdomyosarcoma Study se basa en la cantidad o el grado de tumor que queda después de la cirugía inicial y en la presencia de metástasis. Este sistema de estadificación se usó en los primeros ensayos del ámbito pediátrico.[2] Para obtener más información, consultar la sección Sistema de estadificación del Intergroup Rhabdomyosarcoma Study.
  • Sistema de estadificación TNM. El sistema de estadificación TNM (tumor, ganglio linfático y metástasis) es una iniciativa conjunta del AJCC (Estados Unidos) y la International Union Against Cancer (mundial). La estadificación se basa en la extensión del tumor (T), el grado de diseminación a los ganglios linfáticos (N) y la presencia de metástasis (M). Para la estadificación del sarcoma de tejido blando de la 8.a edición del AJCC Cancer Staging Manual, consultar los Cuadros 5, 6, 7 y 8.[3,4,5,6,7] En el último ensayo del Children's Oncology Group (COG), se usó la 6.a edición del AJCC Cancer Staging Manual para el sarcoma de tejido blando (con revisión central de patología).[1] Se llevó a cabo una revisión de niños con sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatoso con datos del Surveillance, Epidemiology, and End Results (SEER) Program y se identificaron 941 pacientes entre 1988 y 2007.[8] En esta cohorte se validó la clasificación de riesgo del COG.

Sistema de estadificación del Intergroup Rhabdomyosarcoma Study

Enfermedad no metastásica

  • Grupo I: tumor localizado que se resecó por completo y márgenes negativos en el análisis histológico.
  • Grupo II: tumor sometido a resección macroscópica y residuos microscópicos tumorales en uno o más márgenes, o diseminación a ganglios linfáticos regionales.
    • En el grupo IIA, el tumor localizado se sometió a resección macroscópica y hay enfermedad microscópica residual.
    • En el grupo IIB, la enfermedad regional con compromiso ganglionar se resecó por completo y no hay enfermedad microscópica. Además, se debe obtener un resultado negativo para compromiso del ganglio linfático regional más proximal al paciente y más distal en relación con el tumor.
    • En el grupo IIC, la enfermedad regional con compromiso ganglionar se sometió a resección macroscópica, pero hay indicios de enfermedad microscópica residual en el sitio primario o compromiso histológico del ganglio linfático regional más proximal al sitio de disección.
  • Grupo III: tumor localizado que no se resecó por completo o que solo se sometió a biopsia, o tumor macroscópico residual.

Enfermedad metastásica

  • Grupo IV: cualquier tumor localizado o regional con metástasis a distancia en el momento del diagnóstico. Esto incluye la presencia de células cancerosas en los derrames (pleural o peritoneal) o en el líquido cefalorraquídeo (infrecuente).

Enfermedad recidivante y progresiva

  • Cualquier sarcoma de tejido blando que recidiva después del tratamiento inicial o que progresa después de la radioterapia, la quimioterapia o la cirugía inicial.

Sistema de estadificación TNM

En la 8.a edición del AJCC Cancer Staging Manual, se designó la estadificación según 4 criterios: tamaño del tumor, estado ganglionar, grado histológico y metástasis, además del sitio anatómico primario del tumor (cabeza y cuello; tronco y extremidades; vísceras abdominales o torácicas; retroperitoneo; y tipos histológicos o sitios poco frecuentes). (Consultar los Cuadros 5, 6, 7 y 8).[3,4,5,6,7] Para obtener información sobre los tipos histológicos y los sitios poco frecuentes, consultar el AJCC Cancer Staging Manual.[7]

Cuadro 5. Definiciones de tumor primario (T) para el sarcoma de tejido blando de tronco, extremidades y retroperitoneo; cabeza y cuello; y vísceras abdominales o torácicasa
Categoría T Sarcoma de tejido blando de tronco, extremidades y retroperitoneo Sarcoma de tejido blando de cabeza y cuello Sarcoma de tejido blando de vísceras abdominales o torácicas
a Adaptado de O'Sullivan et al.,[3]Yoon et al.,[4]Raut et al.,[5]y Pollock et al.[6]
TX Tumor primario no evaluable. Tumor primario no evaluable. Tumor primario no evaluable.
T0 Sin indicios de tumor primario.    
T1 Tumor ≤5 cm en su mayor dimensión. Tumor ≤2 cm. Tumor limitado al órgano.
T2 Tumor >5 cm y ≤10 cm en su mayor dimensión. Tumor >2 cm y ≤4 cm. Diseminación del tumor a tejido fuera del órgano.
T2a     Invasión de la serosa o el peritoneo visceral.
T2b     Diseminación fuera de la serosa (mesenterio).
T3 Tumor >10 cm y ≤15 cm en su mayor dimensión. Tumor >4 cm. Invasión de otro órgano.
T4 Tumor >15 cm en su mayor dimensión. Tumor con invasión en las estructuras adyacentes. Compromiso multifocal.
T4a   Tumor con invasión orbitaria, invasión a la base del cráneo o la duramadre, invasión del compartimiento visceral central, compromiso de los huesos de la cara o invasión de los músculos pterigoideos. Multifocal (2 sitios).
T4b   Tumor con invasión del parénquima encefálico, atrapamiento de la arteria carótida, invasión muscular prevertebral o compromiso del sistema nervioso central por diseminación perineural. Multifocal (3–5 sitios).
T4c     Multifocal (>5 sitios).
Cuadro 6. Definiciones de ganglio linfático regional (N) para el sarcoma de tejido blando de cabeza y cuello; tronco y extremidades; vísceras abdominales o torácicas; y retroperitoneoa
a Adaptado de O'Sullivan et al.,[3]Yoon et al.,[4]Raut et al.,[5]y Pollock et al.[6]
b Para el sarcoma de tejido blando de vísceras abdominales o torácicas, N0 = no hay compromiso ganglionar o no se conoce el estado ganglionar; N1 = compromiso ganglionar.
N0 Sin metástasis ganglionares regionales o no se conoce el estado ganglionar.b
N1 Metástasis ganglionares regionales.b
Cuadro 7. Definiciones de metástasis a distancia (M) para el sarcoma de tejido blando de cabeza y cuello; tronco y extremidades; vísceras abdominales o torácicas; y retroperitoneoa
a Adaptado de O'Sullivan et al.,[3]Yoon et al.,[4]Raut et al.,[5]y Pollock et al.[6]
b Para el sarcoma de tejido blando de vísceras abdominales o torácicas, M0 = no hay metástasis; M1 = presencia de metástasis.
M0 Sin metástasis a distancia.b
M1 Metástasis a distancia.b
Cuadro 8. Grupos de estadios pronósticos del AJCC para el sarcoma de tejido blando de tronco, extremidades y retroperitoneoa
Estadio T N M Grado
T = tumor primario; N = ganglio linfático regional; M = metástasis a distancia.
a Adaptado de Yoon et al.[4]y Pollock et al.[6]
b Estadio IIIB del sarcoma de tejido blando de retroperitoneo; estadio IV del sarcoma de tejido blando de tronco y extremidades.
IA T1 N0 M0 G1, GX
IB T2, T3, T4 N0 M0 G1, GX
II T1 N0 M0 G2, G3
IIIA T2 N0 M0 G2, G3
IIIB T3, T4 N0 M0 G2, G3
IIIB/IVb Cualquier T N1 M0 Cualquier G
IV Cualquier T Cualquier N M1 Cualquier G

Sistema de clasificación patológica por grados para el sarcoma de tejido blando

En la mayoría de los casos, una clasificación histopatológica exacta del sarcoma de tejido blando por sí sola no ofrece suficiente información sobre el comportamiento clínico. Por lo tanto, se usan varios parámetros histológicos para el proceso de asignación del grado; entre ellos, los siguientes:

  • Grado de celularidad.
  • Pleomorfismo celular.
  • Actividad mitótica.
  • Grado de necrosis.
  • Crecimiento invasor.

Este proceso se utiliza para mejorar la correlación entre los hallazgos histológicos y el desenlace clínico.[9] En los niños, la clasificación por grados para el sarcoma de tejido blando se complica debido a ciertos factores como el pronóstico, la edad del paciente, el alcance de la resección quirúrgica y la capacidad del tumor de metastatizar. Por ejemplo, los niños menores de 4 años con fibrosarcoma infantil y hemangiopericitoma tienen un pronóstico favorable, mientras que es posible que el histiocitoma fibroso angiomatoide y el dermatofibrosarcoma protuberante recidiven a nivel local cuando no se resecan por completo, pero no suelen metastatizar.

Es difícil evaluar la validez de un sistema de clasificación por grados en la población pediátrica debido a que estas neoplasias son muy raras. En marzo de 1986, el Pediatric Oncology Group (POG) dirigió un estudio prospectivo sobre sarcomas de tejido blando infantil diferentes al rabdomiosarcoma y creó el sistema de clasificación por grados del Pediatric Oncology Group. En el análisis del desenlace de los pacientes con sarcomas de tejido blando localizados diferentes al rabdomiosarcoma, se indicó que los pacientes con tumores de grado 3 tuvieron desenlaces significativamente más precarios que aquellos con lesiones de grado 1 o 2. Estos resultados indican que el sistema permite predecir con exactitud el comportamiento clínico de los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos.[9,10,11]

Los sistemas de clasificación por grados formulados por el POG y el French Federation of Comprehensive Cancer Centers (Fédération Nationale des Centres de Lutte Contre Le Cancer [FNCLCC]) Sarcoma Group se describen más adelante.

Sistema de clasificación por grados del Pediatric Oncology Group

El sistema de clasificación por grados del Pediatric Oncology Group (POG) se describe a continuación.[9] Es un sistema de clasificación por grados con valor histórico, que ya no se usa para el tratamiento.

Grado I

Las lesiones de grado I se clasifican según el tipo histológico, las características histocitológicas bien diferenciadas o la edad del paciente.

  • Histiocitoma fibroso angiomatoide.
  • Dermatofibrosarcoma protuberante.
  • Liposarcoma mixoide o bien diferenciado.
  • Condrosarcoma mixoide.
  • Tumor maligno de vaina del nervio periférico bien diferenciado.
  • Fibrosarcoma bien diferenciado o infantil (edad ≤4 años).
  • Hemangiopericitoma bien diferenciado o infantil (edad ≤4 años).

Grado II

Las lesiones de grado II son sarcomas de tejido blando cuyo diagnóstico histológico no forma parte de los grados I o III (<5 mitosis por 10 campos de gran aumento o necrosis <15 %):

  • Un 15 % o menos de la superficie presenta necrosis (criterio primario).
  • El recuento mitótico es <5 figuras mitóticas por 10 campos de gran aumento (objetivo 40X) (criterio primario).
  • La atipia nuclear no es acentuada (criterio secundario).
  • El tumor no se caracteriza por celularidad (criterio secundario).

Grado III

Las lesiones de grado III se parecen a las lesiones de grado II, incluyen tumores con un comportamiento clínico muy maligno en virtud del diagnóstico histológico; también incluye los tumores que no son de grado I (>4 mitosis por 10 campos de gran aumento o necrosis >15 %):

  • Sarcoma alveolar de partes blandas.
  • Sarcoma osteogénico extraesquelético.
  • Tumor tritón maligno.
  • Condrosarcoma mesenquimatoso.
  • Liposarcoma pleomórfico o de células redondas.
  • Cualquier otro sarcoma que no pertenezca al grado I con necrosis >15 % o ≥5 figuras mitóticas por 10 campos de gran aumento (objetivo 40X). La atipia acentuada y la celularidad tienen menor utilidad pronóstica, pero quizás sirvan para ubicar los tumores en esta categoría.

Sistema de clasificación por grados de la Fédération Nationale des Centres de Lutte Contre Le Cancer

El sistema de clasificación por grados histológicos de la Fédération Nationale des Centres de Lutte Contre Le Cancer (FNCLCC) se formuló para adultos con sarcoma de tejido blando. El propósito del sistema de clasificación por grados es predecir cuáles pacientes presentarán metástasis y determinar si se beneficiarían de la quimioterapia posoperatoria.[12,13] El sistema se describe en el Cuadro 9 y el Cuadro 10.

Cuadro 9. Sistema de clasificación por grados histológicos de la FNCLCC
FNCLCC = Fédération Nationale des Centres de Lutte Contre Le Cancer; CGA = campo de gran aumento.
Diferenciación tumoral  
Puntaje 1 Sarcoma que se asemeja mucho al tejido mesenquimatoso adulto normal (por ejemplo, liposarcoma bien diferenciado)
Puntaje 2 Sarcomas con tipificación histológica indiscutible (por ejemplo, liposarcoma mixoide)
Puntaje 3 Sarcomas embrionarios e indiferenciados, sarcomas de tipo dudoso y sarcomas sinoviales
 
Recuento mitótico  
Puntaje 1 0–9 mitosis por 10 CGA
Puntaje 2 10–19 mitosis por 10 CGA
Puntaje 3 ≥20 mitosis por 10 CGA
 
Necrosis tumoral  
Puntaje 0 Sin necrosis
Puntaje 1 Necrosis tumoral <50 %
Puntaje 2 Necrosis tumoral ≥50 %
Cuadro 10. Grado histológico determinado por el puntaje total
Puntaje total Grado histológico
2–3 Grado I
4–5 Grado II
6–8 Grado III

Importancia pronóstica de la clasificación tumoral por grados

Los sistemas de clasificación por grados POG y FNCLCC han probado tener utilidad pronóstica para el sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso en niños y adultos.[14,15,16,17,18] En un estudio de 130 tumores de niños y adolescentes con sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos inscritos en 3 ensayos clínicos prospectivos, se encontró una correlación entre los grados POG y FNCLCC asignados. No obstante, la clasificación por grados no se correlacionó en todos los casos; 44 pacientes cuyos tumores recibieron grados dispares (grado POG 3, grado FNCLCC 1 o 2) presentaron desenlaces intermedios entre los asignados al mismo tiempo al grado 3 y los grados 1 y 2. Se identificó que un índice mitótico de 10 o mayor fue un factor pronóstico importante.[19]

En el estudio del Children's Oncology Group (COG) ARST0332 (NCT00346164) se comparó el sistema de clasificación por grados POG y el sistema FNCLCC como parte de una estrategia prospectiva basada en el riesgo. En el estudio se encontró que además de la profundidad del tumor y del grado de invasión, el grado FNCLCC se asoció de manera directa con la supervivencia sin complicaciones y la supervivencia general.[20] En el estudio del COG ARST1321 (NCT02180867), que ya culminó, se usó el sistema FNCLCC para asignar el grado histológico.

Referencias:

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  2. Maurer HM, Beltangady M, Gehan EA, et al.: The Intergroup Rhabdomyosarcoma Study-I. A final report. Cancer 61 (2): 209-20, 1988.
  3. O'Sullivan B, Maki RG, Agulnik M, et al.: Soft tissue sarcoma of the head and neck. In: Amin MB, Edge SB, Greene FL, et al., eds.: AJCC Cancer Staging Manual. 8th ed. Springer; 2017, pp 499-505.
  4. Yoon SS, Maki RG, Asare EA, et al.: Soft tissue sarcoma of the trunk and extremities. In: Amin MB, Edge SB, Greene FL, et al., eds.: AJCC Cancer Staging Manual. 8th ed. Springer; 2017, pp 507-15.
  5. Raut CP, Maki RG, Baldini EH, et al.: Soft tissue sarcoma of the abdomen and thoracic visceral organs. In: Amin MB, Edge SB, Greene FL, et al., eds.: AJCC Cancer Staging Manual. 8th ed. Springer; 2017, pp 517-21.
  6. Pollock RE, Maki RG, Baldini EH, et al.: Soft tissue sarcoma of the retroperitoneum. In: Amin MB, Edge SB, Greene FL, et al., eds.: AJCC Cancer Staging Manual. 8th ed. Springer; 2017, pp 531-7.
  7. Maki RG, Folpe AL, Guadagnolo BA, et al.: Soft tissue sarcoma - unusual histologies and sites. In: Amin MB, Edge SB, Greene FL, et al., eds.: AJCC Cancer Staging Manual. 8th ed. Springer; 2017, pp 539-45.
  8. Waxweiler TV, Rusthoven CG, Proper MS, et al.: Non-Rhabdomyosarcoma Soft Tissue Sarcomas in Children: A Surveillance, Epidemiology, and End Results Analysis Validating COG Risk Stratifications. Int J Radiat Oncol Biol Phys 92 (2): 339-48, 2015.
  9. Parham DM, Webber BL, Jenkins JJ, et al.: Nonrhabdomyosarcomatous soft tissue sarcomas of childhood: formulation of a simplified system for grading. Mod Pathol 8 (7): 705-10, 1995.
  10. Recommendations for the reporting of soft tissue sarcomas. Association of Directors of Anatomic and Surgical Pathology. Mod Pathol 11 (12): 1257-61, 1998.
  11. Skytting B, Meis-Kindblom JM, Larsson O, et al.: Synovial sarcoma--identification of favorable and unfavorable histologic types: a Scandinavian sarcoma group study of 104 cases. Acta Orthop Scand 70 (6): 543-54, 1999.
  12. Coindre JM, Terrier P, Guillou L, et al.: Predictive value of grade for metastasis development in the main histologic types of adult soft tissue sarcomas: a study of 1240 patients from the French Federation of Cancer Centers Sarcoma Group. Cancer 91 (10): 1914-26, 2001.
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Aspectos generales de las opciones de tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil

Debido a que el sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso infantil es raro, el tratamiento lo debe coordinar un equipo multidisciplinario que incluya oncólogos (pediatra o médico), patólogos, cirujanos y radioncólogos para todos los niños, adolescentes y adultos jóvenes con estos tumores. Además, con el fin de definir mejor la evolución natural del tumor y la respuesta al tratamiento, se deberá considerar la participación de los niños con estas neoplasias raras en protocolos de tratamiento nacionales o institucionales. Para obtener más información sobre ensayos clínicos en curso, consultar el portal de Internet del NCI.

El Children's Oncology Group (COG) dirigió un ensayo prospectivo no aleatorizado (ARST0332 [NCT00346164]) para pacientes con sarcoma de tejido blando.[1]

La resección quirúrgica de los tumores primarios se clasificó como sigue:

  • R0 cuando se hizo una resección completa y los márgenes fueron negativos al microscopio.
  • R1 cuando los márgenes fueron positivos al microscopio.
  • R2 cuando quedó tumor residual macroscópico después de la resección.

Los pacientes se asignaron a 1 de los 3 grupos de riesgo siguientes:

  1. Riesgo bajo. Tumor de grado bajo no metastásico con resección R0 o R1 o tumor de grado alto ≤5 cm con resección R1.
  2. Riesgo intermedio. Tumor de grado alto no metastásico con resección R0 o tumor de grado alto >5 cm con resección R1, o tumor no resecado de cualquier tamaño o grado.
  3. Riesgo alto. Tumor metastásico.

Los grupos de tratamiento fueron los siguientes:

  1. Cirugía sola.
  2. Radioterapia (55,8 Gy).
  3. Quimiorradioterapia (quimioterapia y 55,8 Gy de radioterapia).
  4. Quimiorradioterapia neoadyuvante (quimioterapia y 45 Gy de radioterapia; luego, cirugía y refuerzo de radioterapia según los márgenes, y quimioterapia continuada).

La quimioterapia incluyó 6 ciclos de ifosfamida intravenosa (3 g/m2 por dosis) en los días 1 a 3, y 5 ciclos de doxorrubicina IV (37,5 mg/m2 por dosis) en los días 1 a 2 cada 3 semanas, con ajuste de la secuencia de acuerdo con el momento de la cirugía o la radioterapia.

El análisis incluyó a 529 pacientes evaluables: riesgo bajo (n = 222), riesgo intermedio (n = 227) y riesgo alto (n = 80). Los pacientes sometidos a cirugía sola (n = 205), radioterapia (n = 17), quimiorradioterapia (n = 111) y quimiorradioterapia neoadyuvante (n = 196).

En el momento de una mediana de seguimiento de 6,5 años (intervalo intercuartílico [IIQ], 4,9–7,9), la tasa de supervivencia sin complicaciones (SSC) a 5 años y la tasa de supervivencia general (SG), por grupo de riesgo, fueron las siguientes:

  • Grupo de riesgo bajo. Tasa de SSC, 88,9 % (intervalo de confianza [IC] 95 %, 84,0 %–93,8 %) y la tasa de SG, 96,2 % (IC 95 %, 93,2 %–99,2 %).
  • Grupo de riesgo intermedio. Tasa de SSC, 65,0 % (IC 95 %, 58,2 %–71,8 %) y la tasa de SG, 79,2 % (IC 95 %, 73,4 %–85,0 %).
  • Grupo de riesgo alto. Tasa de SSC, 21,2 % (IC 95 %, 11,4 %–31,1 %) y la tasa de SG, 35,5 % (IC 95 %, 23,6 %–47,4 %).

Los autores concluyeron que las características clínicas previas al tratamiento son útiles para definir el riesgo de fracaso del tratamiento y estratificar a los pacientes jóvenes de sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso para asignarlos a un tratamiento adaptado al riesgo. La mayoría de los pacientes de riesgo bajo se pueden curar sin terapia adyuvante, de manera que evitan las conocidas complicaciones a largo plazo. La supervivencia sigue siendo mejorable para los pacientes de riesgo intermedio y riesgo alto; estos pacientes necesitan tratamientos novedosos.

Cirugía

La resección quirúrgica del tumor primario es el tratamiento principal de la mayoría de los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos. En el estudio del COG ARST0332 (NCT00346164), alrededor del 37 % de los pacientes menores de 30 años se trataron con cirugía sola.[1] Otro 36 % de los pacientes se sometió a resección quirúrgica después de la quimiorradioterapia neoadyuvante. Es muy recomendable la participación de un cirujano experto en la resección de sarcomas de tejido blando.

Después de obtener una biopsia adecuada y establecer el diagnóstico patológico, se debe hacer todos los intentos por resecar el tumor primario. La exhaustividad de la resección predice el desenlace. En el estudio COG ARST0332, las resecciones completas con márgenes negativos al microscopio (R0) produjeron los mejores desenlaces con tasas de SSC a 5 años del 84 %. La resección con márgenes positivos al microscopio (R1) condujo a una tasa de SSC del 66 %. La resección con enfermedad residual macroscópica (R2) condujo a una tasa de EFS del 49 %. Las tasas de SG a 5 años fueron del 93 % para la resecciones R0, del 80 % para las resecciones R1 y del 63 % para las resecciones R2.[1] En los pacientes sometidos solo a una cirugía, la tasa de SSC a 5 años fue del 96 % en los pacientes con tumores de grado bajo con resecciones R0, del 81 % en los pacientes con tumores de grado bajo con resecciones R1 y del 84 % en los pacientes con tumores de grado alto menores de 5 cm con resecciones R0.

El momento de la cirugía depende de la evaluación de la factibilidad y morbilidad de esta. En el estudio COG ARST0332, los desenlaces fueron casi idénticos para los pacientes de riesgo intermedio que lograron una resección R0 o R1 tras una cirugía inicial o que se hizo después de la quimiorradioterapia neoadyuvante (70 % vs. 71 %, respectivamente). Fue más probable que se lograra una resección R0 después de terapia neoadyuvante.[1] Estas observaciones también aplican a los tumores de grado alto, donde la capacidad para lograr la resección R0 o R1 fue el predictor más importante de la SSC. El tratamiento con quimiorradioterapia neoadyuvante se relacionó con el uso de dosis de radioterapia más bajas y tasas más altas de resección R0.[2] Se debe determinar la resecabilidad en el momento del diagnóstico, con énfasis en obtener márgenes negativos sin pérdida de forma o función.

Si con la cirugía inicial no se logran obtener márgenes tisulares negativos en el estudio patológico o si la cirugía inicial se llevó a cabo cuando no se sabía que había un cáncer, el paciente se somete a una nueva resección del área afectada para obtener márgenes limpios, aunque no necesariamente amplios.[3,4,5,6] Este principio quirúrgico es correcto aunque no se haya detectado una masa en las imágenes por resonancia magnética tras la cirugía inicial.[7]; [8][Nivel de evidencia C1]

Las metástasis ganglionares regionales en el momento del diagnóstico son inusuales y es más probable que aparezcan en los sarcomas epitelioides y de células claras.[9,10] El uso de la biopsia de ganglio linfático centinela como procedimiento de estadificación para el sarcoma de tejido blando es objeto de controversia. Sin embargo, en adultos con sarcoma de células claras y sarcoma epitelioide, el procedimiento quizás sea útil para la atención de determinados casos. No hay datos suficientes para respaldar el uso de la biopsia de ganglio linfático centinela en el tratamiento de pacientes pediátricos con otros sarcomas de tejidos blandos no rabdomiosarcomatosos.[11,12,13,14,15,16]

Radioterapia

Los factores a tomar en cuenta para administrar la radioterapia se basan en la posibilidad de que una cirugía, con quimioterapia o sin esta, permita obtener control local sin pérdida de órganos vitales ni deficiencias funcionales, cosméticas o psicológicas importantes. Esto variará de acuerdo con los siguientes aspectos:

  • Características del paciente (por ejemplo, edad y sexo).
  • Características del tumor (por ejemplo, características histopatológicas, sitio, tamaño y grado).
  • Uso de tratamiento quirúrgico y el estado de los márgenes.
  • Expectativas con respecto a la morbilidad causada por la radiación (por ejemplo, alteración en el desarrollo óseo o muscular, lesión orgánica o neoplasia subsiguiente).

Es posible administrar la radioterapia de manera preoperatoria o posoperatoria. También se utiliza como terapia definitiva en situaciones poco comunes cuando no se lleva a cabo una resección quirúrgica.[17] El tamaño del campo de radiación y la dosis se basan en características del paciente y del tumor, así como en el procedimiento quirúrgico específico.[18] La radioterapia, preoperatoria o posoperatoria, se relacionó con una mejora de la SG en comparación con una cirugía sola.[19]

La radioterapia preoperatoria se relacionó con tasas excelentes de control local.[20,21,22] Este abordaje tiene ventajas, como dirigirse a volúmenes más pequeños de tejido porque no se necesita tratar el lecho posquirúrgico y reducir un poco la dosis de radiación porque no se presenta la hipoxia relativa propia de la perturbación quirúrgica de la vasculatura, y no hay cicatrización. La radioterapia preoperatoria se relacionó con un aumento de la tasa de complicaciones de las heridas en los adultos, sobre todo en tumores de la extremidad inferior, sin embargo la gravedad de estas complicaciones es cuestionable.[23] Por otro lado, la radioterapia preoperatoria a veces produce menos fibrosis que los abordajes posoperatorios, quizás por el volumen y la dosis más bajas.[24] El método de radioterapia tiene un efecto en la conservación del tejido sano. En comparación con la radioterapia conformada tridimensional, la radioterapia de intensidad modulada tiene la capacidad de disminuir la dosis de radiación que se dirige a la piel y la epífisis cuando se irradia un sarcoma de extremidad.[25]

Los sarcomas retroperitoneales son particulares porque la radiosensibilidad del intestino a las lesiones hace menos aconsejable la radioterapia posoperatoria.[26,27] Las adherencias posoperatorias y la inmovilidad del intestino aumentan el riesgo de lesión causada por cualquier dosis de radiación. Esto se contrapone con el abordaje preoperatorio en el que el tumor a menudo desplaza el intestino fuera del campo de radiación y cualquier parte expuesta del intestino es más móvil, lo que disminuye la exposición de segmentos intestinales específicos.

También es posible administrar la radioterapia de manera posoperatoria. En general, se indica el uso de radiación en pacientes con márgenes quirúrgicos inadecuados y tumores voluminosos de grado alto.[28,29] Esto es importante, en especial, en tumores de grado alto con márgenes tumorales de menos de 1 cm.[30,31]; [32][Nivel de evidencia C3] Con la combinación de una resección R0 (margen negativo) y radioterapia, es posible lograr el control local del tumor primario en el 90 % de los pacientes con sarcomas de extremidades, del 70 % al 75 % de los pacientes con sarcomas retroperitoneales y en el 80 % de los pacientes en general.[33,34,35,36,37]

En determinadas situaciones, es posible aplicar braquiterapia y radiación intraoperatoria.[34,38,39]; [40][Nivel de evidencia C2]

El volumen y la dosis de radiación dependen de las características tumorales, quirúrgicas y del paciente descritas antes, así como de los siguientes aspectos:

  • Edad del paciente y potencial de crecimiento.
  • Capacidad de evitar órganos vitales, láminas epifisarias y vasos linfáticos (pero no los haces neurovasculares que son relativamente tolerantes a la radiación).
  • Resultados funcionales y cosméticos.

Las dosis acostumbradas de radiación preoperatoria son de 45 Gy a 50 Gy, y se considera la aplicación de un refuerzo posoperatorio de 10 Gy a 20 Gy si los márgenes de resección son positivos para compromiso macroscópico o microscópico, o cuando se piensa usar braquiterapia cuando se anticipa una resección subtotal. Además, incluso en el entorno preoperatorio, se puede considerar la administración de un refuerzo adicional de radiación a una dosis de 60 Gy en las áreas del tumor que se prevé que tengan riesgo de enfermedad residual microscópica (por ejemplo, áreas del tumor adyacentes a tejidos normales importantes) que no es posible extirpar con márgenes adecuados. Esto se logra con una dosis de refuerzo integrada de forma simultánea (es decir, un área de dosis más alta dentro del volumen de una dosis más baja) o que se administra en un pequeño campo de radiación después de tratar el volumen inicial con una dosis de 45 Gy a 50 Gy. También hay que tener en cuenta que no hay datos que documenten la eficacia del refuerzo posoperatorio en áreas con márgenes positivos al microscopio.[41] La dosis de radiación posoperatoria es de 55 Gy a 60 Gy para las resecciones R0, hasta 65 Gy para las resecciones R1 (márgenes positivos al microscopio) y más alta cuando hay enfermedad macroscópica residual irresecable en función de las metas generales de tratamiento (por ejemplo, control definitivo local vs. paliación).

Los márgenes de radiación suelen ser de 2 cm a 4 cm en el plano longitudinal y abarcan los planos transversales de las fascias.[42,43]

Quimioterapia

La función de la quimioterapia posoperatoria sigue siendo poco clara.[44]

Evidencia (falta de claridad en relación con la quimioterapia posoperatoria):

  1. En un metanálisis con datos de todos los ensayos aleatorizados de adultos con sarcoma de tejido blando se observó lo siguiente:[45]
    • la supervivencia sin recidiva fue mejor en los pacientes con tumores de grado alto de más de 5 cm sometidos a quimioterapia posoperatoria.
  2. En un ensayo europeo, se asignó al azar a adultos con sarcoma de tejido blando completamente resecado para someterse a observación o quimioterapia posoperatoria con ifosfamida y doxorrubicina.[46][Nivel de evidencia A1]
    • La quimioterapia posoperatoria no se relacionó con una mejora de la SSC o la SG.
    • Es difícil extrapolar este ensayo a pacientes pediátricos porque el ensayo tuvo las siguientes características: 1) una amplia variedad de características histológicas; 2) una dosis relativamente baja de ifosfamida; 3) se aplazó la radioterapia definitiva para los pacientes asignados a quimioterapia hasta que esta finalizara; 4) casi la mitad de los pacientes en el ensayo tenían tumores de grado intermedio.
    • En la discusión, los autores integraron sus pacientes con los de las series publicadas antes, incluso los del metanálisis europeo, y concluyeron que los resultados indicaban un beneficio de la quimioterapia posoperatoria.
  3. En el ensayo pediátrico prospectivo más numeroso, no se logró probar beneficio de la vincristina, dactinomicina, ciclofosfamida y doxorrubicina posoperatorias.[33]
  4. La doxorrubicina y la ifosfamida se usaron en el ensayo fundamentado en el riesgo del COG, ARST0332 (NCT00346164).[1][Nivel de evidencia C1]
    • Aunque este no fue un estudio aleatorizado, en los resultados al cabo de 2,6 años se observó que los pacientes con tumores no metastásicos y de riesgo alto (>5 cm y grado alto) sometidos a resección macroscópica, radioterapia y doxorrubicina con ifosfamida posoperatorias tuvieron una tasa de SSC a 5 años del 67,2 % y una tasa de SG del 78 %.
    • En aquellos pacientes con enfermedad metastásica tratados con quimioterapia y radioterapia preoperatorias, se calculó una tasa de SSC a 5 años del 21,2 %; la tasa de SG fue del 35,5 %.

Terapia dirigida

Se ha contemplado el uso de inhibidores de la angiogénesis y del blanco de la rapamicina en los mamíferos (mTOR) para el tratamiento de sarcomas de tejido blando en adultos, pero no en niños.

Evidencia (terapia dirigida para adultos con sarcoma de tejido blando):

  1. En un ensayo con 711 pacientes que lograron una respuesta o enfermedad estable luego de la quimioterapia, los pacientes se asignaron al azar para recibir ridaforólimus o un placebo.[47]
    • La administración de ridaforólimus se relacionó con una mejora de 3 semanas en la supervivencia sin progresión (SSP) en comparación con el placebo.
  2. En otro ensayo de adultos con sarcoma de tejido blando metastásico que progresó después de la quimioterapia, 371 pacientes se asignaron al azar para comparar el pazopanib con un placebo.[48]
    • La mediana de SSP en el grupo de pazopanib fue de 4,6 meses comparada con 1,6 meses en el grupo de placebo. No se presentaron diferencias en la SG entre los 2 grupos.
  3. En un estudio de 182 pacientes adultos previamente tratados por recidiva de liposarcoma, leiomiosarcoma, sarcoma sinovial y otros sarcomas, los pacientes se asignaron al azar para recibir regorafenib o un placebo.[49]
    • Los pacientes con tumores no adipocíticos tratados con regorafenib presentaron mejoras significativas en la SSP cuando se compararon con los pacientes que recibieron placebo.

El consorcio de cáncer de COG y NRG Oncology dirigió un ensayo aleatorizado de pazopanib añadido a quimioterapia neoadyuvante (doxorrubicina e ifosfamida) y radioterapia preoperatoria en niños y adultos con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso. Los pacientes con tumores mayores a 5 cm y enfermedad de grado intermedio o alto eran aptos para participar. El criterio de valoración del ensayo fue la respuesta tumoral patológica después de la terapia adyuvante. La inscripción al estudio se cerró de manera anticipada porque en el análisis interino planificado se observó que se cruzó el límite para una respuesta patológica. Se inscribieron 81 pacientes, pero solo se obtuvieron datos de respuesta para 42 (52 %) (17 pacientes de cada grupo interrumpieron el tratamiento por progresión, toxicidad intolerable, decisión propia o del médico).[50]

  • En el grupo de control, 4 de 18 pacientes (22 %) exhibía más de un 90 % de necrosis en el momento de la resección, en comparación con 14 de 24 pacientes (58 %) en el grupo tratado con pazopanib, lo que dio cumplimiento con los criterios para interrupción anticipada del estudio.
  • La toxicidad fue más alta en el grupo de pazopanib, sobre todo por el aumento de la mielodepresión. Las complicaciones de la herida también fueron más frecuentes en el grupo de pazopanib.
  • Se necesita un seguimiento más prolongado para notificar las diferencias en la SG o la SSC.

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Consideraciones especiales para el tratamiento de niños con sarcoma de tejido blando

El cáncer en niños y adolescentes es infrecuente, aunque desde 1975 se ha observado un aumento gradual de la incidencia general.[1] Los niños y adolescentes con cáncer se deben derivar a centros médicos que cuenten con equipos multidisciplinarios de especialistas en oncología con experiencia en el tratamiento de los cánceres que se presentan en la niñez y la adolescencia. Este equipo multidisciplinario incorpora la pericia de los siguientes profesionales de atención de la salud y otros para asegurar que los niños reciban el tratamiento, los cuidados médicos de apoyo y la rehabilitación que les permitan lograr una supervivencia y calidad de vida óptimas:

  • Médicos de atención primaria.
  • Médicos especializados en cirugía pediátrica.
  • Radioncólogos pediatras.
  • Oncólogos o hematólogos pediatras.
  • Especialistas en rehabilitación.
  • Enfermeros especializados en pediatría.
  • Trabajadores sociales.
  • Profesionales de la vida infantil.
  • Psicólogos.

Para obtener información específica sobre los cuidados médicos de apoyo para niños y adolescentes con cáncer, consultar los resúmenes de Cuidados médicos de apoyo.

La American Academy of Pediatrics estableció pautas para los centros de oncología pediátrica y su función en el tratamiento de los pacientes de cáncer infantil.[2] En estos centros de oncología pediátrica, se dispone de ensayos clínicos para la mayoría de los tipos de cáncer que se presentan en niños y adolescentes, y se ofrece la oportunidad de participar a la mayoría de los pacientes y familiares. Es de vital importancia la evaluación multidisciplinaria en centros de oncología pediátrica que cuenten con experiencia quirúrgica y radioterapéutica, con el fin de asegurar el mejor desenlace clínico en estos pacientes. Aunque una proporción significativa de los pacientes se cura con una cirugía, con radioterapia o sin esta, la adición de quimioterapia quizás sea beneficiosa en subgrupos de niños con esta enfermedad y, por lo tanto, se recomienda su participación en ensayos clínicos. Por lo general, los ensayos clínicos para los niños y adolescentes con cáncer se diseñan a fin de comparar un tratamiento que parece mejor con el tratamiento estándar actual. La mayoría de los avances en la identificación de tratamientos curativos para los cánceres infantiles se lograron mediante ensayos clínicos. Para obtener más información sobre ensayos clínicos en curso, consultar el portal de Internet del NCI.

Muchas de las estrategias terapéuticas para niños y adolescentes con tumores de tejido blando son similares a las de pacientes adultos, aunque hay diferencias importantes. Por ejemplo, las características biológicas de la neoplasia en pacientes pediátricos a veces difieren mucho de las lesiones en adultos. Además, los procedimientos para conservar un miembro son más difíciles de llevar a cabo en pacientes pediátricos. La morbilidad relacionada con la radioterapia, en especial, en lactantes y niños pequeños, suele ser mucho mayor que la observada en adultos.[3]

En los últimos 20 años, la mejora en los desenlaces a partir de los tratamientos multimodales en adultos y niños con sarcomas de tejido blando ha hecho que aumenten las preocupaciones sobre el potencial de efectos secundarios a largo plazo causados por este tratamiento en niños; en especial, si se tiene en cuenta una esperanza de vida más prolongada para los niños que para los adultos. Por lo tanto, se debe individualizar el tratamiento de los niños y adolescentes con sarcoma de tejido blando no rabdomiosarcomatoso con el fin de aumentar al máximo el control tumoral y reducir la morbilidad a largo plazo. Se debe inscribir a estos pacientes en estudios prospectivos en los que se evalúe con exactitud cualquier complicación posible.[4]

Referencias:

  1. Smith MA, Altekruse SF, Adamson PC, et al.: Declining childhood and adolescent cancer mortality. Cancer 120 (16): 2497-506, 2014.
  2. American Academy of Pediatrics: Standards for pediatric cancer centers. Pediatrics 134 (2): 410-4, 2014. Also available online. Last accessed May 19, 2023.
  3. Suit H, Spiro I: Radiation as a therapeutic modality in sarcomas of the soft tissue. Hematol Oncol Clin North Am 9 (4): 733-46, 1995.
  4. Hawkins DS, Black JO, Orbach D, et al.: Nonrhabdomyosarcoma soft-tissue sarcomas. In: Blaney SM, Helman LJ, Adamson PC, eds.: Pizzo and Poplack's Pediatric Oncology. 8th ed. Wolters Kluwer, 2020, pp 721-46.

Tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil recién diagnosticado

Tumores adipocíticos

Los tumores adipocíticos representan menos del 10 % de las lesiones de tejido blando en pacientes menores de 20 años. Los tumores adipocíticos más comunes en los niños son los lipomas y los lipoblastomas.

En el Cuadro 11 se resumen las neoplasias adipocíticas que se observan en pacientes pediátricos y se incluye información sobre las características clínicopatológicas y moleculares correspondientes.[1]

Cuadro 11. Neoplasias adipocíticas en población pediátricaa
Tumores adipocíticos Frecuencia[2,3] Epidemiología Sitio preferido Tipo histológico Alteraciones citogenéticas y moleculares
M = masculino; F = femenino;HGMA2=high-mobility group AT-hook 2;PLAG1=pleomorphic adenoma gene 1;MDM2=mouse double minute 2 homolog;FUS=fused in sarcoma;DDIT3=DNA damage inducible transcript 3.
a Reproducción autorizada deSeminars in Diagnostic Pathology, volumen 36, número 2, Putra J, Al-Ibraheemi A, Adipocytic tumors in Children: A contemporary review, páginas 95–104, derechos de autor 2019, con autorización de Elsevier.[1]
Benignas
Lipoma 64–70 % (incluye las variantes) • Solitario: M = F Tronco. Capas monótonas de adipocitos maduros. Cromosomas 12q (HMGA2), 13q y 6p.
• Múltiple: M > F
• Infrecuente en los primeros 20 años de vida.
• Más frecuente entre los 40–60 años.
Angiolipoma 4–28 % • M > F Tronco y extremidades. • Proliferación de adipocitos maduros.
• Más común al final de la adolescencia y alrededor de los 20 años. • Proliferación vascular (proliferación capilar con trombos de fibrina).
Lipoblastoma 18–30 % • M > F Tronco y extremidades. • Arquitectura lobulillar. Reordenamiento del cromosoma 8q (PLAG1).
• Zonas de maduración.
• <3 años (90 %) • Células estrelladas primitivas.
• Lipoblastos multivacuolados.
• Área mixoide con vasos plexiformes prominentes.
Hibernoma 2 % • M = F Región dorsal (área escapular), de la pared torácica, axilar e inguinal. • Arquitectura lobulillar. Reordenamiento del cromosoma 11q13-21.
• Infrecuente en los primeros 20 años de vida (5 %). • Diferentes tipos de células: células grasas pardas, lipoblastos multivacuolados y células grasas maduras.
• El 60 % se presenta entre los 20 y 40 años. • Red de capilares prominente (menos pronunciada que el lipoblastoma y el liposarcoma mixoide).
Intermedio
Tumor lipomatoso atípico y liposarcoma bien diferenciado. Raro • M = F Extremidades, cabeza y cuello, tronco. • Proliferación de adipocitos maduros. Anillo supernumerario y cromosoma marcador gigante 12q14-15 (MDM2).
• Es sumamente infrecuente en niños (asociado con el síndrome de Li-Fraumeni). • Variación significativa de tamaño.
• Incidencia máxima entre los 60 y 70 años. • Núcleos hipercromáticos con atipia.
Maligno
Liposarcoma mixoide 4 % • F > M Extremidades, tronco, región de la cabeza y el cuello, y región abdominal. • Arquitectura nodular. t(12;16)(q13;p11) recurrente que da lugar a la fusión génicaFUS::DDIT3gene.
• Mezcla de células no lipogénicas redondas o fusiformes, además de lipoblastos.
• El liposarcoma más común en niños (10 a 20 años), pero el menos frecuente en los adultos. • Estroma mixoide prominente con vasculatura en alambrada.
• Variantes en niños: subtipos pleomórfico y de células fusiformes.
• Incidencia máxima entre los 40 y 60 años. • La progresión al tipo morfológico de células redondas es infrecuente en niños.
Liposarcoma desdiferenciado. Raro • Notificado en un niño de 8 años con liposarcoma bien diferenciado.[4] • En extremidad inferior en un informe de un caso de un paciente pediátrico.[4] • Transición de un liposarcoma bien diferenciado a un sarcoma no lipogénico de grado alto. Anillo supernumerario y cromosoma marcador gigante 12q14-15 (MDM2).
• La desdiferenciación se presenta hasta en el 10 % de los liposarcomas bien diferenciados en adultos. • Retroperitoneo (adultos). • Diferenciación heterogénea (5–10 %).
• Incidencia máxima entre los 60 y 70 años.
Liposarcoma pleomórfico Infrecuente o no notificado • La incidencia máxima del liposarcoma pleomórfico ocurre entre los 70 y 80 años. • Extremidades (adultos). • Lipoblastos pleomórficos.
• El subtipo se ha notificado en el entorno de los síndromes de Li-Fraumeni[5]y Muir-Torre.[6] • Fondo de sarcoma pleomórfico de grado alto (no lipogénico).

Liposarcoma, bien diferenciado, sin otra indicación

El liposarcoma representa el 3 % de los sarcomas de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

El liposarcoma es infrecuente en la población pediátrica. En una revisión de 182 pacientes pediátricos con sarcomas de tipo adulto, solo 14 recibieron un diagnóstico de liposarcoma.[7] En un estudio retrospectivo, entre 1960 y 2011, se identificó a 34 pacientes menores de 22 años.[8] Hubo un número casi igual de hombres y mujeres, y la mediana de edad fue de 18 años. En una revisión clinicopatológica internacional, se describieron las características de 82 casos de liposarcoma infantil.[9] La mediana de edad fue de 15,5 años y las mujeres resultaron más afectadas. En ambos informes, la mayoría de los pacientes tenía liposarcoma mixoide.[8,9]

En una revisión de la bibliografía médica sobre 275 casos de liposarcoma infantil se observó que el liposarcoma mixoide fue el tipo histológico más común (68 %), seguido por el liposarcoma bien diferenciado (10,5 %). De los pacientes, el 12 % murió por la enfermedad, la mayoría fueron casos de los subtipos pleomórfico y mixoide pleomórfico. Cerca del 70 % de los pacientes con liposarcoma mixoide y bien diferenciado se trataron solo con una cirugía. Los desenlaces clínicos generales en estos grupos de pacientes fueron excelentes, sin indicios de enfermedad en 114 de 127 pacientes. Por el contrario, más del 50 % de los pacientes de liposarcoma pleomórfico se sometió a radioterapia y quimioterapia además de la cirugía, y el desenlace clínico fue subóptimo, sin indicios de enfermedad en solo 5 de 10 pacientes. Se encontraron mutaciones germinales en TP53 en 2 pacientes con liposarcoma mixoide pleomórfico y en 2 pacientes con liposarcoma bien diferenciado que tenían una historia familiar compatible con el síndrome de Li-Fraumeni.[10]

Clasificación histopatológica

La clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del liposarcoma es la siguiente:[11]

  1. Liposarcomas intermedios (localmente invasores).
    • Tumor lipomatoso atípico. Estos tumores no metastatizan a menos que experimenten una desdiferenciación.
  2. Liposarcomas malignos.
    • Liposarcoma desdiferenciado.
    • Liposarcoma mixoide. Los liposarcomas mixoides puros se caracterizan por la translocación t(12;16)(q13;p11) y, aunque metastatizan, suelen presentar un desenlace excelente en ausencia de un componente de células redondas.[12] El liposarcoma mixoide es el subtipo más común en la población pediátrica.[8,9]
    • Liposarcoma pleomórfico. Es un tipo de liposarcoma infrecuente que de manera primaria surge en adultos mayores.
    • Liposarcoma mixoide pleomórfico. Esta entidad rara se presenta de manera primaria en niños, adolescentes y adultos jóvenes. A menudo surge en el mediastino y exhibe un comportamiento clínico muy maligno.
    • Liposarcoma, bien diferenciado, SAI.

Cuadro clínico inicial

La mayoría de los liposarcomas en niños y adolescentes son de grado bajo y se localizan a nivel subcutáneo. Las metástasis ganglionares son infrecuentes y la mayoría de las metástasis son pulmonares. Es más probable que los tumores que surgen en la periferia sean de grado bajo y mixoides. Los tumores que surgen a nivel central tienen más probabilidades de ser de grado alto, pleomórficos y de manifestarse inicialmente con metástasis, o recidivar con metástasis.

Características genómicas

  • Tumor lipomatoso atípico. Esta entidad se caracteriza por un anillo supernumerario y cromosomas marcadores gigantes que contienen la región cromosómica 12q14-q15, que abarca MDM2. La amplificación de MDM2 se detecta en casi todos los casos de tumor lipomatoso atípico o liposarcoma bien diferenciado, y es frecuente que se presenten coamplificaciones de MDM2 con genes cercanos como CDK4 y FRS2.[13]
  • Liposarcoma desdiferenciado. Esta entidad, igual que el tumor lipomatoso atípico, se caracteriza por amplificación de MDM2, anillo supernumerario y cromosomas marcadores gigantes que contienen la región cromosómica 12q14-q15. El liposarcoma desdiferenciado contiene un número alto de alteraciones segmentarias en el número de copias, pero pocas mutaciones génicas.[14]
  • Liposarcoma mixoide. Esta entidad se caracteriza por la translocación t(12;16)(q13;p11) que produce el gen de fusión FUS::DDIT3.[14] En un porcentaje pequeño de los casos, EWSR1 substituye a FUS, y se produce el gen de fusión EWSR1::DDIT3 (t(12;22)(q13;q12)). El gen DDIT3 (llamado antes CHOP y GADD153) se activa por estrés y tiene un efecto inhibitorio en la adipogénesis.[15] El liposarcoma mixoide es el subtipo de liposarcoma más común en la población pediátrica. La mayoría de los casos pediátricos exhiben el gen de fusión FUS::DDIT3.[8,9,16]
  • Liposarcoma pleomórfico. Esta entidad es de manera primaria una afección de adultos mayores que no exhibe los reordenamientos génicos de DDIT3 ni la amplificación de MDM2. Los casos de liposarcoma pleomórfico suelen presentar varios desequilibrios cromosómicos, incluso se han observado mutaciones en TP53 y NF1 en algunos casos.[17]
  • Liposarcoma pleomórfico mixoide. Esta entidad a menudo se presenta en la población de adolescentes y adultos jóvenes, carece del reordenamiento génico DDIT3 del liposarcoma mixoide y de la amplificación MDM2 propia del tumor lipomatoso atípico y del liposarcoma desdiferenciado.[9,16,18] En su lugar, el liposarcoma pleomórfico mixoide exhibe múltiples ganancias y pérdidas cromosómicas. Suele observarse pérdida de la expresión de Rb, a veces asociada a una pérdida del cromosoma 13q14 donde se ubica el gen RB1.[18,19] Aunque la mayoría de los casos de liposarcoma pleomórfico mixoide carecen de mutaciones en TP53, una minoría presentan mutaciones en TP53 que, en algunos casos, se asocian con el síndrome de Li-Fraumeni.[20,21,22]

Pronóstico

Los tumores centrales o de grado más alto se relacionan con un riesgo de muerte significativamente más alto. En una revisión retrospectiva internacional, la tasa de supervivencia a 5 años fue del 42 % en pacientes con tumores centrales. De 10 pacientes con liposarcoma mixoide pleomórfico, 7 murieron por la enfermedad.[9] En un estudio retrospectivo de 14 pacientes, la tasa de supervivencia a 5 años fue del 78 %. El grado del tumor, el subtipo histológico y la ubicación primaria se correlacionaron con la supervivencia.[8]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del liposarcoma son las siguientes:

  1. Cirugía. Si el tumor no se extirpó por completo o si hay recidiva local, se puede llevar a cabo otra cirugía.[23,24,25]
  2. Quimioterapia seguida de cirugía.
  3. Cirugía precedida por radioterapia o seguida de radioterapia (de acuerdo con evidencia de estudios con adultos).[26,27]

La cirugía es el tratamiento más importante para el liposarcoma. Después de una resección quirúrgica completa de un liposarcoma bien diferenciado o mixoide, las tasas de supervivencia sin complicaciones (SSC) y de supervivencia general (SG) son aproximadamente del 90 %.[28] Si la cirugía inicial es incompleta, se debe llevar a cabo una nueva resección para obtener un margen amplio de resección. Se observaron recidivas locales que se controlaron con otra resección del tumor, en particular para el liposarcoma de grado bajo. También se considera la radioterapia pre o posoperatoria en función de las consecuencias estéticas o funcionales del tratamiento adicional con cirugía y radioterapia.[29,30]

Se ha usado quimioterapia para reducir el tamaño del liposarcoma antes de la cirugía con el fin de facilitar la resección completa; en particular, de los tumores centrales.[31,32] La función de la quimioterapia posoperatoria para un liposarcoma no está bien definida. No se necesita tratamiento posoperatorio para los liposarcomas mixoides que se resecaron por completo. La supervivencia del liposarcoma pleomórfico sigue siendo precaria, aunque se administre quimioterapia posoperatoria.[33]

La trabectedina ha provocado respuestas prometedoras en adultos con liposarcoma mixoide en estadio avanzado.[34] En un estudio, se asignó al azar a pacientes adultos con liposarcoma y leiomiosarcoma recidivantes para someterse a tratamiento con trabectedina o dacarbazina. Los pacientes tratados con trabectedina presentaron una reducción del 45 % en la progresión de la enfermedad.[35][Nivel de evidencia B1] Hay muy pocos datos que respalden el uso de la trabectedina en pacientes pediátricos.[36]

El tratamiento con eribulina, un inhibidor de la dinámica de los microtúbulos que no pertenece al grupo de los taxanos, mejoró de manera significativa la supervivencia en pacientes adultos con liposarcoma recidivante en comparación con la dacarbazina. La mediana de SG fue de 15,6 meses en los pacientes que recibieron eribulina versus 8,4 meses en los pacientes que recibieron dacarbazina. Las diferencias en la supervivencia fueron aún mayores en pacientes con liposarcoma pleomórfico y desdiferenciado. La eribulina fue eficaz para prolongar la supervivencia de pacientes con tumores de grado intermedio o alto.[37][Nivel de evidencia A1] En un ensayo pediátrico de fase I con eribulina no participó ningún paciente con liposarcoma.[38]

En una estudio multicéntrico de un solo grupo de fase II, 41 adultos con liposarcoma de grado intermedio o de grado alto irresecable o metastásico recibieron pazopanib en dosis de 800 mg al día. La tasa de supervivencia sin progresión (SSP) a las 12 semanas fue de un 68,3 %, significativamente más alto que el valor de la hipótesis nula de un 40 %. Se obtuvo control tumoral en el 44 % de los pacientes. Un paciente tuvo una respuesta parcial y 17 enfermedad estable. A las 24 semanas, el 39 % de los pacientes continuaba sin progresión. La mediana de supervivencia sin progresión fue de 4,4 meses y la mediana de SG fue de 12,6 meses.[10][Nivel de evidencia B4]

Tumores osteocondrales

Hay varios subtipos de tumores osteocondrales, entre ellos los siguientes:

  • Condrosarcoma mesenquimatoso extraesquelético.
  • Osteosarcoma extraesquelético.

Condrosarcoma mesenquimatoso extraesquelético

Las neoplasias óseas y condromatosas representan el 0,8 % de los sarcomas de tejido blando en los pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

Características histopatológicas y moleculares

El condrosarcoma mesenquimatoso es un tumor raro que se caracteriza por células redondas pequeñas y cartílago hialino que suele afectar a adultos jóvenes y que se presenta sobre todo en la región de la cabeza y el cuello.

Se ha establecido una relación entre el condrosarcoma mesenquimatoso y un reordenamiento cromosómico constante. En un análisis retrospectivo de casos de condrosarcoma mesenquimatoso, se encontró una fusión HEY1::NCOA2 en 10 de 15 muestras evaluadas.[39] Esta fusión génica no se ha relacionado con cambios cromosómicos que se puedan detectar por cariotipificación. En una ocasión, se encontró la translocación t(1;5)(q42;q32) en un caso de condrosarcoma mesenquimatoso y se observó que se relacionaba con un nuevo gen de fusión IRF2BP::CDX1.[40]

Pronóstico

En una encuesta retrospectiva llevada a cabo en instituciones europeas, se identificó a 113 niños y adultos con condrosarcoma mesenquimatoso. A continuación se describen los factores relacionados con un pronóstico más favorable:[41][Nivel de evidencia C1]

  • Ausencia de enfermedad metastásica en el cuadro clínico inicial.
  • Márgenes de resección limpios.
  • Administración de quimioterapia posoperatoria después de la resección en pacientes cuya enfermedad estaba inicialmente localizada.

En un análisis retrospectivo con datos del Surveillance, Epidemiology, and End Results (SEER) Program desde 1973 hasta 2011, se identificó a 205 pacientes con condrosarcoma mesenquimatoso; 82 pacientes tenían tumores primarios esqueléticos y 123 pacientes tenían tumores extraesqueléticos.[42] Los desenlaces de los tumores primarios esqueléticos y extraesqueléticos fueron los mismos. Los factores relacionados con los desenlaces fueron los siguientes:

  • Sitio primario. Se observó una tasa de SG a 5 años del 50 % en pacientes con tumores de apéndice, del 37 % en pacientes con tumores axiales y del 74 % en pacientes con tumores craneales.
  • Metástasis y tamaño del tumor. La presencia de enfermedad metastásica y un tamaño tumoral más grande, se vincularon de manera independiente con un mayor riesgo de muerte.

En una revisión retrospectiva de una sola institución se identificaron 43 casos de condrosarcoma mesenquimatoso desde 1979 hasta 2010.[43] Se evaluó a 30 pacientes con enfermedad localizada. La media de edad en el momento del diagnóstico fue de 33 años (intervalo, 11–65 años). La tasa de SG a 5 años fue del 51 % y la tasa de SG a 10 años fue del 37 %. La edad más joven (<30 años de edad) y el sexo masculino se relacionaron con una SG y una supervivencia sin enfermedad (SSE) más precarias. Los pacientes que no recibieron radioterapia adyuvante fueron más propensos a presentar una recidiva local.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del condrosarcoma mesenquimatoso extraesquelético son las siguientes:

  1. Cirugía. Si el tumor no se extirpó por completo, también se puede administrar radioterapia.
  2. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.[26,27]
  3. Quimioterapia seguida de cirugía y quimioterapia adicional. También se puede administrar radioterapia.

En una revisión de 15 pacientes menores de 26 años incluidos en los protocolos del German Cooperative Soft Tissue Sarcoma Study Group (11 con lesiones de tejido blando) y del German-Austrian-Swiss Cooperative Osteosarcoma Study Group (4 con lesiones óseas primarias), se indicó que es necesaria una resección quirúrgica completa o una resección incompleta seguida de radioterapia, para el control local.[44][Nivel de evidencia C1]

En una revisión retrospectiva de una sola institución, se identificó a 12 pacientes pediátricos con condrosarcoma mesenquimatoso.[45] En los tumores de estos pacientes se documentó la presencia de un reordenamiento de NCOA2. También se corroboró que, para la cura, es necesaria la resección quirúrgica. De estos pacientes, 11 tenían enfermedad localizada y 1 tenía nódulos pulmonares. Todos los pacientes recibieron quimioterapia: 6 pacientes antes y después de la resección quirúrgica y 6 pacientes solo después de la resección. Todos los pacientes recibieron quimioterapia posoperatoria (con mayor frecuencia ifosfamida y doxorrubicina), con radioterapia (mediana de dosis, 59,4 Gy) o sin esta. En el momento de una mediana de seguimiento de 4,8 meses, la tasa de SSC a 5 años fue del 68,2 % (intervalo de confianza [IC] 95 %, 39,8–96,6 %), y la tasa de SG fue del 88,9 % (IC 95 %, 66,9–100 %).

En un estudio japonés de pacientes con condrosarcoma mixoide extraesquelético y condrosarcoma mesenquimatoso, los pacientes se asignaron al azar a un tratamiento con trabectedina o al mejor cuidado médico de apoyo.[46] La mediana de edad de los pacientes fue de 38 años (intervalo, 21–77 años). La SG fue más alta en los pacientes asignados a recibir trabectedina que en los pacientes asignados a recibir el mejor cuidado médico de apoyo.

Osteosarcoma extraesquelético

Las neoplasias óseas y condromatosas representan el 0,8 % de los sarcomas de tejido blando en los pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

El osteosarcoma extraesquelético es sumamente infrecuente en niños y adolescentes. En un análisis de datos del SEER, desde 1973 hasta 2009, se identificaron 256 pacientes (6 %) con osteosarcoma extraesquelético entre 4173 pacientes con osteosarcoma de grado alto. En comparación con los pacientes que tenían un osteosarcoma esquelético, fue más probable que los pacientes con osteosarcoma extraesquelético fueran mayores, mujeres, presentaran un tumor primario axial y compromiso de ganglio linfático regional. Las características de pronóstico adverso incluyeron la presencia de enfermedad metastásica, mayor tamaño del tumor, edad avanzada y sitio axial del tumor primario.[47]

Características moleculares

En una revisión de 32 pacientes adultos con osteosarcoma extraesquelético se observaron varias alteraciones uniformes.[48] Algunas alteraciones genómicas frecuentes incluyeron pérdida del número de copias en CDKN2A (70 %), TP53 (56 %) y RB1 (49 %). Se identificaron mutaciones que afectaron la metilación y la desmetilación (40 %), la reestructuración de cromatina (27 %) y las vías WNT/SHH (27 %). Los casos con pérdidas en el número de copias bialélicas simultáneas de TP53 y RB1 se relacionaron con SSE y SG más precarias.

Pronóstico

El osteosarcoma extraesquelético se relacionó con un riesgo alto de recidiva local y metástasis pulmonar.[49] En una revisión retrospectiva de una sola institución se identificó a 43 pacientes con osteosarcoma extraesquelético: 37 pacientes tenían enfermedad localizada y 6 pacientes presentaron enfermedad metastásica.[50] La mediana de edad fue de 55 años (intervalo de edad de 7–81 años). La mediana de SSP fue de 21 meses y la mediana de SG fue de 50 meses. El 75 % de los pacientes recibieron quimioterapia. Hubo una tendencia hacia una mejor supervivencia para los pacientes que recibieron quimioterapia y una mejora estadísticamente significativa en la supervivencia de los pacientes que recibieron quimioterapia con cisplatino.

En una revisión de 274 pacientes con una mediana de edad de 57 años en el momento del diagnóstico (intervalo, 12–91 años), las tasas de SSE y SG a 5 años fueron significativamente mejores para los pacientes que recibieron quimioterapia. El uso de un régimen de tipo osteosarcoma se relacionó con mejoras en las tasas de respuesta.[51][Nivel de evidencia C1]

La European Musculoskeletal Oncology Society realizó un análisis retrospectivo de 266 pacientes con osteosarcoma extraesquelético aptos y tratados entre 1981 y 2014.[51] Entre ellos, 50 pacientes (19 %) presentaron enfermedad metastásica. En un análisis de los 211 pacientes que alcanzaron remisión completa luego de la resección quirúrgica del tumor primario, se observó una tasa de SG a 5 años del 51 % y una tasa de SSE a 5 años del 43 %. Hubo una tendencia favorable a la supervivencia entre los pacientes que se trataron con la quimioterapia que se suele usar para los pacientes con osteosarcoma óseo. En un análisis multivariante, los factores que se relacionaron con un pronóstico más favorable incluyeron una edad menor (<40 años), tumores más pequeños y el uso de quimioterapia.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del osteosarcoma extraesquelético son las siguientes:

  1. Cirugía seguida de quimioterapia.[49,50,51]

Los regímenes de quimioterapia característicos para el osteosarcoma incluyen alguna combinación de cisplatino, doxorrubicina, dosis altas de metotrexato e ifosfamida.[49,50,51]

Para obtener más información sobre el tratamiento del osteosarcoma extraóseo, como las opciones de quimioterapia, consultar Tratamiento del osteosarcoma y el sarcoma pleomórfico indiferenciado óseo.

Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos

Hay varios subtipos de tumores fibroblásticos y miofibroblásticos, entre ellos los siguientes:

  1. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos intermedios (localmente invasores).
    • Fibromatosis de tipo desmoide (antes denominada tumor desmoide o fibromatosis agresiva).
  2. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos intermedios (metastatizan con poca frecuencia).
    • Dermatofibrosarcoma protuberante sin otra indicación.
    • Tumor miofibroblástico inflamatorio.
      • Sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide.
    • Fibrosarcoma infantil.
  3. Tumores fibroblásticos y miofibroblásticos malignos.
    • Fibrosarcoma sin otra indicación.
    • Mixofibrosarcoma.
    • Sarcoma fibromixoide de grado bajo.
    • Fibrosarcoma epitelioide esclerosante.

Fibromatosis tipo desmoide

La fibromatosis tipo desmoide antes se llamaba tumor desmoide o fibromatosis agresiva.

Factores de riesgo

La mayoría de tumores desmoides son esporádicos, pero una proporción baja se asocia con una mutación en el gen APC (vinculado con pólipos intestinales e incidencia alta de cáncer de colon). En un estudio de 519 pacientes mayores de 10 años con diagnóstico de fibromatosis tipo desmoide, se encontró que 39 pacientes (7,5 %, por una posible subestimación) tenían poliposis adenomatosa familiar (PAF).[52] Los pacientes con PAF y fibromatosis tipo desmoide eran más jóvenes, con mayor frecuencia eran hombres y presentaban más tumores en la pared abdominal o el mesenterio que los pacientes con fibromatosis tipo desmoide sin PAF.

Los antecedentes familiares de cáncer de colon, la presencia de hiperplasia congénita del epitelio pigmentario de la retina,[53,54] o la presencia de fibromatosis tipo desmoide en el abdomen o la pared abdominal [52] debe dar lugar a una derivación inmediata a un asesor genético. En la actualidad, no se cuenta con recomendaciones generales sobre pruebas genéticas en niños con fibromatosis tipo desmoide. Las características moleculares y patológicas del tumor solo orientan la detección. Si el tumor exhibe una mutación somática en CTNNB1, no son necesarios los exámenes de detección porque no se ha descrito una mutación en el gen APC en este entorno. Si no se encuentra una mutación en CTNNB1, es posible que se justifiquen el uso de exámenes de detección para la mutación en APC.[55,56] Los tumores desmoides pediátricos a veces albergan otras mutaciones en los genes AKT, TP53 y RET, así como la mutación BRAFV600E.[10] Para obtener más información en inglés, consultar la sección Familial Adenomatous Polyposis (FAP) en Genetics of Colorectal Cancer.

Pronóstico

La fibromatosis tipo desmoide tiene un potencial muy bajo de producir metástasis. Los tumores infiltran a nivel local y lograr el control quirúrgico es difícil por la necesidad de conservar las estructuras normales.

La fibromatosis tipo desmoide tiene un potencial alto de recidiva local. Estos tumores tienen una evolución natural muy variable, incluso hay ejemplos bien documentados de regresión espontánea.[57] Se han observado mutaciones en el exón 3 del gen CTNNB1 en más del 80 % de los casos de fibromatosis de tipo desmoide. La mutación 45F en el exón 3 del gen CTNNB1 se ha vinculado con aumento del riesgo de recidiva de la enfermedad.[58] En ocasiones, se logra el control de las lesiones recidivantes con una segunda resección quirúrgica.[59]

Tratamiento

Es muy difícil evaluar el beneficio de las intervenciones terapéuticas para la fibromatosis tipo desmoide, porque esta enfermedad tiene una evolución natural muy variable, y se observan regresiones parciales hasta en el 20 % de los pacientes.[60] En series grandes de adultos y en series pediátricas más pequeñas, se encontraron periodos prolongados de estabilización de la enfermedad, incluso regresión sin tratamiento sistémico.[59,61]; [62][Nivel de evidencia C2] Por ejemplo, en un gran ensayo controlado con placebo de sorafenib en adultos con tumor desmoide, los pacientes que no recibieron tratamiento (observación o placebo) exhibieron una tasa de regresión parcial del 20 %, y el 46 % de los pacientes en el grupo de placebo no presentaron progresión al cabo de 1 año.[60]

Las opciones de tratamiento de la fibromatosis tipo desmoide son las siguientes:

  1. Observación. Debido a la evolución natural variable de los tumores desmoides, como se describió antes, la observación a veces es una opción viable. En especial en pacientes asintomáticos, cuando las lesiones no representan un peligro para órganos vitales y en tumores sometidos a una resección incompleta.[59,63,64,65,66,67,68,69] Se organizó una reunión mundial de consenso de expertos en sarcoma con experiencia en tumores desmoides pediátricos y de adultos con el fin de definir el tratamiento correcto. El Desmoid Tumor Working Group indicó que un abordaje de vigilancia activa inicial no afectaba la eficacia de tratamientos posteriores. Se indicó que el tratamiento activo solo debía considerarse en casos de progresión persistente. La vigilancia activa incluye el control continuo con imágenes por resonancia magnética (IRM) iniciales 1 a 2 meses después del diagnóstico e imágenes posteriores a intervalos de 3 a 6 meses. Se deben tomar decisiones encaminadas a iniciar un tratamiento activo cuando la enfermedad afecta estructuras vitales, como el mesenterio o la región de la cabeza y el cuello, que puedan causar morbilidad significativa.[70]
    • En un estudio prospectivo de 771 pacientes con fibromatosis tipo desmoide se comparó una cirugía inicial con observación inicial, y no se encontraron diferencias en las tasas de SSC en los 2 grupos (53 % vs. 58 %; P = 0,415). Entre los pacientes con localización tumoral favorable, es decir, pared abdominal, intraabdominal, mama, vísceras digestivas y extremidades inferiores, la tasa de SSC a 2 años fue similar en los pacientes sometidos a una cirugía (70 %) u observación (63 %; P = 0,41). Entre los pacientes con tumores en una localización desfavorable, es decir, pared torácica, cabeza y cuello y extremidad superior, la tasa de SSC a 2 años fue significativamente superior en quienes recibieron tratamiento no quirúrgico (52 %) en comparación con quienes se sometieron a una cirugía inicial (25 %; P = 0,001).[71][Nivel de evidencia C2]
    • De 173 pacientes con fibromatosis tipo desmoide tratados en los estudios del European Pediatric Soft Tissue Sarcoma Study Group (EpSSG) desde 2005, todos los pacientes estaban vivos en el momento del análisis. Entre ellos, 13 pacientes (8 %) solo se sometieron a biopsia (no recibieron tratamiento), 65 pacientes (42 %) recibieron quimioterapia sola, 31 pacientes (20 %) se sometieron a una cirugía sola, 36 pacientes (23 %) se sometieron a quimioterapia y cirugía, y 9 pacientes (6 %) recibieron radioterapia además de otras terapias. Los autores concluyeron que el abordaje conservador no quirúrgico no afectó los desenlaces en pacientes pediátricos.[72][Nivel de evidencia C2]
    • Se ha cuestionado la falta de intervención quirúrgica o de otro tipo. En el Toronto Hospital for Sick Children, se evaluó la repercusión emocional de los pacientes con tumores desmoides al tener que volver, de forma regular, a un centro oncológico para realizar tomografías computarizadas (TC) e IRM continuas, y consultas de seguimiento. Las personas con tumores desmoides presentaban grados más altos de ansiedad, incluso cuando se los comparaba con pacientes de sarcoma; esto no disminuyó con el tratamiento y continuó durante todo el seguimiento.[73][Nivel de evidencia C1]
  2. Quimioterapia para tumores recidivantes o irresecables.
    • Metotrexato y vinblastina: esta combinación produce respuestas objetivas en casi un tercio de los pacientes con fibromatosis tipo desmoide irresecable o recidivante.[74]
    • Doxorrubicina y dacarbazina: en una serie compuesta en su mayoría por pacientes adultos con PAF y fibromatosis tipo desmoide irresecable que no respondió bien a la terapia hormonal, se observó que la doxorrubicina con dacarbazina seguida de meloxicam (medicamento antiinflamatorio no esteroide [AINE]) es un tratamiento inocuo que puede provocar respuestas.[75]
    • Doxorrubicina liposomal pegilada: se han notificado algunas respuestas.[76] En una serie de 5 pacientes, se notificó una mediana del intervalo sin progresión de 29 meses.[77]
    • Hidroxiurea: en un ensayo retrospectivo, se notificaron los desenlaces de 16 niños que habían recibido antes tratamiento para tumores desmoides y que recibieron hidroxiurea. Antes de la administración de la hidroxiurea, 7 pacientes exhibieron progresión del tumor, 2 pacientes notificaron aumento del dolor y 7 pacientes exhibieron ambos. Se presentó achicamiento del tumor en el 37,5 % de los pacientes (18,7 % de remisiones parciales) y mejora de los síntomas en el 68,7 % de los pacientes.[78]
  3. Inhibidores de tirosina–cinasas.
    • Sorafenib: se condujo un estudio internacional prospectivo de fase III con enmascaramiento doble a través de la National Clinical Trials Network para evaluar la eficacia del sorafenib en pacientes con tumores desmoides irresecables progresivos o sintomáticos. Los pacientes adultos se asignaron al azar en una proporción 2:1 (sorafenib: placebo) y se permitió el cambio al grupo de sorafenib luego de la progresión de la enfermedad. Se inscribieron 87 pacientes (entre 18 y 72 años de edad). La tasa de respuesta objetiva fue del 33 % (IC 95 %, 20–48 %) en el grupo de sorafenib y del 20 % (IC 95 %, 8–38 %) en el grupo de placebo. La mediana de tiempo hasta la respuesta objetiva fue de 9,5 meses para los pacientes tratados con sorafenib y de 13,3 meses para los pacientes que recibieron el placebo. La tasa de SSC a 2 años fue del 81 % para los pacientes tratados con sorafenib, comparada con el 36 % para los pacientes que recibieron el placebo.[60][Nivel de evidencia B1]
    • Pazopanib: en una serie pequeña, se notificó una mejora de los síntomas y enfermedad estable en 7 pacientes con fibromatosis tipo desmoide tratados con pazopanib.[79] En un estudio aleatorizado no comparativo de adultos con tumores desmoides se trató a los pacientes con pazopanib o metotrexato y vinblastina. Cerca del 84 % de los pacientes que recibieron pazopanib no presentaban progresión a los 6 meses.[80]
  4. Inhibidor de la vía NOTCH/inhibidor de la gamma–secretasa.
    • La vía NOTCH se ha relacionado con la formación de tumores desmoides.[81]
    • El nirogacestat, un inhibidor de la vía NOTCH/inhibidor de la gamma–secretasa, se ha evaluado en pacientes adultos y pediátricos. En un estudio de 17 pacientes adultos con tumores desmoides (15 de ellos con mutaciones en los genes APC o CTNNB1), 5 pacientes (29 %) obtuvieron una respuesta parcial confirmada.[82][Nivel de evidencia C3] Entre las pacientes adultas, 4 presentaron menstruación irregular de grado 1. En un ensayo en curso (NCT03785964), el 28 % de las mujeres en edad fértil notificaron complicaciones relacionadas con deficiencia ovárica primaria. En una serie pequeña de 4 pacientes menores de 20 años que recibieron nirogacestat en el marco de un uso compasivo, 3 exhibieron un beneficio duradero, definido como respuesta completa (n = 1), respuesta parcial (n = 1) o enfermedad estable (n = 1). Ningún paciente presentó efectos adversos de grado 3 o 4.[83][Nivel de evidencia C3]
  5. Antiinflamatorios no esteroideos. Se han usado los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como el sulindac, en casos aislados de fibromatosis tipo desmoide; las respuestas fueron en general de estabilización de la enfermedad.[84]
  6. Tratamiento antiestrogénico. El tratamiento antiestrogénico, por lo general con tamoxifeno y sulindac, también produjo estabilización de la enfermedad.[85] En un ensayo prospectivo de la combinación de tamoxifeno y sulindac, se notificaron pocos efectos secundarios, pero fueron comunes los quistes de ovario asintomáticos en niñas. La combinación fue relativamente poco activa, según se evaluó mediante las tasas de respuesta y SSP.[86][Nivel de evidencia B4]
  7. Cirugía. Si se opta por una cirugía, la intención es lograr márgenes limpios. No obstante, en una revisión retrospectiva de niños sometidos a cirugía por fibromatosis tipo desmoide en el St. Jude Children's Research Hospital (SJCRH), no se notificó una correlación entre los márgenes quirúrgicos y el riesgo de recidiva.[69] En este estudio, 10 de 39 pacientes presentaron recidiva después de la cirugía, al cabo de una mediana del intervalo de tiempo de 2,5 años.
    • La resección quirúrgica se debe usar de manera sensata en los pacientes con tumores desmoides porque hay regresión espontánea en hasta el 20 % de los casos. Se recomienda la resección quirúrgica cuando el crecimiento del tumor amenaza la integridad de las vías respiratorias o cuando hay síntomas persistentes, como el dolor. En caso contrario se prefiere una estrategia de conducta expectante.
  8. Radioterapia.
    • Se ha utilizado radiación para la fibromatosis tipo desmoide irresecable y sintomática o en el ámbito posoperatorio después de una resección tumoral inadecuada cuando la progresión hubiese causado consecuencias patológicas. Las posibles complicaciones a largo plazo de la radioterapia, en particular las neoplasias subsiguientes, hacen que esta modalidad sea menos llamativa para una población joven.[87]
    • Se puede considerar la radioterapia posoperatoria cuando la recidiva o la progresión implicaría una cirugía adicional que podría causar compromiso funcional o cosmético, siempre y cuando la radiación se considere aceptable en términos de morbilidad.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presenta un ejemplo de un ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  • ARST1921 (NCT04195399) (A Safety, Pharmacokinetic, and Efficacy Study of a Gamma-Secretase Inhibitor, Nirogacestat [PF-03084014] in Children and Adolescents With Progressive, Surgically Unresectable Desmoid Tumors): En estos ensayos de fase II se estudia la toxicidad y el comportamiento farmacocinético del nirogacestat en pacientes con tumores desmoides irresecables progresivos.

Dermatofibrosarcoma protuberante sin otra indicación

El dermatofibrosarcoma es un tumor raro que se presenta en todos los grupos de edad, pero muchos de los casos notificados son de niños.[88,89,90] En una revisión de 451 casos en personas menores de 20 años de la base de datos SEER, se encontró que la incidencia fue de 1 caso por millón. La incidencia fue más alta en pacientes negros de 15 a 19 años. Los sitios más comunes fueron el tronco y las extremidades, semejante a lo que se encuentra en adultos. El 95 % de los pacientes se sometió a cirugía. La tasa de SG fue del 100 % a los 5 años, del 98 % a los 15 años, y del 97 % a los 30 años. La supervivencia de los hombres fue más baja comparada con la de las mujeres (P < 0,05).[91][Nivel de evidencia C1]

Características moleculares

El tumor tiene una translocación cromosómica t(17;22)(q22;q13) constante en la que se yuxtapone el gen COL1A1 con el gen PDGFRB.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del dermatofibrosarcoma protuberante son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.
  3. Radioterapia y terapia con imatinib para los tumores irresecables o recidivantes.

La mayoría de los pacientes con tumores de dermatofibrosarcoma pueden curarse con una resección quirúrgica completa. Una resección amplia con márgenes negativos, una operación de Mohs o una operación de Mohs modificada prevendrán la recidiva de la mayoría de los tumores.[92] A pesar del comportamiento invasor a nivel local del tumor las metástasis ganglionares o viscerales son infrecuentes.

En el ensayo prospectivo EpSSG NRSTS 2005 (NCT00334854) se identificaron 46 pacientes con dermatofibrosarcoma protuberante.[93] La mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 6,9 años (intervalo, 0,4–7,5 años). Todos los pacientes presentaban enfermedad localizada, el 93 % de los pacientes tenían tumores pequeños (<5 cm) y el 76 % de los pacientes tenía tumores del grupo I del Intergroup Rhabdomyosarcoma Study (IRS). Todos los pacientes se sometieron al inicio a una cirugía y 32 pacientes necesitaron 2 procedimientos. Hubo 11 pacientes con tumores del grupo II del IRS, 2 de ellos presentaron una recidiva local. Al cabo de una mediana de seguimiento de 49 meses (intervalo, 4,2–130,9 meses) en el momento de este informe todos los pacientes estaban vivos. La tasa de SSC a 5 años fue del 92,6 % (IC 95 %, 78,8–97,6 %), y la tasa de SG fue del 100 %.

En revisiones retrospectivas, la radioterapia posoperatoria después de la resección incompleta quizás fue el factor que disminuyó la probabilidad de recidiva.[94,95]

Cuando no se puede llevar a cabo una resección quirúrgica o el tumor recidiva, el tratamiento con imatinib ha sido eficaz.[96,97,98] Debido a que la probabilidad de enfermedad metastásica es mayor después de recidivas múltiples, se debe considerar el uso de radiación u otras terapias adyuvantes para los pacientes con recidivas que no se pueden tratar con cirugía.[89,91]

En una revisión sistemática de 9 estudios se evaluó a 152 pacientes con dermatofibrosarcoma protuberante comprobado mediante análisis histológico, quienes recibieron imatinib. En el estudio se demostró una tasa de respuesta completa del 5,2 %, una tasa de respuesta parcial del 55,2 % y una tasa de enfermedad estable del 27,6 %. No se presentaron diferencias en las tasas de respuesta al imatinib en dosis de 400 mg o 800 mg por día.[99]

Se publicaron directrices para la evaluación diagnóstica y el tratamiento del dermatofibrosarcoma protuberante.[100]

Tumor miofibroblástico inflamatorio y sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide

El tumor miofibroblástico inflamatorio es un tumor mesenquimatoso raro que se presenta sobre todo en niños y adolescentes.[101,102,103]

Para obtener información sobre el tratamiento de este tumor en los pulmones, consultar Tratamiento de los tumores miofibroblásticos inflamatorios pulmonares en la niñez.

Cuadro clínico inicial

Los tumores miofibroblásticos inflamatorios son tumores raros que afectan los tejidos blandos y las vísceras de niños y adultos jóvenes.[104] Casi nunca producen metástasis, pero tienden a ser localmente invasores. Los sitios anatómicos comunes de la enfermedad son los tejidos blandos, los pulmones, el bazo, el colon y las mamas.[101] En 2015, se publicó una revisión de 42 casos pediátricos de tumor miofibroblástico inflamatorio en la vejiga.[105]

El sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide es un subtipo infrecuente de tumor miofibroblástico inflamatorio. Este subtipo exhibe características morfológicas epitelioides y una configuración membranosa perinuclear o nuclear de inmunotinción de ALK.[106] El sitio más común de presentación es en el abdomen, aunque se han notificado otros sitios primarios.[106,107,108] El sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide exhibe un predomino masculino, y se puede presentar desde la lactancia hasta la edad adulta.[106,107,108]

Características moleculares

Cerca de la mitad de los tumores miofibroblásticos inflamatorios exhiben una mutación clonal que activa el gen ALK (codificador de un receptor tirosina–cinasa) en el cromosoma 2p23.[109] Se han identificado fusiones de cinasas ROS1 y PDGFRB en 8 de 11 casos (73 %) con pruebas inmunohistoquímicas negativas para ALK.[110][Nivel de evidencia C3]

La mayoría de los casos de sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide tienen un gen de fusión RANBP2::ALK. También se ha notificado un gen de fusión RRBP1::ALK.[106,107,108] Debido a que RANBP2 se ubica en el poro nuclear, quizás esto explique la configuración de tinción de membrana perinuclear o nuclear ALK del sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide.

Pronóstico

Es frecuente que el tumor miofibroblástico inflamatorio recidive, pero casi nunca es metastásico.[101,102,103] Los estudios de niños con tumor miofibroblástico inflamatorio muestran tasas de supervivencia a 5 años superiores al 80 %.[111]

El sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide es un tumor de gran malignidad; antes de que el inhibidor de ALK estuviera disponible, era frecuente la progresión de la enfermedad y las tasas de mortalidad elevadas.[106,107,112] El sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide suele responder a los inhibidor de ALK, pero se ha observado progresión durante el tratamiento, lo que es compatible con el comportamiento clínico maligno del tumor.[108]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del tumor miofibroblástico inflamatorio son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Quimioterapia.
  3. Tratamiento con corticoesteroides.
  4. Tratamiento con AINE.
  5. Terapia dirigida (inhibidores de ALK).

La resección quirúrgica completa, cuando es factible, es el tratamiento de elección.[113] En una serie de 9 pacientes, 4 pacientes lograron remisión sostenida después de una resección completa, 3 pacientes con enfermedad residual recayeron, pero luego lograron una remisión sostenida, y 1 paciente con enfermedad metastásica respondió a la quimioterapia multifarmacológica.[114][Nivel de evidencia C1] En otro estudio de 31 pacientes sometidos a resección quirúrgica completa, 4 pacientes presentaron recidivas locales: todos estaban vivos después de una segunda resección quirúrgica (3 pacientes) o después de quimioterapia adyuvante y resección (1 paciente).[111] En una revisión de estudios alemanes, se identificó a 37 pacientes menores de 21 años con tumores miofibroblásticos inflamatorios.[115][Nivel de evidencia C1] La tasa de SSC general a 5 años fue del 75 %, y la tasa de SG fue del 91 %. De 20 pacientes, 17 tuvieron resecciones completas sin recidivas. El resto de los pacientes se trataron con una combinación de cirugía y varios regímenes de quimioterapia. Las resecciones quirúrgicas se pueden restringir a aquellos procedimientos que permiten conservar la forma y la función.

El beneficio de la quimioterapia se ha notificado en informes de casos.[116] En un registro prospectivo de niños con tumor miofibroblástico inflamatorio del European Soft Tissue Sarcoma Group (2005–2016) se encontró una tasa de SSC de un 82,9 % y una tasa de SG de un 98,1 % a los 5 años en todos los pacientes. La tasa de respuesta para los pacientes que recibieron tratamiento sistémico fue del 63 % cuando se usó como tratamiento de primera línea y del 66 % cuando se usó como tratamiento de segunda línea. Se notificó respuesta al tratamiento en 8 de los 10 pacientes que recibieron vinblastina y dosis bajas de metotrexato y en los 5 pacientes que recibieron inhibidores de ALK (todos exhibían tumores positivos para ALK).[111]

Hay informes de casos de respuesta a los corticoesteroides o a los AINE.[117,118] En una serie de 32 pacientes de 18 años o menos, se encontró que la resección completa fue el tratamiento de elección, aunque algunos pacientes recibieron corticoesteroides o quimioterapia citotóxica. La tasa de SG fue del 94 %. Recayeron 3 pacientes y, de estos, 2 murieron por la enfermedad. Cuando se realizó una resección completa, con la administración de otros tratamientos como los corticoesteroides, la tasa de supervivencia fue más alta para estos pacientes.[119][Nivel de evidencia C1]

Los tumores miofibroblásticos inflamatorios respondieron al tratamiento con inhibidores de ALK, de la siguiente manera:

  • Crizotinib. Dos adultos que tenían tumores miofibroblásticos inflamatorios con reordenamientos de ALK obtuvieron una respuesta parcial al crizotinib.[120][Nivel de evidencia C3] En pacientes pediátricos con enfermedad cuantificable, el uso de crizotinib produjo respuestas tumorales parciales en 3 de 6 pacientes que tenían tumores miofibroblásticos inflamatorios con translocaciones en ALK.[121] En un informe de caso de un paciente de 16 años con tumor miofibroblástico inflamatorio metastásico o multifocal positivo para ALK, se describió una respuesta completa y un intervalo sin enfermedad de 3 años con el crizotinib.[122] Por último, en un estudio participaron 14 pacientes con tumor miofibroblástico inflamatorio que se trataron con crizotinib. De estos pacientes, 5 presentaron una respuesta completa, 7 respuesta parcial y los otros 2 enfermedad estable. Ningún paciente recayó en el momento de publicación del artículo.[123][Nivel de evidencia C3] Para obtener información sobre el tratamiento de este tumor en el pulmón, consultar Tratamiento de los tumores miofibroblásticos inflamatorios pulmonares en la niñez.
  • Ceritinib. En un ensayo de fase I de ceritinib para pacientes adultos tratados antes con inhibidores de ALK, 1 paciente con tumor miofibroblástico inflamatorio presentó respuesta parcial.[124] Se observó respuesta al tratamiento de ceritinib en 2 pacientes pediátricos participantes de un ensayo clínico. Un paciente presentó una respuesta completa que permaneció durante varios años de tratamiento continuo, otro paciente presentó una respuesta parcial después de interrumpir el fármaco debido a toxicidad hepática y renal graves.[125] En un estudio multicéntrico de fase I de ceritinib, 7 de 10 pacientes con tumor miofibroblástico inflamatorio tuvieron respuestas objetivas al ceritinib.[126]

Los pacientes con sarcoma miofibroblástico inflamatorio epitelioide suelen tratarse con cirugía. A menudo se usan inhibidores de ALK para inducir respuestas, aunque es posible que ocurra progresión durante el tratamiento.[106,108,112]

Fibrosarcoma infantil

Hay 2 tipos diferentes de fibrosarcoma en niños y adolescentes: el fibrosarcoma infantil (también llamado fibrosarcoma congénito) y el fibrosarcoma sin otra indicación que no se puede distinguir del fibrosarcoma de adultos. Estos tipos de fibrosarcoma corresponden a 2 diagnósticos patológicos diferenciados y exigen diferente tratamiento. El fibrosarcoma sin otra indicación se trata más adelante.

Cuadro clínico inicial

Por lo general, el fibrosarcoma infantil se presenta como una masa de crecimiento rápido, que, a menudo, se observa en el momento del nacimiento o incluso en la ecografía prenatal. Es frecuente que estos tumores sean muy voluminosos en el cuadro clínico inicial.[127] Se ha notificado hipercalcemia secundaria a concentraciones elevadas de la proteína relacionada con la hormona paratiroidea como una característica de presentación inicial de esta enfermedad en los recién nacidos.[128]

Características moleculares

El tumor por lo general tiene una translocación citogenética característica: t(12;15)(p13;q25) que da lugar al gen de fusión ETV6::NTRK3. El fibrosarcoma infantil comparte esta translocación y tiene un aspecto histológico prácticamente idéntico al nefroma mesoblástico.

El fibrosarcoma infantil suele presentarse en niños menores de 1 año. En ocasiones, se presenta en niños hasta los 4 años. Se identificó un tumor con características morfológicas similares en niños más grandes; en estos niños, los tumores no exhiben la fusión ETV6::NRTK3, que es característica de los pacientes más jóvenes.[129] Se han descrito deleciones intragénicas en BRAF en casos de fibrosarcoma infantil, y aparecen junto con fusiones de NTRK3.[130] En un estudio se describieron los casos de 4 niños pequeños con tumores que se clasificaron, según sus características histológicas, como fibrosarcomas infantiles y que tenían reordenamientos en ALK.[131]

Pronóstico

La incidencia de metástasis en el momento del diagnóstico de estos tumores es baja.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del fibrosarcoma infantil son las siguientes:

  1. Cirugía seguida de observación.
  2. Cirugía seguida de quimioterapia.
  3. Quimioterapia seguida de cirugía.
  4. Terapia dirigida.

La resección completa es curativa en la mayoría de los pacientes con fibrosarcoma infantil. No obstante, el gran tamaño de la lesión hace que con frecuencia sea imposible llevar a cabo una resección sin causar consecuencias funcionales importantes. Por ejemplo, a menudo se necesita una amputación para los tumores de las extremidades con el fin de lograr una resección completa. Un grupo pediátrico europeo notificó que la observación también es una opción para pacientes con enfermedad de grado II después de una cirugía.[132] Se presentó recidiva en 2 de 12 pacientes con enfermedad del grupo II que no recibieron tratamiento adicional. Después de la quimioterapia se observó remisión completa en 1 paciente. Se administró quimioterapia posoperatoria a los pacientes con enfermedad en los grupos más altos y para aquellos cuya enfermedad progresó. En un estudio posterior, solo se presentó progresión de la enfermedad en 1 de 7 pacientes del grupo II, dicho paciente logró una remisión completa con quimioterapia.[133][Nivel de evidencia C1]

La quimioterapia preoperatoria ha hecho posible un abordaje quirúrgico más conservador. Los fármacos activos en este entorno son vincristina, dactinomicina, ciclofosfamida e ifosfamida.[134,135]; [133,136,137][Nivel de evidencia C1] En 3 estudios de pacientes con fibrosarcoma infantil, se indicó que un régimen sin alquilantes es eficaz y se debe administrar como tratamiento de primera elección en los pacientes con enfermedad macroscópica.[132,133,138]

Se observó respuesta al crizotinib en 2 casos de pacientes con variantes de fusiones LMNA::NTRK1.[139,140]

Se completó un ensayo de fase I/II de larotrectinib en pacientes con fibrosarcoma infantil recidivante que albergaban una fusión de NTRK. El larotrectinib es un fármaco oral de tipo inhibidor competitivo del ATP de los TRK A, B y C. Se observaron respuestas objetivas en los 8 pacientes, y las respuestas se presentaron a una mediana de edad de 1,7 meses. La mayoría de los efectos tóxicos fueron de grados 1 y 2, lo que incluyó transaminitis, leucopenia, neutropenia y vómitos. No se presentaron efectos de grados 4 o 5 atribuidos al larotrectinib.[141] De los 5 pacientes que lograron una respuesta parcial luego de tratarse con larotrectinib neoadyuvante, 3 pacientes se sometieron a una resección quirúrgica completa con márgenes negativos. Estos 3 pacientes obtuvieron una respuesta patológica excelente (efecto del tratamiento >98 %) y permanecieron sin enfermedad 7 a 15 meses después de la cirugía.[142,143]; [144][Nivel de evidencia C2] En un informe de seguimiento, 159 pacientes con tumores positivos para fusiones de TRK se inscribieron en ensayos de fase I/II. En 28 pacientes con fibrosarcoma infantil que recibieron larotrectinib en monoterapia, la tasa de respuesta fue del 96 %.[145][Nivel de evidencia C2]

En este ensayo, entre 8 pacientes que tenían fibrosarcoma infantil con el reordenamiento ETV6::NTRK3, 1 presentó enfermedad progresiva luego de 8 meses de larotrectinib y se determinó que tenía una resistencia adquirida por mutación en G623R. El paciente se trató con LOXO-195, un inhibidor selectivo de TRK diseñado para remediar la resistencia adquirida por mutaciones recurrentes en el dominio cinasa, y experimentó una respuesta parcial transitoria.[146]

Un paciente de 2 meses con fibrosarcoma infantil se trató primero con quimioterapia. En el momento de progresión de la enfermedad, se observó respuesta al pazopanib.[147]

Se notificó de un caso poco frecuente de regresión espontánea sin tratamiento.[148][Nivel de evidencia C3]

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presentan ejemplos de ensayos clínicos nacionales o institucionales en curso:

  • APEC1621 (NCT03155620) (Pediatric MATCH: Targeted Therapy Directed by Genetic Testing in Treating Pediatric Patients with Relapsed or Refractory Advanced Solid Tumors, Non-Hodgkin Lymphomas, or Histiocytic Disorders): en el NCI–Children's Oncology Group Pediatric Molecular Analysis for Therapeutic Choice (MATCH), que se conoce como Pediatric MATCH, se emparejarán fármacos de terapia dirigida con cambios moleculares específicos identificados en el tumor (resistente al tratamiento o recidivante) de un paciente. Los niños y adolescentes de 1 a 21 años son aptos para participar en este ensayo.

    Los pacientes que presentan tumores con variantes moleculares comprendidas en los grupos de tratamiento abiertos en este ensayo podrán inscribirse para recibir tratamiento en el Pediatric MATCH. Para obtener más información en inglés, consultar el portal de Internet del NCI y el portal de Internet ClinicalTrials.

    En el subprotocolo de fase II, se evalúa el uso de larotrectinib en pacientes con tumores que albergan fusiones de NTRK aprovechables.

  • LOXO-TRK-15003 (NCT02637687) (A Study to Test the Safety and Efficacy of the Drug Larotrectinib for the Treatment of Tumors With NTRK Fusions in Children): este ensayo de fase I del inhibidor pan-TRK larotrectinib está en curso para niños con tumores sólidos o tumores de encéfalo cuya enfermedad progresó o no respondió a los tratamientos disponibles, y para la que no existe un tratamiento curativo estándar, o no está disponible dicho tratamiento. El larotrectinib es un inhibidor muy selectivo de las 3 cinasas de la familia TRK.
  • RXDX-101-03 (NCT02650401) (Study Of Entrectinib [RXDX-101] in Children and Adolescents With Locally Advanced Or Metastatic Solid Or Primary CNS Tumors and/or Who Have No Satisfactory Treatment Options): este estudio multicéntrico sin anonimato de fase I/Ib sobre aumento gradual de la dosis consta de 5 partes y se lleva a cabo en pacientes pediátricos con tumores sólidos recidivantes o resistentes al tratamiento; tumores primarios en el SNC; neuroblastoma; tumores sólidos extracraneales (diferentes al neuroblastoma) con reordenamientos de los genes NTRK1/2/3, ROS1 o ALK; y pacientes que son por lo demás aptos pero incapaces de tragar cápsulas. El estudio se diseñó para explorar la inocuidad, la dosis máxima tolerada o la dosis recomendada para la fase II, el comportamiento farmacocinético y la actividad antitumoral del entrectinib.
  • NCT02568267 (Basket Study of Entrectinib [RXDX-101] for the Treatment of Patients With Solid Tumors Harboring NTRK 1/2/3 [Trk A/B/C], ROS1, or ALK Gene Rearrangements [Fusions]): este estudio en canasta multicéntrico mundial y sin anonimato de fase II sobre el entrectinib (RXDX-101), se diseñó para el tratamiento de pacientes de 18 o más años con tumores sólidos que albergan una fusión en los genes NTRK 1/2/3, ROS1 o ALK. Los pacientes se asignarán a diferentes canastas de acuerdo con el tipo de tumor y fusión génica.
  • ADVL1823 (NCT03834961) (Larotrectinib in Treating Patients With Previously Untreated TRK-Fusion Solid Tumors and TRK-Fusion Relapsed Acute Leukemia): este ensayo de fase II tiene como fin estudiar los efectos secundarios y la eficacia del larotrectinib en el tratamiento de pacientes que tienen tumores sólidos con una fusión de TRK que no han sido tratados antes y leucemia con una fusión de TRK que ha recidivado.

Fibrosarcoma sin otra indicación

Estos tumores carecen de la translocación que se observa en los fibrosarcomas infantiles. Se manifiestan como la mayoría de tumores no rabdomiosarcomatosos y el abordaje de tratamiento es similar.

Mixofibrosarcoma

El mixofibrosarcoma es una lesión rara, en especial en niños. Por lo general se trata con resección quirúrgica completa.

Sarcoma fibromixoide de grado bajo

El sarcoma fibromixoide de grado bajo es una neoplasia de tejidos blandos engañosa en el análisis histológico, que afecta en su mayoría a adultos jóvenes y de mediana edad. A menudo está ubicado de manera profunda en las extremidades y se caracteriza por la translocación FUS::CREB3L2 y, con menos frecuencia, por otras translocaciones como FUS::CREB3L1 y EWSR1::CREB3L1.[11,149,150,151,152]

Pronóstico

En una revisión de 33 pacientes (3 menores de 18 años) con sarcoma fibromixoide de grado bajo, 21 pacientes presentaron una recidiva local después de intervalos de hasta 15 años (mediana, 3,5 años). Se observaron metástasis hasta 45 años (mediana, 5 años) después del diagnóstico en 15 pacientes, los órganos de metástasis más frecuentes fueron los pulmones y la pleura. Este hallazgo acentúa la necesidad de seguimiento continuado para estos pacientes.[149] Incluso hasta después de una metástasis, es posible que la evolución de la enfermedad sea lenta.[153]

En otro informe, 14 de 73 pacientes eran menores de 18 años. En esta serie de seguimiento relativamente corto (mediana de 24 meses), solo 8 de 54 pacientes sometidos a un seguimiento adecuado presentaron recidiva local (9 %) o a distancia (6 %). Este informe indica que el comportamiento de este tumor podría ser mucho mejor de lo que se notificó antes.[154] Sin embargo, debido a la aparición de metástasis tardías, se justifica una vigilancia minuciosa de estos pacientes.

En un ensayo del Children's Oncology Group (COG) (ARST0332 [NCT00346164]) se inscribió a 11 pacientes con esta entidad tumoral. La mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 13 años y los varones fueron los más afectados. Los sitios tumorales más frecuentes fueron las extremidades superiores e inferiores (n = 9). Ninguno de los pacientes presentó recidiva de la enfermedad local ni a distancia al cabo de una mediana de seguimiento de hasta 2,7 años.[155]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del sarcoma fibromixoide de grado bajo son las siguientes:

  1. Cirugía.

Debido a que el sarcoma fibromixoide de grado bajo no es muy quimiosensible, la poca información disponible indica que el tratamiento de elección es quirúrgico.[153] El German Cooperative Weichteilsarkom Studiengruppe (CWS) notificó los resultados de un estudio de 31 pacientes menores de 21 años con sarcoma fibromixoide de grado bajo.[151][Nivel de evidencia C2] La tasa de SSC a 5 años fue del 71 % (IC 95 %, ±18,6 %), la tasa de supervivencia sin recaída local a 5 años fue del 76 % (IC 95 %, ± 17,6 %) y la tasa de SG a 5 años fue del 100 %. De 24 pacientes con resecciones R0, 5 (21 %) presentaron recaídas (3 locales, 1 metastásica y 1 combinada). De 7 pacientes con resecciones R1, 3 (43 %) presentaron recaída local.

Hay pocos datos sobre el uso de quimioterapia o radioterapia para esta enfermedad. En un informe, se indica que la trabectedina quizás sea eficaz para tratar el sarcoma fibromixoide de grado bajo.[156]

Fibrosarcoma epitelioide esclerosante

El fibrosarcoma epitelioide esclerosante es un sarcoma maligno raro que suele albergar fusiones en el gen EWSR1 y tiene una evolución clínica muy maligna. Este tumor presenta una respuesta precaria a la quimioterapia,[157,158,159] por lo tanto, el tratamiento suele ser una resección quirúrgica completa. Se recomienda un seguimiento prolongado debido a que se pueden presentar recidivas locales o metástasis tardías

Características genómicas

El fibrosarcoma epitelioide esclerosante por lo común tiene la fusión génica EWSR1::CREB3L1. Sin embargo, EWSR1 quizás se una a otros compañeros de fusión, como CREB3L2 y CREB3L3.[160,161] Las fusiones génicas que afectan FUS (como la fusión FUS::CREB3L2 asociada con el sarcoma fibromixoide de grado bajo) y PAX5 (por ejemplo, PAX5::CREB3L1) son infrecuentes pero ocurren.[161,162] Los casos de fibrosarcoma epitelioide esclerosante que carecen de la expresión de MUC4, por lo general tampoco presentan fusiones en el gen EWSR1; mientras que es común observar de manera simultánea fusiones génicas que afectan YAP1 y KMT2A.[157,160,163,164] El fibrosarcoma epitelioide esclerosante presenta más alteraciones estructurales y cromosómicas segmentarias que el fibrosarcoma fibromixoide de grado bajo.[160]

Tumores de músculo esquelético

Hay varios subtipos de tumores de músculo esquelético, entre ellos los siguientes:

  • Rabdomiosarcoma.
  • Ectomesenquimoma.

Rabdomiosarcoma

Para obtener más información, consultar Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil.

Ectomesenquimoma

El ectomesenquimoma es un tumor raro de vaina de nervio que casi siempre ocurre en la niñez. Se trata de un sarcoma de tejido blando bifenotípico con componentes mesenquimatosos y ectodérmicos.

  • En una revisión retrospectiva de una sola institución con 6 pacientes de ectomesenquimoma maligno, se identificó el rabdomiosarcoma como el elemento mesenquimatoso en 5 de los 6 tumores.[165] Los tumores con características morfológicas de rabdomiosarcoma alveolar exhibieron la translocación característica. No se identificaron anomalías moleculares unificadoras.
  • En una revisión retrospectiva de una sola institución, se identificaron 7 casos de ectomesenquimoma maligno.[166] Los 7 pacientes eran hombres con una media de edad de 7,5 meses (intervalo, 0,6–17,0 meses). En la mayoría de los pacientes se observaron elementos de rabdomiosarcoma embrionario. Los elementos neuroectodérmicos mixtos se componían de células ganglionares difusas, ganglioneuroma o ganglioneuroblastoma. De los 7 casos, 6 presentaron mutaciones en HRAS. En todos los casos se mantuvo la trimetilación en la lisina 27 de la histona H3 (H3K27me3), que suele perderse en los tumores malignos de vaina de nervio periférico. De los 7 pacientes en esta serie, 5 estaban sanos, sin enfermedad en el momento del informe.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del ectomesenquimoma son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Quimioterapia.
  3. Radioterapia.

El CWS informó sobre 6 pacientes (0,2–13,5 años de edad) registrados en el transcurso de 14 años.[167][Nivel de evidencia C1] Los tumores se localizaron en diferentes sitios; por ejemplo, las extremidades, el abdomen y la órbita. Los 6 pacientes se trataron con cirugía y quimioterapia dirigida al rabdomiosarcoma. Dos pacientes recibieron radioterapia y tres pacientes presentaron recidivas tumorales con características de rabdomiosarcoma. Aunque los datos son escasos, parece que el tumor quizás responda a la quimioterapia.[167]

Tumores de músculo liso

Leiomiosarcoma sin otra indicación

El leiomiosarcoma representa el 2 % de los sarcomas de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

Factores de riesgo

De 43 niños con VIH/SIDA que presentaron tumores, 8 tenían un leiomiosarcoma relacionado con el virus de Epstein-Barr.[168] Los sobrevivientes de retinoblastoma hereditario tienen un aumento estadísticamente significativo del riesgo de presentar leiomiosarcoma y el 78 % de estos pacientes reciben el diagnóstico 30 años después del diagnóstico inicial del retinoblastoma o más tarde.[169]

Tratamiento

La opción de tratamiento del leiomiosarcoma es la siguiente:

  1. Quimioterapia (trabectedina).

La trabectedina se ha estudiado en adultos con leiomiosarcoma. Los resultados de los estudios son los siguientes:

  • En un estudio sin anonimato de trabectedina en adultos con sarcomas recidivantes, la mejor tasa de respuesta general (remisión completa y remisión parcial) se observó en los pacientes con leiomiosarcoma (7,5 %).[170] La tasa de beneficio clínico (que incluye la enfermedad estable) fue del 54 % en pacientes con leiomiosarcoma.
  • En otro estudio de adultos, se asignó al azar a pacientes con liposarcoma recidivante y leiomiosarcoma para recibir tratamiento con trabectedina o dacarbazina. Los pacientes tratados con trabectedina presentaron una reducción del 45 % en la progresión de la enfermedad.[35]

No hay datos que respalden el uso de trabectedina para pacientes pediátricos.

Tumores denominados fibrohistiocíticos

Tumor fibrohistiocítico plexiforme

El tumor fibrohistiocítico plexiforme es un tumor raro de grado bajo a intermedio, que afecta, con mayor frecuencia, a niños y adultos jóvenes. Según la serie, la mediana de edad en el momento de la presentación oscila entre 8 y 14,5 años; sin embargo, se describió el tumor en pacientes de apenas 3 meses.[171,172]

Cuadro clínico inicial

El tumor por lo común aparece como una masa indolora en la piel o el tejido subcutáneo y, más a menudo, compromete las extremidades superiores, incluso los dedos, las manos y la muñeca.[173,174,175] Hay escasos informes de diseminación del tumor a los ganglios linfáticos regionales o los pulmones.[171,175,176]

Características moleculares

No se han detectado anomalías cromosómicas constantes, pero se notificó una translocación t(4;15)(q21;q15).[177]

Pronóstico

El tumor fibrohistiocítico plexiforme es de grado intermedio y casi nunca produce metástasis.

Tratamiento

La opción de tratamiento del tumor fibrohistiocítico plexiforme es la siguiente:

  1. La cirugía es el tratamiento de elección, pero se ha informado recidiva local en el 12 % al 50 % de los casos.[178]

Tumores de vaina de nervio periférico

Hay varios subtipos de tumores de vaina de nervio periférico, incluso los siguientes:

  • Tumor maligno de vaina de nervio periférico sin otra indicación.
  • Tumor tritón maligno.

Tumor maligno de vaina de nervio periférico sin otra indicación

Los tumores malignos de vaina del nervio periférico representan el 5 % de los sarcomas de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

Factores de riesgo

El tumor maligno de vaina del nervio periférico en ocasiones aparece de manera esporádica en niños con neurofibromatosis de tipo 1 (NF1).[179] Entre los pacientes con NF1, los antecedentes familiares de tumor maligno de vaina del nervio periférico se relacionan con un aumento del riesgo de presentación prematura de un tumor maligno de vaina de nervio periférico.[180]

Se notificó un caso raro de un niño con neurofibromatosis de tipo 2 (NF2) confirmada y 1 neurofibroma benigno que presentó 5 recidivas. Durante ese periodo, las lesiones progresivamente perdieron marcadores (como S-100) y adquirieron signos definitivos de transformación maligna a un tumor maligno de vaina de nervio periférico, documentado por múltiples marcadores, incluso el primer ejemplo de NOTCH2 en esta enfermedad.[181]

Características moleculares

Las características moleculares del tumor maligno de vaina del nervio periférico son las siguientes:

  • Se describieron mutaciones inactivadoras de SUZ12 en esos tumores y están ausentes en los neurofibromas.[182]
  • Se usó una matriz de metilación de DNA para una caracterización del perfil cromosómico basado en el metiloma de 171 tumores de vaina de nervio periférico.[183] Los neurofibromas atípicos y los tumores malignos de vaina del nervio periférico no se pudieron distinguir, con un perfil de metilación común y pérdida de CDKN2A. En el análisis epigenómico se identificaron 2 grupos de tumores malignos de vaina del nervio periférico de grado alto convencionales que compartían la pérdida frecuente de neurofibromina. El grupo más grande presentaba una pérdida adicional de la trimetilación de H3K27me3. El grupo más pequeño de pacientes con sitios primarios en su mayoría raquídeos presentó retención de H3K27me3.
  • Se realizó el perfil genómico en 201 tumores malignos de vaina del nervio periférico.[184] Se observaron alteraciones en BRAF en 13 de los 201 tumores.

Pronóstico

Las características relacionadas con un pronóstico favorable son las siguientes:[179,185,186,187]

  • Tamaño más pequeño del tumor. En un análisis multivariante, se encontró que solo el tamaño del tumor y la expresión nuclear de p53 fueron factores de predicción independientes de la supervivencia específica de la enfermedad.[186]
  • Sexo masculino, y población de raza blanca que no es hispana.[188]
  • Ausencia de metástasis en el momento de la presentación. En una revisión retrospectiva de 140 pacientes con tumor maligno de vaina del nervio periférico del MD Anderson Cancer Center, se incluyó a niños y adolescentes. La supervivencia específica de la enfermedad a 10 años fue del 32 %. En esta serie, la enfermedad metastásica se relacionó con un pronóstico mucho más precario.[186]
  • Estadio más bajo.
  • Grado histológico más bajo.
  • Extremidad como sitio primario.

Las características relacionadas con un pronóstico desfavorable son las siguientes:[189]

  • Grado alto.
  • Localización profunda del tumor.
  • Estadio localmente avanzado en el momento del diagnóstico.
  • Resección (R2) macroscópica incompleta.
  • Inactivación de p53, ya sea por mutación o por amplificación de MDM2.[190]
  • Expresión alta de p53 y ciclina D1. Estos marcadores se identificaron como factores de pronóstico adverso mediante tinción inmunohistoquímica del tejido de la biopsia diagnóstica.[191][Nivel de evidencia C2]

En los pacientes con enfermedad localizada del estudio del MD Anderson Cancer Center, no se observó una diferencia significativa en el desenlace entre los pacientes con NF1 y aquellos sin NF1.[186] En otros estudios, no se definió bien si la ausencia de NF1 es un factor de pronóstico favorable puesto que se ha relacionado con desenlaces favorables [185] y desfavorables.[179,185,187] En el estudio del French Sarcoma Group, se relacionó la NF1 con otras características de pronóstico precario, pero no fue un factor de predicción independiente de un desenlace precario.[189] En un análisis retrospectivo de datos de un registro de cáncer de los Países Bajos, se identificaron 784 pacientes con tumor maligno de vaina de nervio periférico; 70 pacientes tenían18 años o menos.[192][Nivel de evidencia C1] En niños con NF1, los tumores grandes (5 cm, 92,3 vs. 59,1 %) fueron más comunes. En general, la tasa estimada de supervivencia a 5 años fue del 52,4 % (error estándar [EE], 10,1 %) en los pacientes con tumor maligno de vaina de nervio periférico y NF1, en comparación con el 75,8 % (EE, 7,1 %) en pacientes sin NF1.

El Italian Sarcoma Group informó sobre el desenlace luego de la recidiva en 73 niños y adolescentes con tumor maligno de vaina del nervio periférico.[193][Nivel de evidencia C1] La mediana de SG después de la primera recaída fue de 11 meses, y las tasas de supervivencia fueron del 39,2 % al cabo de 1 año y del 15,8 % a los 5 años. Los factores vinculados con un mejor pronóstico para estos pacientes que recayeron fueron menor grado de invasión tumoral en el inicio, mayor tiempo transcurrido hasta la recaída y logro de una segunda remisión completa (que se relacionó con la viabilidad de una cirugía radical).

El CWS notificó una revisión retrospectiva de pacientes con tumor maligno de vaina de nervio periférico tratados en 5 ensayos consecutivos del CWS.[194] En total se analizaron 159 pacientes. Se notificó NF1 en 38 pacientes (24 %). En el momento del diagnóstico, se documentó compromiso ganglionar en 15 pacientes (9 %) y se observaron metástasis a distancia en 15 pacientes (9 %). En general, la tasa de SG fue del 40,5 % a los 5 años y del 36,3 % a los 10 años. La tasa de SG fue del 54,6 % a los 5 años y del 47,1 % a los 10 años. En el análisis univariante, los factores de pronóstico adverso de la SSC o la SG fueron edad más avanzada, estado de positividad para NF1, sitio del tumor primario diferente a una extremidad, tamaño tumoral más grande, grupo IRS más alto, presencia de enfermedad metastásica y fracaso en alcanzar la primera remisión completa.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del tumor maligno de vaina del nervio periférico son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.[26,27]
  3. Quimioterapia, para tumores irresecables.

La resección quirúrgica completa del tumor, cuando es posible, es el tratamiento de elección.

La función de la radioterapia es difícil de evaluar, pero no se puede asegurar un control local duradero de un residuo tumoral microscópico posoperatorio identificado después de la radioterapia.

  1. La quimioterapia ha producido respuestas objetivas en niños con tumor maligno de vaina del nervio periférico. En un análisis retrospectivo numeroso en Alemania e Italia sobre la experiencia con el tumor maligno de vaina del nervio periférico, se informó que el 65 % de los tumores medibles presentaron respuestas objetivas a los regímenes de quimioterapia que incluían ifosfamida; sin embargo, el análisis no demostró de forma concluyente una mejora en la supervivencia producida por la quimioterapia.[179] En este análisis retrospectivo, también se observó una tendencia a la mejora del desenlace con radioterapia posoperatoria.[179]
  2. En una serie de 37 pacientes jóvenes con tumor maligno de vaina del nervio periférico y NF1, se observó que la mayoría de los pacientes tenían tumores invasores de gran tamaño que respondieron de manera precaria a la quimioterapia. La tasa de SSP fue del 19 % y la tasa de SG a 5 años fue del 28 %.[195]
  3. El EpSSG condujo un estudio prospectivo en pacientes de 21 años o menos con tumor maligno de vaina de nervio periférico.[196] La resección quirúrgica del tumor primario se clasificó como R0 si la resección fue completa con márgenes negativos al microscopio, R1 si los márgenes fueron positivos al microscopio y R2 si después de la resección se encontró tumor macroscópico residual. Los pacientes se asignaron sin aleatorización a 1 de los siguientes 4 grupos de riesgo:
    • Cohorte 1. Pacientes que tenían tumores con resección completa (R0) sometidos a cirugía sola (n = 13); la tasa de SSC a 5 años fue del 92 %.
    • Cohorte 2. Pacientes que tenían tumores con resección incompleta (R1/R2) que recibieron radioterapia adyuvante (n = 4); la tasa de SSC a 5 años fue del 33 %.
    • Cohorte 3. Pacientes que tenían tumores con resección incompleta (R1/R2) que recibieron quimioterapia adyuvante (n = 7); la tasa de SSC a 5 años fue del 29 %.
    • Cohorte 4. Pacientes que recibieron quimioterapia antes de la resección quirúrgica o que exhibían compromiso ganglionar (n = 27); la tasa de SSC a 5 años fue del 52 %.

    Para los pacientes que recibieron quimioterapia, el tratamiento incluyó 4 cursos de ifosfamida con doxorrubicina y 2 cursos de ifosfamida simultáneos con radioterapia (50,4–54 Gy). La tasa de respuesta a la quimioterapia (respuesta parcial y respuesta completa) en los pacientes con enfermedad cuantificable fue del 46 %. La presencia de NF1 (51 % de los pacientes) fue un factor independiente de pronóstico precario para la SG y la SSC.

  4. En un estudio de niños y adultos con tumores malignos de vaina del nervio periférico esporádicos (n = 14) o vinculados con NF1 que no habían recibido quimioterapia (n = 34), se trató a los pacientes con 2 ciclos de ifosfamida y doxorrubicina además de 2 ciclos de ifosfamida y etopósido.[197]
    • Las tasas de respuesta fueron inferiores en los pacientes con tumores relacionados con NF1 que en los pacientes con tumores esporádicos (17,9 % vs. 44,4 %). No obstante, debido al cierre prematuro del estudio no se contó con una potencia estadística suficiente para detectar diferencias significativas en las respuestas objetivas entre los 2 grupos.
    • Las tasas de enfermedad estable fueron similares en ambos grupos.

Tumor maligno de vaina del nervio periférico recidivante

En un análisis de 120 pacientes inscritos en protocolos pediátricos italianos entre 1979 y 2004, se identificó a 73 pacientes menores de 21 años con tumor maligno de vaina del nervio periférico recidivante. El momento de la recaída desde el diagnóstico inicial varió desde 1 hasta 204 meses, con una mediana de tiempo hasta la recaída de 7 meses. La mediana de SG desde la primer recaída fue de 11 meses, con una tasa de SG del 39 % al cabo de 1 año y del 16 % a los 5 años. Los factores relacionados con una mayor probabilidad de supervivencia luego de una recaída fueron menor grado de invasión en el cuadro clínico inicial, mayor tiempo transcurrido hasta la recaída y resección quirúrgica completa del tumor en la recaída.[193]

En un estudio retrospectivo se evaluaron 9 pacientes con tumor maligno de vaina de nervio periférico irresecable o metastásico (7 pacientes tratados antes) tratados con selinexor con doxorrubicina o sin esta. Se observó que 3 pacientes exhibieron una respuesta parcial de 3 a más de 8 meses, y 4 pacientes presentaron enfermedad estable.[198]

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presentan ejemplos de ensayos clínicos nacionales o institucionales en curso:

  • APEC1621 (NCT03155620) (Pediatric MATCH: Targeted Therapy Directed by Genetic Testing in Treating Pediatric Patients with Relapsed or Refractory Advanced Solid Tumors, Non-Hodgkin Lymphomas, or Histiocytic Disorders): en el NCI–Children's Oncology Group Pediatric Molecular Analysis for Therapeutic Choice (MATCH), que se conoce como Pediatric MATCH, se emparejarán fármacos de terapia dirigida con cambios moleculares específicos identificados en el tumor (resistente al tratamiento o recidivante) de un paciente. Los niños y adolescentes de 1 a 21 años son aptos para participar en este ensayo.

    Los pacientes que presentan tumores con variantes moleculares comprendidas en los grupos de tratamiento abiertos en este ensayo podrán inscribirse para recibir tratamiento en el Pediatric MATCH. Para obtener más información en inglés, consultar el portal de Internet del NCI y el portal de Internet ClinicalTrials.

  • NCT04465643 (Neoadjuvant Nivolumab Plus Ipilimumab for Newly Diagnosed Malignant Peripheral Nerve Sheath Tumor): el objetivo de este estudio es evaluar la inocuidad y la viabilidad del nivolumab neoadyuvante con ipilimumab antes del tratamiento estándar (cirugía, quimioterapia o radioterapia) en pacientes con NF1 que reciben un diagnóstico nuevo de tumores malignos o premalignos de vaina del nervio periférico, en quienes se indica la cirugía de resección del tumor.

Tumor tritón maligno

El tumor tritón maligno es una variante de los tumores malignos de la vaina de nervio periférico. Se presentan con mayor frecuencia en pacientes con NF1 y constan de componentes neurogénicos y rabdomioblásticos. Los tumores tritón malignos son neoplasias malignas de grado alto. Por lo general, aparecen antes de los 35 años y son muy infrecuentes en niños (solo informes de casos).[199]

Tratamiento

Aunque los tumores tritón malignos no suelen responder a la quimioterapia y la radioterapia, hasta ahora se tratan como rabdomiosarcomas.[199][Nivel de evidencia C1] Para obtener más información, consultar Tratamiento del rabdomiosarcoma infantil.

Tumores pericíticos (perivasculares)

Hay varios subtipos de tumores pericíticos (perivasculares), entre ellos los siguientes:

  • Miopericitoma.
  • Miofibromatosis infantil.

Miopericitoma

El hemangiopericitoma infantil, un subtipo de miopericitoma, es un tumor muy vascularizado de origen incierto.

Los niños menores de 1 año con hemangiopericitoma parecen tener mejor pronóstico que los niños mayores de 1 año con hemangiopericitoma.[200,201,202]

Tipo histológico

En el análisis histológico, los hemangiopericitomas contienen células redondas o fusiformes empaquetadas alrededor de una vasculatura compleja con muchas ramificaciones. Con frecuencia hay hialinización. El hemangiopericitoma infantil presenta características histológicas semejantes, pero muchos tumores son multilobulados con vasculatura por fuera de la masa tumoral.[203]

Tratamiento y desenlace

Las opciones de tratamiento del hemangiopericitoma infantil son las siguientes:

  1. Quimioterapia.

En una serie de 17 niños, se demostraron con claridad las diferencias entre el potencial metastásico y la reacción al tratamiento del hemangiopericitoma infantil y de adultos.[204] Once niños eran mayores de 1 año. Varios pacientes tenían enfermedad ganglionar o pulmonar. Murieron 6 pacientes con progresión de la enfermedad en estadios II o III. Sobrevivieron 3 pacientes con enfermedad en estadio I, aunque 1 paciente presentó una recidiva pulmonar. Entre los pacientes, 6 tenían hemangiopericitoma infantil, 5 de ellos en estadio superior al I. Los 6 pacientes sobrevivieron y 3 de ellos presentaron una respuesta favorable a la vincristina, la actinomicina y la ciclofosfamida.

En muchos estudios, se notificaron tumores en niños que se parecen más a la miofibromatosis infantil o al hemangiopericitoma.[140,205] Se encontró una proteína de fusión LMNA::NTRK1, en lugar de la proteína de fusión ETV6::NTRK3 que se encuentra en el fibrosarcoma infantil congénito.[206] Un paciente con esta fusión respondió bien al crizotinib. Para obtener más información sobre la miofibromatosis infantil, consultar la sección Miofibromatosis infantil.

Miofibromatosis infantil

Esta entidad es un tumor fibroso de la lactancia y la niñez que aparece con más frecuencia en los primeros 2 años de vida.[207]

La lesión se puede presentar como un nódulo subcutáneo aislado (miofibroma) que, por lo común, afecta la región de la cabeza y el cuello, o como lesiones que afectan múltiples áreas de la piel, los músculos y los huesos (miofibromatosis).[208,209,210,211]

Se ha descrito una forma autosómica dominante de la miofibromatosis infantil. Se asocia con mutaciones germinales en el gen PDGFRB, la variante R561C es la más frecuente.[212,213,214] La variante R561C produce una activación relativamente débil de PDGFRB, lo que quizás explique la presencia de otras mutaciones en PDGFRB que exhiben más actividad en algunos casos de miofibromatosis infantil familiar.[212,215]

El Host Genome Working Group de la European Society for Paediatric Oncology formuló pautas de asesoramiento y pruebas germinales para estos grupos de pacientes. Este grupo recomienda el análisis germinal de los niños con miofibromatosis infantil que presentan por lo menos 1 de los siguientes criterios:[216]

  • Enfermedad multicéntrica.
  • Miofibromatosis infantil en familiares de primer y segundo grado o que presentan nódulos de tejidos blandos durante la niñez.
  • Presencia de una variante germinal de PDGFR en la familia.
  • Sospecha de variantes germinales en mosaico de PDGFR.

Se han identificado mutaciones somáticas de ganancia de función en PDGFRB en casos esporádicos de miofibromatosis infantil, entre ellas, mutaciones puntuales activadoras, indels en el marco de lectura y duplicaciones.[217,218] Se han observado mutaciones en PDGFRB en la mayoría de los casos de nódulos multicéntricos, pero son menos comunes en los casos de miofibroma solitario.[215,218] Algunas mutaciones en PDGFRB causales de miofibromatosis infantil son sensibles a los inhibidores de tirosina–cinasas como el imatinib.[215,218]

Tratamiento y desenlace

Estas lesiones tienen un pronóstico excelente y a veces remiten de manera espontánea. Cerca de un tercio de los casos con compromiso multicéntrico también tendrán compromiso visceral; el pronóstico para estos pacientes es precario.[210,211,219]

Las opciones de tratamiento de la miofibromatosis infantil son las siguientes:

  1. Observación.
  2. Quimioterapia.
  3. Inhibidores de tirosina–cinasas eficaces contra PDGFRB.

La administración de terapia combinada de vincristina con dactinomicina y vinblastina con metotrexato probó ser eficaz en casos de enfermedad multicéntrica con compromiso visceral y en casos potencialmente mortales por progresión de la enfermedad (por ejemplo, obstrucción de las vías respiratorias superiores).[210,211,220]

En informes de casos, se ha notificado regresión tumoral rápida en pacientes con miofibromatosis infantil que exhiben mutaciones en PDGFRB cuando se tratan con inhibidores de tirosina–cinasas como imatinib y sunitinib, que inhiben la ganancia de función del gen PDGFRB mutado en el tumor.[221,222,223,224]

Tumores de diferenciación incierta

Hay muchos subtipos de tumores de diferenciación incierta, entre ellos los siguientes:

  • Mixoma sin otra indicación (benigno).
  • Sarcoma sinovial sin otra indicación (poco diferenciado, de células fusiformes y variedades bifásicas).
  • Sarcoma epitelioide.
  • Sarcoma alveolar de partes blandas.
  • Sarcoma de células claras sin otra indicación.
  • Crondrosarcoma mixoide extraesquelético.
  • Tumor desmoplásico de células redondas pequeñas.
  • Tumor rabdoide sin otra indicación (extrarrenal).
  • Tumor epitelioide perivascular (PEComa) maligno .
  • Sarcoma indiferenciado.
  • Sarcoma pleomórfico indiferenciado.
  • Sarcoma de células redondas indiferenciado.

Mixoma sin otra indicación

Complejo de Carney

El complejo de Carney es un síndrome autosómico dominante causado por mutaciones en el gen PPKAR1A, que se encuentra en el cromosoma 17.[225] El síndrome se caracteriza por mixomas cardíacos y cutáneos, lentigos de color marrón pálido a marrón, nevos azules, enfermedad adrenocortical nodular pigmentada primaria que causa el síndrome de Cushing y una variedad de tumores endocrinos y no endocrinos, incluso adenomas de hipófisis, tumores tiroideos y tumor testicular de células de Sertoli calcificante de células grandes.[225,226,227] Se han publicado directrices para los pacientes con complejo de Carney, que incluyen ecografía cardíaca, testicular y de tiroides.

Para los pacientes con complejo de Carney, el pronóstico depende de la frecuencia de recidivas de los mixomas cardíacos y cutáneos y otros tumores.

Para obtener más información sobre los tratamientos de las afecciones relacionadas con el complejo de Carney, consultar los siguientes resúmenes:

  • Tratamiento de los tumores cardíacos infantiles.
  • Tratamiento del cáncer de testículo infantil.
  • Tratamiento del cáncer de tiroides infantil.

Sarcoma sinovial sin otra indicación

El sarcoma sinovial representa el 9 % de los sarcomas de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

El sarcoma sinovial es uno de los sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos más frecuentes en niños y adolescentes. En una revisión de SEER, entre 1973 y 2005, se identificó un grupo de 1268 pacientes con sarcoma sinovial. Alrededor del 17 % de estos pacientes eran niños y adolescentes, y la mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 34 años.[228] Además, en los protocolos COG ARST0332 (NCT00346164) y EpSSG 2005, el sarcoma sinovial fue el subtipo histológico más común.[229]

Clasificación histológica

El sarcoma sinovial se subclasifica en los siguientes tipos:

  • Sarcoma sinovial poco diferenciado.
  • Sarcoma sinovial de células fusiformes.
  • Sarcoma sinovial bifásico.

Cuadro clínico inicial

Las localizaciones más frecuente son las extremidades, seguidas del tronco, la cabeza y el cuello.[228] Muy pocas veces el sarcoma sinovial surge en el corazón o el pericardio y presenta manifestaciones pleuropulmonares.[230,231,232,233]

El CWS notificó 432 casos de sarcoma sinovial en pacientes menores de 21 años entre 1981 y 2018.[234] En el estudio, se compararon 3 grupos de edad de pacientes: niños (0–12 años; n = 176), adolescentes (13–16 años; n = 178) y adultos jóvenes (17–21 años; n = 78). La proporción de tumores invasores fue significativamente más alta en los pacientes de más edad (niños, 33 %; adolescentes, 39 %; adultos jóvenes, 54 %; P = 0,009). La proporción de tumores más grandes que 10 cm (niños; 13 %; adolescentes, 21 %; adultos jóvenes, 31 %; P = 0,006) y la presencia de metástasis en el diagnóstico inicial también fueron más altas en los pacientes de más edad (niños, 6 %; adolescentes, 10 %; adultos jóvenes, 21 %; P = 0,001).

El sitio más común de metástasis es el pulmón.[235,236] El riesgo de metástasis está más condicionado por el tamaño del tumor. Los pacientes con tumores que miden más de 5 cm tienen un riesgo estimado 32 veces más alto de presentar metástasis en comparación con los otros pacientes.

Evaluación diagnóstica y características moleculares

El diagnóstico del sarcoma sinovial se hace mediante análisis inmunohistoquímico, hallazgos ultraestructurales y comprobación de una translocación cromosómica específica: t(x;18)(p11.2;q11.2). Esta anomalía es específica del sarcoma sinovial y se encuentra en todos los subtipos morfológicos. El sarcoma sinovial se produce como consecuencia de un reordenamiento del gen SS18 en el cromosoma 18 con uno de los subtipos (1, 2 o 4) del gen SSX en el cromosoma X.[237,238] Se piensa que el transcrito SS18::SSX promueve la inactivación epigenética de genes oncosupresores importantes.[239]

En un informe, se observó la reducción de la reactividad nuclear de SMARCB1 en la tinción inmunohistoquímica de 49 casos de sarcoma sinovial; ello indica la posibilidad de que este modelo ayude a distinguir el sarcoma sinovial de otros tipos histológicos.[240]

Pronóstico

Los pacientes menores de 10 años tienen desenlaces y características clínicas más favorables que los pacientes de más edad. Las características clínicas favorables incluyen tumores primarios en extremidades, tumores más pequeños y enfermedad localizada.[228,241,242] En un metanálisis también se indicó que la respuesta a la quimioterapia se correlacionó con mejora de la supervivencia.[243]

En los siguientes estudios se notificaron múltiples factores relacionados con desenlaces desfavorables:

  • En un análisis retrospectivo de sarcoma sinovial en niños y adolescentes tratados en Alemania e Italia, el tamaño del tumor (>5 cm o ≤5 cm en su mayor dimensión) fue un factor pronóstico importante de la SSC.[244] En este análisis, el grado de invasión local confirió una menor probabilidad de SSC, pero el desenlace clínico no se relacionó con los márgenes quirúrgicos.
  • En un análisis retrospectivo de una sola institución de 111 pacientes con sarcoma sinovial menores de 22 años en el momento del diagnóstico, se encontró que la SG más precaria se relacionó con un tamaño tumoral más grande, una mayor profundidad en el tejido, mayor grado de invasión local y una ubicación más proximal del tumor.[245][Nivel de evidencia C1]
  • En un análisis multicéntrico de 219 niños de diversos centros de tratamiento, incluso de Alemania, el SJCRH, el Instituto Tumori y el MD Anderson Cancer Center, se notificó una tasa estimada de SG a 5 años del 80 % y una SSC del 72 %.[243] En este análisis, se observó una interacción entre el tamaño del tumor y el grado de invasión. En análisis multivariantes, los pacientes con tumores grandes o tumores invasores o enfermedad del grupo III del IRS (localizada, con resección incompleta o de la que solo se obtuvo una biopsia) y del grupo IV del IRS (metástasis en el momento del diagnóstico) presentaron una SG más precaria. El tratamiento con radioterapia se relacionó con una mejora de la SG (CRI, 0,4; IC 95 %, 0,2–0,7). En los pacientes del grupo III del IRS, la respuesta objetiva a la quimioterapia (18 de 30 [60 %]) se correlacionó con una mejora de la supervivencia. En adultos, el pronóstico más precario se relacionó con factores como el estadio III y el estadio IVA del International Union Against Cancer/American Joint Committee on Cancer, la necrosis tumoral, la localización en el tronco, un índice mitótico alto, la edad y el grado histológico.[246,247,248]
  • Se ha estudiado el uso de firmas pronósticas de expresión e índice genómico del sarcoma sinovial. Los perfiles genómicos más complejos, con mayor reordenamiento del genoma, son más frecuentes en adultos que en los pacientes más jóvenes con sarcoma sinovial y se relacionan con mayor riesgo de metástasis.[249]
  • En una revisión de 84 pacientes con sarcoma sinovial localizado donde se contaba con información sobre el estado de la fusión (SS18::SSX) y la clasificación histológica, no se encontró una diferencia en la SG según estos criterios. Sin embargo, en cuanto al tamaño del tumor en el momento del diagnóstico, en el estudio se halló que los pacientes con tumores de entre 5 cm y 10 cm presentaron un pronóstico más precario que aquellos con tumores más pequeños (P = 0,02); los pacientes con tumores de más de 10 cm tuvieron una SG aún más precaria (P = 0,0003).[250][Nivel de evidencia C1]
  • El grupo alemán CWS analizó a 27 pacientes evaluables menores de 21 años con metástasis pulmonares entre 296 pacientes con sarcoma sinovial. Las metástasis comprometían los pulmones en todos los pacientes. La tasa de SSC a 5 años fue del 26 % y la tasa de SG fue del 30 %. El factor pronóstico más importante en el momento de la presentación fue que las metástasis se limitaran a una lesión en un solo pulmón o una lesión en ambos pulmones (grupo que llamaron oligometastásico). Los elementos del tratamiento vinculados con una supervivencia superior fueron la terapia local adecuada del tumor primario y, cuando fue posible, de las metástasis. El uso de irradiación dirigida a todo el pulmón no se correlacionó con mejores desenlaces.[251][Nivel de evidencia C1]
  • El EpSSG diseñó un índice genómico para el sarcoma sinovial.[252][Nivel de evidencia C2] El índice genómico se definió como A2 /C, donde A es el número total de alteraciones (ganancias y pérdidas segmentarias) y C es el número de cromosomas afectados en los resultados de la matriz de hibridación genómica comparativa. En un análisis multivariante de 61 pacientes pediátricos, adolescentes y adultos jóvenes (edad <25 años), el índice genómico alto fue un factor de predicción independiente de SSC y SG inferiores.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del sarcoma sinovial son las siguientes:

  1. Cirugía. Es posible administrar radioterapia o quimioterapia antes de la cirugía o después de esta.[26,27]
  2. Quimioterapia.

El COG y el EpSSG informaron sobre un análisis combinado de 60 pacientes menores de 21 años con sarcoma sinovial localizado que se asignaron de manera prospectiva a cirugía sin radioterapia ni quimioterapia adyuvante.[253] La inscripción se limitó a los pacientes con resección completa inicial con márgenes limpios en el análisis histológico y un tumor de grado 2 de cualquier tamaño o un tumor de grado 3 de 5 cm o menos. La tasa de SSC a 3 años fue del 90 % (mediana de seguimiento, 5,2 años; intervalo, 1,9–9,1). Se presentaron 8 casos de recidiva tumoral, ningún caso de recidiva metastásica. Todos los pacientes con enfermedad recidivante se trataron de manera eficaz con terapia de segunda línea que produjo una tasa de SG del 100 %. Por lo tanto, los autores concluyeron que un abordaje quirúrgico exclusivo fue óptimo para para los pacientes que alcanzaron una resección R0 y tenían tumores de menos de 5 cm, sin importar el grado.

El sarcoma sinovial es más sensible a la quimioterapia que muchos otros tipos de sarcomas de tejido blando. Los niños con sarcoma de sinovial tienen mejor pronóstico que los adultos con este tipo sarcoma.[32,236,248,254,255,256,257,258] Los regímenes más utilizados para el tratamiento del sarcoma sinovial incorporan ifosfamida y doxorrubicina.[243,257,259] Las tasas de respuesta al régimen de ifosfamida y doxorrubicina son más altas que para otros sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatosos.[260]

En algunos estudios se notificaron los siguientes resultados relacionados con el tratamiento de quimioterapia:

  • Varios centros de tratamiento promueven la quimioterapia después de la resección y la radioterapia para niños y adultos jóvenes con sarcoma sinovial.[243,244,261,262,263]
  • En los estudios International Society of Pediatric Oncology-Malignant Mesenchymal Tumors, se observó que determinados pacientes con sarcoma sinovial no metastásico (edad temprana, tumores resecados de <5 cm) a veces presentan desenlaces excelentes sin radioterapia; pero todavía no está claro si este abordaje elimina la ventaja de la radiación para el control local o regional.[262]
  • En un ensayo alemán se encontró un beneficio de la quimioterapia posoperatoria en niños con sarcoma sinovial.[263]
  • En un metanálisis también se indicó que la quimioterapia puede ofrecer beneficio.[243]
  • El COG notificó el análisis de un subgrupo de pacientes con sarcoma sinovial tratados en el ensayo ARST0332 (NCT00346164) . Este fue un ensayo prospectivo acerca del tratamiento de pacientes menores de 30 años con sarcomas de tejido blando no rabdomiosarcomatoso.[264] Se analizaron los desenlaces de 138 pacientes aptos.
    • En general, la resección R0 o R1 del tumor primario se alcanzó en 129 pacientes (93,5 %): 69 pacientes (53,5 %) al comienzo del estudio y 60 pacientes (46,5 %) después de la quimioterapia neoadyuvante. De estos pacientes, 104 (80,6 %) presentaron una resección R0: 55 pacientes (53%) al comienzo del estudio y 49 pacientes (47%) después de la quimioterapia neoadyuvante.
    • La respuesta fue evaluable en 55 pacientes de los 69 que recibieron quimioterapia neoadyuvante,. De ellos, 2 pacientes (3,6 %) presentaron respuesta completa, 9 pacientes (16,4 %) presentaron respuesta parcial, 41 pacientes (74,6 %) presentaron enfermedad estable y 3 pacientes (5,5 %) presentaron enfermedad progresiva. El tejido de 57 tumores fue sometido a revisión central después de la resección definitiva. Se encontró que 41 tumores (72 %) exhibían menos del 90 % de necrosis, y 16 tumores (28 %) exhibían el 90 % o más de necrosis.
    • En los 46 pacientes del grupo de riesgo bajo, la tasa de SSC a 5 años fue del 81,9 % (IC 95 %, 69–94,8 %) y la tasa de SG fue del 97,7 % (IC 95 %, 92,7–100 %).
    • En los 23 pacientes del grupo de riesgo intermedio (grupo de tratamiento C), la tasa de SSC a 5 años fue del 64 % (IC 95 %, 42,4–85,8%) y la tasa de SG fue del 89,5 % (IC 95 %, 75,3–100 %).
    • En los 49 pacientes del grupo de riesgo intermedio (grupo de tratamiento D), la tasa de SSC a 5 años fue del 71,2 % (IC 95 %, 56,5–85,9 %) y la tasa de SG fue del 86,5 % (IC 95 %, 75,6–97,3 %).
    • En los 21 pacientes del grupo de riesgo alto, la tasa de SSC a 5 años fue del 7,6 % (IC 95 %, 0–22%) y la tasa de SG fue del 12,5 % (IC 95 %, 0–28,7 %).
  • El EpSSG realizó un estudio prospectivo de pacientes menores de 21 años con sarcoma sinovial (CCLG-EPSSG-NRSTS-2005 [NCT00334854]).[265][Nivel de evidencia C1] Los pacientes se estratificaron en 1 de 3 grupos de riesgo y se asignaron sin aleatorización al tratamiento según el grupo de riesgo:
    • Los pacientes de riesgo bajo tenían tumores del grupo I del IRS que medían menos de 5 cm y tumores primarios no axiales.
    • Los pacientes de riesgo intermedio no tenían tumores primarios axiales, tenían tumores del grupo I del IRS que medían más de 5 cm o tumores del grupo II del IRS.
    • Los pacientes de riesgo alto fueron todos los pacientes con tumores en sitios axiales primarios (cabeza y cuello, pulmones y pleura, tronco, retroperitoneo), tumores del grupo III del IRS o tumores N1.

    Los desenlaces de los pacientes tratados en el ensayo CCLG-EPSSG-NRSTS-2005 se describen en el Cuadro 12.

    Cuadro 12. Supervivencia sin complicaciones y supervivencia general de pacientes con sarcoma sinovial de riesgo bajo, intermedio y alto tratados en el ensayo CCLG-EPSSG-NRSTS-2005
    Grupo de riesgoTratamientoSupervivencia sin complicaciones a 3 años (%)Supervivencia general a 3 años (%)
    IRS = Intergroup Rhabdomyosarcoma Study; RT = radioterapia.
    a Quimioterapia de ifosfamida y doxorrubicina, sin doxorrubicina durante la radioterapia.
    b 59,4 Gy en casos sin opción de una resección secundaria; 50,4 Gy como radioterapia preoperatoria; 50,4 Gy, 54 Gy y 59,4 Gy como radioterapia posoperatoria, en el caso de resecciones R0, R1 y R2, respectivamente (sin radioterapia adicional en el caso de resecciones completas secundarias con márgenes limpios en niños menores de 6 años).
    BajoCirugía sola92100
    IntermedioCirugía, 3–6 ciclos de quimioterapiaa, ± RTb91100
    Alto (grupo III del IRS)3 ciclos de quimioterapiaa, cirugía, 3 ciclos adicionales de quimioterapia, ± RTb7794
    Alto (sitios primarios axiales)Cirugía, 6 ciclos de quimioterapiaa, RTb78100

Sarcoma sinovial recidivante, sin otra indicación

La supervivencia tras una recidiva es precaria (30–40 % a 5 años). Los factores relacionados con el desenlace tras una recidiva son la duración de la primera remisión (> o ≤ 18 meses) y la ausencia de una segunda remisión.[266,267] En la experiencia alemana, la resección quirúrgica de la enfermedad metastásica fue el método más frecuente para alcanzar una remisión completa.[267] La quimioterapia de mantenimiento por vía oral con trofosfamida, idarrubicina y etopósido o con ciclofosfamida oral y vinblastina intravenosa se administró de forma individual.

La radioterapia (radioterapia corporal estereotáctica) se puede utilizar para tratar metástasis pulmonares específicas. Por lo habitual, se considera su uso después de por lo menos una resección para confirmar la presencia de enfermedad metastásica. En particular, la radioterapia es apropiada para pacientes con lesiones que comprometan el intercambio gaseoso por su localización adyacente a los bronquios o que causen dolor al invadir la pared torácica.[268]

Del 70 % al 80 % de los sarcomas sinoviales expresan NY-ESO-1, un antígeno testicular inmunógeno de cáncer.[269] Es posible usar transferencia adoptiva de células T modificadas para que expresen NY-ESO-1c259, un receptor de célula T (TCR) con alta afinidad para NY-ESO-1/LAGE1a, dirigida a NY-ESO-1.[270] El procedimiento para fabricar las células T genomanipuladas restringe su reactividad a un solo tipo de HLA. Todos los ensayos clínicos de este tipo de tecnología han usado HLA-A*02 como la diana inicial y restringen la inscripción a los pacientes cuyos tumores expresan NY-ESO-1 y HLA-A*02. En un ensayo multinstitucional, se confirmó la presencia de respuestas antitumorales en el 50 % de los pacientes (6 de 12) caracterizadas por achicamiento del tumor en el transcurso de varios meses. Se encontraron células NY-ESO-1c259T circulantes después de la infusión en todos los pacientes, y las células perduraron por lo menos 6 meses en todos los pacientes que respondieron a la infusión.[271]

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presenta un ejemplo de ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  • NCT03967223 (Master Protocol to Assess the Safety and Antitumor Activity of Genetically Engineered T Cells in NY-ESO-1 and/or LAGE-1a Positive Solid Tumors): en este ensayo se evalúa la inocuidad y la eficacia de las terapias de células T humanas modificadas en participantes con tumores avanzados.

Sarcoma epitelioide

El sarcoma epitelioide es un tumor mesenquimatoso raro con histogénesis incierta que exhibe diferenciación multilinaje.[272]

Cuadro clínico inicial

El sarcoma epitelioide suele presentarse como un nódulo firme de crecimiento lento en el tejido blando profundo. El tipo proximal afecta de manera predominante a adultos y compromete el esqueleto axial y sitios proximales. El tumor es muy maligno y tiene una predisposición a metástasis ganglionares.

Características moleculares

El sarcoma epitelioide se caracteriza por inactivación del gen SMARCB1, presente en los tipos convencional y proximal de este sarcoma.[273] Esta anomalía produce aumento de la dependencia de EZH2 y formación de tumores.[274]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del sarcoma epitelioide son las siguientes:

  1. Quimioterapia.
  2. Cirugía.
  3. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.

Se debe evaluar atentamente a los pacientes para identificar el compromiso ganglionar; se toma una biopsia de los ganglios linfáticos sospechosos. El tratamiento más eficaz es la resección quirúrgica de cualquier tumor primario o recidivante.[275][Nivel de evidencia C1] Debido a que esta enfermedad tiene una predisposición a presentar metástasis ganglionar oculta, se recomienda la biopsia de ganglio linfático centinela para el sarcoma epitelioide de extremidades o glúteos en ausencia de comprobación clínica (por imágenes o por examen físico) de ganglios linfáticos agrandados.[276]

En una revisión de 30 pacientes pediátricos con sarcoma epitelioide (mediana de edad en el cuadro clínico inicial, 12 años), se notificaron respuestas a la quimioterapia en el 40 % de los pacientes que recibieron regímenes propios del sarcoma. El 60 % de los pacientes estaban vivos al cabo de 5 años del diagnóstico inicial.[277] En una revisión retrospectiva de una sola institución con 20 pacientes, entre ellos niños y adultos (mediana de edad de 27,3 años), no se encontraron diferencias en la probabilidad de recidiva entre los pacientes que recibieron quimioterapia y aquellos que no la recibieron. Los autores indican que la radioterapia quizás sea útil.[275]

En un análisis retrospectivo del grupo alemán CWS de 67 niños, adolescentes y adultos jóvenes (mediana de edad 14 años) con sarcoma epitelioide, 53 pacientes tenían enfermedad localizada y 14 pacientes tenían enfermedad metastásica.[278][Nivel de evidencia C1] De 67 pacientes, se trató a 58 pacientes con resecciones primarias. De acuerdo con el examen microscópico, las resecciones se consideraron completas en 35 pacientes e incompletas en 12 pacientes; en el examen macroscópico las resecciones fueron incompletas en 20 pacientes. Se trató con quimioterapia a 49 pacientes y con radioterapia a 33 pacientes. Se logró la remisión completa en 45 de 53 pacientes (85 %) con enfermedad localizada. Se observaron recidivas en 27 pacientes después de una mediana de tiempo de 0,9 años (intervalo, 0,1–2,3 años). Los pacientes con enfermedad localizada tuvieron una tasa de SSC a 5 años del 35 % (IC 95 %, ±12 %) y una tasa de SG del 48 % (IC 95 % ±14 %). Los pacientes con enfermedad metastásica tuvieron una tasa de SSC a 5 años del 7 % (IC 95 %, ±14 %) y una tasa de SG del 9 % (IC 95 %, ±16 %). Los factores que se correlacionaron con un pronóstico favorable en los pacientes con enfermedad localizada fueron un tamaño tumoral pequeño, un grupo del IRS más bajo, menor grado de invasión tumoral, un estado negativo para el compromiso ganglionar y una resección completa según el análisis microscópico.

En un análisis retrospectivo se revisaron los ensayos clínicos prospectivos del COG y el EpSSG en los que participaron pacientes menores de 30 años con sarcoma epitelioide.[279][Nivel de evidencia B4] En el análisis, se identificó a 63 pacientes tratados entre julio de 2005 y noviembre de 2015. Los pacientes se estratificaron en 3 grupos de riesgo mediante una combinación de características clínicas y los tratamientos recibidos. Los pacientes de riesgo bajo (n = 34) se sometieron a cirugía con radioterapia o sin esta. Este grupo incluyó de modo predominante a pacientes con tumores no metastásicos con resección amplia o marginal que medían 5 cm o menos. El grupo de riesgo intermedio incluyó a pacientes (n = 16) con tumores no metastásicos de grado alto y tumores que medían más de 5 cm o irresecables. Los pacientes de riesgo alto (n = 13) tenían enfermedad ganglionar o metástasis a distancia, sin importar el grado o el tamaño del tumor. Se observaron respuestas parciales en 11 de 22 pacientes (50 %) que recibieron terapia neoadyuvante. Se presentaron casos de recidiva local (n = 10) y recidiva a distancia (n = 15). Las tasas estimadas de SG a 5 años fueron del 86,4 % en los pacientes de riesgo bajo, del 63,5 % en los pacientes de riesgo intermedio y del 0 % en los pacientes de riesgo alto. Los factores de predicción de una SSC más precaria en los pacientes sin metástasis fueron un compromiso ganglionar locorregional, un tumor invasor, un grado alto y un menor alcance de la resección.

En un ensayo de fase II de 62 adultos con sarcoma epitelioide en quienes se documentó por análisis inmunohistioquímico la pérdida de INI1 o las alteraciones bialélicas en SMARCB1 (gen codificador de INI1), el tazemetostat demostró actividad clínica. Se presentaron 9 de 62 respuestas parciales confirmadas, la tasa de respuesta objetiva fue del 15 % y la tasa de control de la enfermedad fue del 26 %. En enero de 2020, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) otorgó la aprobación acelerada al uso del tazemetostat en pacientes adultos y jóvenes de 16 años o más con sarcoma epitelioide metastásico o localmente avanzado que no cumplían los requisitos para una resección completa.[280]

Opciones de tratamiento en evaluación clínica para el sarcoma epitelioide

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presenta un ejemplo de ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  • PEPN2121 (NCT05286801) (Tiragolumab and Atezolizumab for the Treatment of Relapsed or Refractory SMARCB1- or SMARCA4-Deficient Tumors): en este estudio se evalúa la combinación de un anticuerpo dirigido a PD-L1 (atezolizumab) con un anticuerpo dirigido a TIGIT (tiragolumab) para pacientes que presentan tumores con deficiencia de SMARCB1 o SMARCA4. Los pacientes con sarcoma epitelioide quizás sean aptos para participar en este estudio.

Sarcoma alveolar de partes blandas

Los sarcomas alveolares de partes blandas representan el 1,4 % de los sarcomas de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

Cuadro clínico inicial

La mediana de edad de presentación es de 25 años en pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas. Este tumor surge de manera más frecuente en las extremidades, pero también puede aparecer en la región oral y maxilofacial.[281,282,283] El sarcoma alveolar de partes blandas en niños a veces se manifiesta con indicios de enfermedad metastásica.[284] Son infrecuentes las metástasis encefálicas y pulmonares tardías.[281]

En una serie de 61 pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas que se trataron en 4 ensayos consecutivos del CWS y del registro SoTiSaR, 46 pacientes presentaron enfermedad localizada y 15 pacientes presentaron indicios de metástasis en el momento del diagnóstico.[285] En 9 pacientes menores de 30 años con sarcoma alveolar de partes blandas tratados entre 1980 y 2014 en 4 instituciones importantes, la mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 17 años, y 64 % de los pacientes eran mujeres. El sitio más común de la enfermedad fue la extremidad inferior, y 26 pacientes tenían una translocación ASPSCR1::TFE3. La distribución según el grupo del IRS fue la siguiente: 19 pacientes con enfermedad IRS I, 7 pacientes con enfermedad IRS II, 5 pacientes con enfermedad IRS III y 38 pacientes con enfermedad IRS IV.[286]

Características moleculares

Este tumor de histogénesis incierta se caracteriza por una translocación cromosómica constante t(X;17)(p11.2;q25) en la que se fusiona el gen ASPSCR1 con el gen TFE3.[287,288]

Pronóstico

El sarcoma alveolar de partes blandas en niños a veces presenta una evolución poco activa.[284] Es posible que los pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas presenten una recidiva muchos años después de un largo periodo de remisión aparente.[285,289] Debido a que estos son tumores raros, todos los niños con sarcoma alveolar de partes blandas deben considerar la inscripción en ensayos clínicos prospectivos. Para obtener más información sobre ensayos clínicos en curso, consultar el portal de Internet del NCI.

En un estudio se notificó que en una serie de 19 pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas tratados la tasa de SG a 5 años fue del 80 %. La tasa de SG fue del 91 % en los pacientes con enfermedad localizada, del 100 % en los pacientes con tumores que miden 5 cm o menos y del 31 % en los pacientes con tumores que miden más de 5 cm.[290] En otra serie de 33 pacientes, la tasa de SG fue del 68 % a los 5 años del diagnóstico y del 53 % a los 10 años del diagnóstico. La supervivencia fue mejor para los pacientes con tumores más pequeños (≤5 cm) y los tumores sometidos a resección completa.[291][Nivel de evidencia C1]

En una revisión retrospectiva de niños y adultos jóvenes menores de 30 años (mediana de edad, 17 años; intervalo, 1,5–30 años) de 4 instituciones, se identificó a 69 pacientes tratados de manera primaria con cirugía entre 1980 y 2014.[286][Nivel de evidencia C1] La translocación ASPSCR1::TFE3 estaba presente en los 26 pacientes analizados. Hubo 19 pacientes con tumores del grupo I del IRS (28 %), 7 pacientes con tumores del grupo II del IRS (10 %), 5 pacientes con tumores del grupo III del IRS (7 %) y 38 pacientes con tumores del grupo IV del IRS (55 %). En los 31 pacientes con tumores localizados (grupos posquirúrgicos I, II y III del IRS), la tasa de SSC a 5 años fue del 80 % y la tasa de SG fue del 87 %. En los 38 pacientes con tumores metastásicos (grupo IV del IRS), la tasa de SSC a 5 años fue del 7 % y la tasa de SG fue del 61 %.

En los pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas, las metástasis son frecuentes y, a menudo, tienen una evolución poco activa y prolongada. En una serie de pacientes tratados en estudios consecutivos de Alemania, 15 de 61 pacientes (25 %) presentaron metástasis, por lo general de índole miliar. A pesar de la falta de respuesta a la quimioterapia, la tasa de SG a 5 años fue del 61 %, con una tasa de SSC del 20 %.[285]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del sarcoma alveolar de partes blandas son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.[26,27]
  3. Terapia dirigida (inhibidores de tirosina–cinasas).
  4. Inhibidores de puntos de control.[292]

El abordaje estándar de tratamiento es la resección completa de la lesión primaria.[290] Si la resección completa no es viable, se administra radioterapia. En un estudio realizado en China, se notificó sobre 18 pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas en la región oral y maxilofacial. Entre ellos, 15 pacientes eran menores de 30 años.[283][Nivel de evidencia C2] El tratamiento primario fue la resección quirúrgica con márgenes negativos. Todos los pacientes sobrevivieron y solo 1 paciente presentó una recidiva de enfermedad metastásica.

En una serie de pacientes tratados en estudios consecutivos de Alemania, la SSP para los pacientes sin metástasis en el momento de la presentación mejoró con la resección completa del tumor primario. La tasa de SSC a 5 años fue del 100 % en los pacientes con tumores resecados por completo en comparación con el 50 % de los pacientes con enfermedad residual microscópica o macroscópica.[285]

En una serie de 51 pacientes pediátricos de 0 a 21 años con sarcoma alveolar de partes blandas, se encontró una tasa de SG a 10 años del 78 % y una tasa de SSC de cerca del 63 %. En los pacientes con enfermedad localizada (n = 37) la tasa de SG a 10 años fue del 87 %. Los 14 pacientes con metástasis en el momento del diagnóstico presentaron una tasa de SG a 10 años del 44 %, en parte debido a la resección quirúrgica del tumor primario y de las metástasis pulmonares en algunos pacientes. Solo 3 de 18 pacientes (17 %) con enfermedad cuantificable presentaron una reacción favorable a la quimioterapia antisarcoma convencional, pero 2 de 4 pacientes tratados con sunitinib presentaron una respuesta parcial.[281][Nivel de evidencia C1]

Hay informes esporádicos de respuestas objetivas al tratamiento con interferón α y bevacizumab.[281,293,294]

En estudios de inhibidores de tirosina–cinasas se observó lo siguiente:

  • En un estudio retrospectivo pequeño con 9 pacientes adultos de sarcoma alveolar de partes blandas metastásico que recibieron sunitinib, se notificaron respuestas parciales en 5 pacientes y enfermedad estable en 2 pacientes.[295][Nivel de evidencia C3]
  • En otro estudio, 15 pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas se trataron con sunitinib y 6 pacientes presentaron respuestas parciales. La mediana de SSP fue de 19 meses y la mediana de SG fue de 56 meses. La tasa de SG a 5 años fue del 49 %.[296][Nivel de evidencia C1] Se trató a 5 pacientes con sunitinib durante más de 2 años.
  • En un ensayo de fase II de cediranib, un inhibidor de los 3 receptores del factor de crecimiento epidérmico vascular que se conocen, 15 de 43 pacientes adultos (35 %) con sarcoma alveolar de partes blandas metastásico presentaron respuestas parciales.[297][Nivel de evidencia C3] En un ensayo pediátrico de fase II de cediranib, al utilizar 70 % de la dosis máxima tolerada para adultos en pacientes menores de 16 años, 5 de 7 pacientes presentaron enfermedad estable durante 14 meses o más.[298][Nivel de evidencia B4]
  • Un grupo internacional realizó un ensayo aleatorizado controlado con placebo con enmascaramiento doble de fase II sobre cediranib en pacientes adolescentes y adultos con sarcoma alveolar de partes blandas.[299][Nivel de evidencia A1] La mediana del cambio porcentual en la suma de los diámetros de la lesión objetivo en la población evaluable fue de un -8,3 % (intervalo intercuartílico [IIC], -26,5 a 5,9) en los pacientes que recibieron cediranib, en comparación con un 13,4 % (IIC, 1,1–21,3) en los pacientes que recibieron el placebo (P unilateral = 0,0010). Los autores concluyeron que el cediranib es un fármaco activo en pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas.
  • En un ensayo sin anonimato en el que se evaluó la eficacia del pazopanib en 6 pacientes adultos, 1 paciente alcanzó una respuesta parcial y 5 pacientes tuvieron enfermedad estable.[300] En otro ensayo con 30 pacientes adultos que recibieron pazopanib, 1 paciente tuvo una respuesta completa, 7 pacientes tuvieron respuestas parciales y 17 pacientes presentaron enfermedad estable. La mediana de SSP fue de 13,6 meses.[301]
  • En un ensayo, los pacientes con sarcomas en estadio avanzado recibieron una combinación de axitinib (inhibidor del receptor tirosina–cinasa del factor de crecimiento endotelial vascular) y pembrolizumab (inhibidor del punto de control inmunitario de la proteína de muerte programada).[292] La tasa de SSP a 3 meses en 12 pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas fue del 73 %. De 11 pacientes con enfermedad evaluable, 6 pacientes exhibieron respuestas parciales con axitinib.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica para el sarcoma alveolar de partes blandas

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presenta un ejemplo de ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  • NCT03141684 (Atezolizumab in Treating Patients With Newly Diagnosed and Metastatic Alveolar Soft Part Sarcoma That Cannot Be Removed by Surgery): en este ensayo de fase II se estudia la eficacia del atezolizumab en el tratamiento de pacientes con sarcoma alveolar de partes blandas que no ha sido tratado, que se diseminó del lugar inicial a otras partes del cuerpo y que no se puede extirpar con cirugía. Es posible que la inmunoterapia con anticuerpos monoclonales como el atezolizumab, ayude al sistema inmunitario a combatir el cáncer y quizás interfiera con la multiplicación y la diseminación de las células tumorales. Los pacientes de 2 años o más son aptos para participar en este ensayo.

Sarcoma de células claras sin otra indicación

El sarcoma de células claras (que antes se llamaba de modo incorrecto melanoma maligno de partes blandas) es un sarcoma de tejido blando infrecuente que suele afectar los tejidos blandos profundos de las extremidades. También se llama sarcoma de células claras de tendones y aponeurosis. El tumor suele afectar a adolescentes y adultos jóvenes.

Los pacientes con tumores pequeños localizados con índice mitótico bajo y un grado histológico intermedio presentan los mejores desenlaces.[302]

Cuadro clínico inicial

El tumor afecta con más frecuencia la extremidad inferior, en especial, el pie, el talón y el tobillo.[303,304] Tiene una predisposición alta a la diseminación ganglionar, en especial las metástasis en los ganglios linfáticos regionales (12–43 %).[304,305] Es común que el tumor tenga una evolución clínica poco activa.

Características moleculares

El sarcoma de células claras de tejido blando se caracteriza por las fusiones EWSR1::ATF1 o EWSR1::CREB1.[306,307]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del sarcoma de células claras de tejido blando son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Cirugía antes de la radioterapia o después de esta.[26,27]
  3. Terapia dirigida.

En una serie de 28 pacientes pediátricos de los Soft Tissue Cooperative Studies en Italia y Alemania, la mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 14 años y la extremidad inferior fue el sitio primario más común (50 %). La cirugía, con radioterapia o sin esta, es el tratamiento de elección y ofrece la mejor probabilidad de cura. En esta serie, se curaron 12 de 13 pacientes con tumores resecados por completo. En los pacientes con estadio más avanzado de la enfermedad, el desenlace es precario y la quimioterapia casi nunca es eficaz.[308]; [309][Nivel de evidencia C2] En un estudio de la European Organization for Research and Treatment of Cancer, 26 pacientes con sarcoma de células claras y enfermedad metastásica en quienes se documentó la presencia de reordenamientos de EWSR1, recibieron crizotinib.[310] Un paciente tuvo una respuesta parcial y 17 enfermedad estable.

Crondrosarcoma mixoide extraesquelético

El condrosarcoma mixoide extraesquelético es un tipo relativamente infrecuente de sarcoma de tejido blando, representa solo el 2,3 % de todos los sarcomas de tejido blando.[311] Se ha notificado en niños y adolescentes.[312]

Características moleculares

El condrosarcoma mixoide extraesquelético es una neoplasia multinodular. Las células redondeadas se organizan en cordones y cadenas sobre un fondo mixoide de sulfato de condroitina. Se han identificado varias anomalías citogenéticas (consultar el Cuadro 2), la más frecuente es la fusión EWSR1::NR4A3.[313]

Pronóstico

Este tumor tradicionalmente se ha considerado de bajo potencial maligno.[314] Sin embargo, en informes de instituciones grandes se observó que el condrosarcoma mixoide extraesquelético exhibe un potencial maligno importante; en particular en pacientes sometidos a seguimiento prolongado.[315,316] Los pacientes tienden a presentar una evolución lenta prolongada. Se ha descrito bien el compromiso ganglionar. Además, se ha notificado recidiva local (57 %) y diseminación metastásica a los pulmones (26 %).[316]

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del condrosarcoma mixoide extraesquelético son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Radioterapia.

El control local intensivo y la resección de las metástasis produjo tasas de SG del 87 % a los 5 años y del 63 % a los 10 años. Los tumores fueron relativamente resistentes a la radioterapia.[315] No se ha establecido el beneficio terapéutico de la quimioterapia.

Hay posibles dianas genéticas para la acción de moléculas pequeñas, pero se deben estudiar en un ensayo clínico. En un estudio de adultos, 6 de 10 pacientes que recibieron sunitinib lograron respuestas parciales.[317]

Sarcoma de Ewing extraesquelético

Para obtener más información, consultar Tratamiento del sarcoma de Ewing y los sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas de hueso y tejido blando.

Tumor desmoplásico de células redondas pequeñas

El tumor desmoplásico de células redondas pequeñas es un sarcoma primitivo raro.

Cuadro clínico inicial

El tumor desmoplásico de células redondas pequeñas afecta con mayor frecuencia el peritoneo abdominal, la pelvis o el peritoneo del escroto, pero también se presenta en los riñones y otras vísceras macizas.[318,319,320,321,322] Con frecuencia se encuentran docenas o cientos de implantes intraperitoneales. El tumor predomina en hombres (85 %) y se puede diseminar a los pulmones y a otros sitios.[322,323]

En una serie grande de 65 pacientes en una sola institución, se compararon las TC (n = 54) y las TC combinadas con tomografías por emisión de positrones (TEP)-TC (n = 11). Las TEP-TC produjeron muy pocos resultados negativos falsos y permitieron la detección de sitios metastásicos que no se encontraron en las TC convencionales.[323]

Características moleculares

En estudios citogenéticos de estos tumores, se observó una translocación recurrente t(11;22)(p13;q12), que se ha caracterizado como una fusión de los genes WT1 y EWSR1.[321,324] La fusión EWSR1::WT1 permite confirmar el diagnóstico del tumor desmoplásico de células redondas pequeñas. La carga mutacional del tumor es en promedio baja para el tumor desmoplásico de células redondas pequeñas (<1 mutación por megabase), y es infrecuente la presencia de alteraciones génicas recurrentes diferentes a la fusión EWSR1::WT1.[325] Un porcentaje bajo de los casos (alrededor del 3 %) tienen mutaciones activadoras en FGFR4, y con igual frecuencia se observó la amplificación de FGFR4.[325,326] Se han observado mutaciones inactivadoras en TP53 y ARID1A en un porcentaje pequeño de los casos de tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas.[325,326]

Pronóstico

El pronóstico general del tumor desmoplásico de células redondas continúa siendo muy precario y la tasa de mortalidad notificada es del 90 %. Una resección de más del 90 % del tumor, en el momento de la presentación inicial o después de la quimioterapia preoperatoria a veces es un factor de pronóstico favorable para la SG.[327,328]; [329][Nivel de evidencia C1] La respuesta a la quimioterapia neoadyuvante y la resección completa (cercana al 100 %) se relaciona con una mejora en el desenlace.[322,330]

Tratamiento

No hay un abordaje estándar para el tratamiento del tumor desmoplásico de células redondas pequeñas.

Las opciones de tratamiento del tumor desmoplásico de células redondas pequeñas son las siguientes:

  1. Cirugía.
  2. Quimioterapia seguida de cirugía.
  3. Radioterapia.

Las resecciones quirúrgicas completas son infrecuentes y a menudo se realizan en centros muy especializados, pero son decisivas para mejorar la supervivencia. Las modalidades de tratamiento exitosas incluyen quimioterapia neoadyuvante de tipo Ewing, seguida de resección quirúrgica completa de los tumores intraabdominales extensos, seguida de radioterapia abdominal total. Con este tratamiento multimodal, es posible lograr una supervivencia a 5 años en el 30 % al 40 % de los pacientes.[318,319,327,331,332,333,334]

La adición de quimioterapia intraperitoneal hipertérmica (HIPEC) para completar la resección quirúrgica (cirugía citorreductora) es una técnica nueva que se utilizó por primera vez en niños durante un ensayo clínico de fase I realizado en 2006. La cirugía citorreductora y la HIPEC para el tratamiento de tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas forman parte de un abordaje multidisciplinario y solo se administran en centros muy especializados. Las cirugías suelen durar más de 12 horas y se deben tomar en cuenta aspectos técnicos de esta resección tumoral en particular. La HIPEC es un método de tratamiento local que quizás proporcione más control de la enfermedad intraabdominal microscópica. La teoría es que el calor y la quimioterapia que se introduce en la cavidad abdominal después de la resección quirúrgica (en el momento de la cirugía ) produce citotoxicidad sinérgica sobre las células microscópicas que quedan en el abdomen.[335]

En un estudio de fase II de una sola institución, se observó que la HIPEC es una adición prometedora de la resección quirúrgica completa. En el estudio se inscribieron 14 pacientes con tumor desmoplásico de células redondas pequeñas y 5 pacientes con otros sarcomas. Estos pacientes muy seleccionados tenían tumores confinados a la cavidad abdominal. Estos pacientes exhibieron una respuesta parcial a la quimioterapia neoadyuvante de tipo Ewing, se sometieron a resecciones quirúrgicas completas, recibieron HIPEC con cisplatino además de radioterapia adyuvante dirigida a todo el abdomen seguida de quimioterapia adyuvante. Con este abordaje estandarizado, los pacientes con tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas tuvieron una tasa de SG del 80 % a los 30 meses y del 40 % a los 50 meses. Los pacientes con tumores desmoplásico de células redondas pequeñas sin metástasis hepáticas no presentaron recidivas intraabdominales; sin embargo, el 87 % de los pacientes con metástasis hepáticas o enfermedad portal presentaron recidivas.[335]

En otras instituciones se ha utilizado este abordaje de cirugía citorreductora con HIPEC en los pacientes con tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas. En un estudio retrospectivo en varias instituciones de Francia, se trató a los pacientes con cirugía citorreductora e HIPEC. Se seleccionó a 22 pacientes con una mediana de edad en el momento del diagnóstico de 14,8 años (intervalo, 4,2–17,6 años). Entre estos, 7 pacientes tenían mesoteliomas peritoneales, 7 tenían tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas y 8 pacientes exhibían otros tipos histológicos. Se logró una resección macroscópica completa (CC-0, donde CC indica integridad de la citorreducción) en 16 casos (73 %). Se observó recaída en 16 pacientes (72 %) luego de una mediana de tiempo de 9,6 meses (intervalo, 1,4–86,4 años). Después de una mediana de tiempo de 5,3 meses (intervalo, 0,1–36,1 meses), 9 pacientes (41 %) murieron por enfermedad recidivante. No se lograron resecciones completas en los 7 pacientes con tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas.[336][Nivel de evidencia C1]

En otro estudio realizado en Francia, se analizó el uso de cirugía citorreductora con HIPEC para el tratamiento de pacientes con tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas con enfermedad limitada al abdomen. De los 107 pacientes con tumores desmoplásicos de células redondas pequeñas, 48 que no tenían metástasis extraperitoneales se sometieron a cirugía citorreductora. De 48 pacientes, 38 (79 %) recibieron quimioterapia pre o posoperatoria y 23 pacientes (48 %) recibieron radioterapia posoperatoria dirigida a toda la cavidad abdominopélvica. Se administró quimioterapia intraperitoneal a 11 pacientes (23 %); 2 pacientes recibieron quimioterapia intraperitoneal posoperatoria temprana (EPIC) y 9 pacientes recibieron HIPEC. Después de una mediana de seguimiento de 30 meses, la mediana de SG de toda la cohorte fue de 42 meses. La tasa de SG a 2 años fue del 72 % y la tasa de SG a 5 años fue del 19 %. La tasa de SSE a 2 años fue del 30 % y la tasa de SSE a 5 años fue del 12 %. La radioterapia dirigida a toda la cavidad abdominopélvica fue la única variable relacionada con supervivencia sin recidiva peritoneal y SSE después de la cirugía citorreductora. Se utilizaron 6 regímenes diferentes de quimioterapia en los 11 pacientes que recibieron quimioterapia intraperitoneal (HIPEC o EPIC). En el manuscrito, no se indica la supervivencia o el desenlace para este grupo. La repercusión de HIPEC o EPIC sobre la SG y la SSE no fue estadísticamente significativa pero, como no se utilizaron regímenes estandarizados en todos los pacientes, resulta difícil evaluar los resultados.[337]

En un estudio retrospectivo de una sola institución, se informó sobre 9 pacientes con tumor desmoplásico de células redondas pequeñas. La mayoría de los pacientes tenían enfermedad generalizada, incluso 4 pacientes con enfermedad extraabdominal y 5 pacientes con compromiso hepático. Estos 9 pacientes se sometieron a 10 tratamientos citorreductores con HIPEC. Además, 7 pacientes recibieron radioterapia y 3 pacientes un trasplante de células madre. La tasa de supervivencia sin recaída a 3 años fue del 13 %, y la tasa de SG fue del 55 %. El tratamiento a menudo se vinculó con hospitalizaciones prolongadas. Fue necesario administrar nutrición parenteral a largo plazo en 8 pacientes durante una mediana de 261 días. Otras complicaciones a largo plazo fueron gastroparesia (n = 1), obstrucción del intestino delgado (n = 3) y cistitis hemorrágica (n = 2).[338]

El Center for International Blood and Marrow Transplant Research analizó en su registro a pacientes con tumor desmoplásico de células redondas pequeñas que recibieron consolidación con dosis altas de quimioterapia y reconstitución de células madre autógenas.[339] Mientras que en este análisis de registro retrospectivo se indicó un beneficio de este abordaje, otros investigadores han dejado de usar este método debido al exceso de efectos tóxicos y la ausencia de eficacia.[327]

En un estudio de una sola institución, se notificó que 5 de 5 pacientes con tumor desmoplásico de células redondas pequeñas recidivante presentaron respuestas parciales al tratamiento con la combinación de vinorelbina, ciclofosfamida y temsirólimus.[340]

Tumor rabdoide sin otra indicación (extrarrenal)

Los tumores rabdoides malignos en niños con tumores renales se describieron por primera vez en 1981. Después estos tumores se identificaron en varios sitios extrarrenales. Estos tumores son infrecuentes y muy malignos, en especial en niños menores de 2 años. Para obtener más información, consultar la sección Tumores rabdoides de riñón en Tratamiento del tumor de Wilms y otros tumores renales infantiles.

Los tumores rabdoides extrarrenales (extracraneales) representan el 2 % de los sarcoma de tejido blando en pacientes menores de 20 años (consultar el Cuadro 1).

Características moleculares

La primera serie cuantiosa de 26 niños con tumor rabdoide maligno extrarrenal y extracraneal se creó a partir de pacientes inscritos en los Intergroup Rhabdomyosarcoma Studies I a III durante una revisión del material de patología. Solo 5 pacientes (19 %) estaban vivos y sin enfermedad.[341] Luego, se encontraron mutaciones germinales y adquiridas en el gen SMARCB1 en 29 tumores evaluados durante investigaciones con niños que presentaban tumores teratoides rabdoides atípicos en el encéfalo, así como otros con tumores rabdoides renales y extrarrenales.[342] Los tumores rabdoides a veces se relacionan con mutaciones germinales en el gen SMARCB1 que pueden heredarse de un progenitor que no parece estar afectado.[343] Esta observación se extendió a 32 tumores rabdoides malignos en todos los sitios en pacientes cuya mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 12 meses.[344]

Pronóstico

La edad temprana y la enfermedad metastásica en el momento de la presentación se relacionan con un pronóstico desfavorable en niños con tumores rabdoides extracraneales.

En un estudio en el que se utilizaron datos de la National Cancer Database se identificó a 202 pacientes (menores de 18 años) con tumores rabdoides malignos fuera del SNC.[345]

  • La tasa de SG a 1 año fue del 48,8 %, y la tasa de SG a 5 años fue del 35,9 %.
  • En el análisis multivariado se demostró que la edad menor a 1 año y la presencia de metástasis eran indicadores pronósticos negativos (P = 0,058).
  • En la cohorte de pacientes quirúrgicos (n = 143), se observó cierta relación entre la presencia de enfermedad residual y un desenlace más precario clínicamente significativo (cociente de riesgos instantáneos, 1,54; IC 95 %, 0,88–2,69; P = 0,13).

En un estudio de SEER se analizó un grupo de 229 pacientes con tumores rabdoides malignos en el riñón, el sistema nervioso central (SNC) y sitios extrarrenales. Los factores que tuvieron una repercusión favorable fueron la edad de los pacientes de 2 a 18 años, un tumor de extensión limitada y la administración de radioterapia en comparación con otros pacientes (P < 0,002 para cada comparación). El sitio del tumor primario no tuvo importancia pronóstica. La tasa de SG fue del 33 % a los 5 años.[346]

En un registro europeo de tumores rabdoides extracraneales, se identificaron 100 pacientes de 14 países entre 2009 y 2018.[347] La mitad de los pacientes eran menores de 1 año en el momento del diagnóstico. En 30 pacientes (30 %), el tumor se ubicó en los riñones. Se encontró un tumor rabdoide maligno extracraneal y extrarrenal en el 70 % de los pacientes (70 de 100), la mayoría de los sitios fueron en la región cervical, la región torácica y el hígado. En 9 pacientes se encontraron tumores sincrónicos. Se presentaron metástasis a distancia en el momento del diagnóstico en el 35 % de los pacientes (35 de 100). Se detectaron mutaciones germinales de SMARCB1 en un 21 % de los pacientes (17 de 81 evaluables). La tasa de SG a 5 años fue del 45,8 % (± 5,4 %) y la tasa de SSC fue del 35,2 % (± 5,1 %). En un modelo multivariante ajustado, los factores de predicción más significativos para un desenlace negativo fueron la presencia de una mutación germinal, metástasis y la ausencia de resección macroscópica total.

Tratamiento

Las opciones de tratamiento del tumor rabdoide extrarrenal (extracraneal) son las siguientes:[348,349,350][Nivel de evidencia C1]

  1. Resección quirúrgica siempre que sea posible.
  2. Régimen de quimioterapia que se usa para los sarcomas de tejido blando (pero no hay un régimen único que se acepte como el mejor en la actualidad).
  3. Radioterapia.

Se documentaron respuestas favorables al alisertib en 4 pacientes con tumores teratoides rabdoides atípicos del SNC.[351] Para obtener más información sobre los tumores teratoides rabdoides atípicos del SNC, consultar Tratamiento del tumor teratoide rabdoide atípico del sistema nervioso central infantil.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el NCI se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presentan ejemplos de ensayos clínicos nacionales o institucional en curso:

  • APEC1621 (NCT03155620) (Pediatric MATCH: Targeted Therapy Directed by Genetic Testing in Treating Pediatric Patients with Relapsed or Refractory Advanced Solid Tumors, Non-Hodgkin Lymphomas, or Histiocytic Disorders): en el NCI–Children's Oncology Group Pediatric Molecular Analysis for Therapeutic Choice (MATCH), que se conoce como Pediatric MATCH, se emparejarán fármacos de terapia dirigida con cambios moleculares específicos identificados en el tumor (resistente al tratamiento o recidivante) de un paciente. Los niños y adolescentes de 1 a 21 años son aptos para participar en este ensayo.

    Los pacientes que presentan tumores con variantes moleculares comprendidas en los grupos de tratamiento abiertos en este ensayo podrán inscribirse para recibir tratamiento en el Pediatric MATCH. Para obtener más información en inglés, consultar el portal de Internet del NCI y el portal de Internet ClinicalTrials

  • PEPN2121 (NCT05286801) (Tiragolumab and Atezolizumab for the Treatment of Relapsed or Refractory SMARCB1- or SMARCA4-Deficient Tumors): en este estudio se evalúa la combinación de un anticuerpo dirigido a PD-L1 (atezolizumab) con un anticuerpo dirigido a TIGIT (tiragolumab) para pacientes que presentan tumores con deficiencia de SMARCB1 o SMARCA4. Los pacientes con tumores rabdoides extrarrenales (extracraneales) quizás sean aptos para participar en este estudio.

Tumor perivascular epitelioide (PEComa) maligno

Factores de riesgo y características moleculares

Las neoplasias con diferenciación de células perivasculares epitelioides (PEComas) benignas son frecuentes en los pacientes con esclerosis tuberosa, un síndrome autosómico dominante que también predispone al cáncer de células renales y los tumores de encéfalo. La causa de la esclerosis tuberosa es la inactivación germinal de TSC1 (9q34) o TSC2 (16p13.3); en los PEComas esporádicos se encuentra inactivación somática de los mismos genes oncosupresores.[352] La inactivación de cualquiera de estos genes produce una estimulación de la vía de mTOR, lo que fundamenta el tratamiento con inhibidores de mTOR de los tumores curables no quirúrgicos que tienen una inactivación genética similar (linfangioleiomiomatosis y angiomiolipoma).[353,354] Una proporción baja de los PEComas tienen reordenamientos de TFE3 con fusiones que comprometen varios genes; entre ellos, SFPQ y RAD51B.[355]

Cuadro clínico inicial

Los PEComas se presentan en varios sitios infrecuentes: gastrointestinal, pulmonar, ginecológico y genitourinario. Los PEComas de tejido blando, visceral y ginecológico se observan con mayor frecuencia en mujeres de mediana edad y, por lo general, no se relacionan con el complejo de la esclerosis tuberosa.[356] La evolución de la enfermedad puede ser poco activa.

Pronóstico

La mayoría de los PEComas tiene un curso clínico benigno, pero se ha informado de comportamiento maligno predecible a partir del tamaño tumoral, el índice mitótico y la presencia de necrosis.[357]

Tratamiento

No se han definido las opciones de tratamiento. El tratamiento suele incluir cirugía y observación seguida de cirugía cuando el tumor es voluminoso.[358]

En tumores con indicios de activación de mTORC1 y pérdida de TSC1 o TSC2, como la linfangioleiomiomatosis y el angiomiolipoma,[353] se ha documentado bien la actividad clínica de los inhibidores de mTOR, como el sirólimus. En una serie pequeña de casos, 3 adultos con PEComas respondieron al sirólimus.[359]

En un ensayo de fase II, 34 pacientes con PEComas malignos metastásicos o localmente avanzados recibieron tratamiento con partículas de sirólimus unidas a proteínas para suspensión inyectable (unidas a albúmina) (nab-sirólimus). De los 31 pacientes aptos para el análisis de eficacia, 12 (39 %) tuvieron respuesta (1 respuesta completa y 11 respuestas parciales), 16 (52 %) presentaron enfermedad estable y 3 (10 %) enfermedad progresiva. Las respuestas fueron rápidas y duraderas. La mediana de duración de la respuesta no se alcanzó después de una mediana de seguimiento de 2,5 años. De 12 pacientes que respondieron al tratamiento, 7 aún continuaban con el tratamiento (intervalo, de 5,6 meses a más de 47,2 meses). Se realizó el perfil mutacional del tumor en 25 muestras. De 9 pacientes con mutaciones en TSC2, 8 respondieron al tratamiento, mientras que de 16 pacientes sin mutaciones en TSC2, 2 respondieron. Además, se observaron respuestas en 10 de 17 pacientes con expresión de fosfo-S6 (pS6). No se observó respuesta en 8 pacientes sin expresión de pS6. La ausencia de expresión de pS6 refleja la falta de activación de mTORC1.[360][Nivel de evidencia C1] En 2021, la FDA aprobó el nab-sirólimus para pacientes adultos con PEComas.

Sarcoma indiferenciado

Desde 1972 hasta 2006, los pacientes con sarcoma indiferenciado de tejido blando fueron aptos para participar en los ensayos de rabdomiosarcoma coordinados por el grupo IRS y el COG. La justificación fue que los pacientes con sarcoma indiferenciado de tejido blando y los pacientes con rabdomiosarcoma alveolar tienen sitios de enfermedad y desenlaces similares. En los ensayos terapéuticos de adultos con sarcoma de tejido blando se incluyen a pacientes con sarcoma indiferenciado de tejido blando y otros tipos histológicos, quienes reciben tratamientos semejantes, con ifosfamida y doxorrubicina y, en ocasiones, con otros fármacos quimioterapéuticos, cirugía y radioterapia.

En el ensayo del COG ARST0332 (NCT00346164), los pacientes con sarcoma indiferenciado de grado alto se trataron con un régimen a base de ifosfamida y doxorrubicina. En este ensayo, se notificaron a la vez los resultados de los pacientes con sarcoma indiferenciado de grado alto y de los pacientes con todos los sarcomas de tejido blando de grado alto. La tasa estimada de SSC a 5 años fue del 64 % y la tasa de SG fue del 77 % para los sarcomas clasificados como de grado alto por la Fédération Nationale des Centres de Lutte Contre le Cancer.[229][Nivel de evidencia C1]

En un informe de 32 pacientes con sarcomas indiferenciados de tejido blando inscritos en el ensayo ARST0332 (NCT00346164), la mediana de edad en el momento de la inscripción fue de 13,6 años y 2 tercios de los pacientes eran hombres. Los sitios primarios más frecuentes fueron la región paravertebral y las extremidades. De los pacientes, 5 presentaron enfermedad metastásica.[361]

  • La tasa de SSC a 5 años fue del 71 % y la tasa de SG fue del 83 %.
  • De los 9 niños con enfermedad de riesgo bajo (enfermedad localizada de grado bajo resecada o enfermedad localizada de grado alto <5 cm resecada con márgenes negativos) que se trataron solo con cirugía o radioterapia, la tasa de SSC a 5 años fue del 65 % y la tasa de SG fue del 100 %, lo que indica que los pacientes con enfermedad recidivante se pueden someter a terapia de rescate.
  • Los 23 pacientes restantes que tenían enfermedad de riesgo intermedio (tumor de grado alto >5 cm resecado, tumor de grado alto >5 cm sin resecar) o enfermedad de riesgo alto (metástasis a ganglios linfáticos o sitios lejanos) se trataron con quimiorradioterapia y se retrasó la cirugía cuando fue posible. La tasa de SSC a 5 años fue del 73 % y la SG estimada fue del 77 %.
  • Las alteraciones en el número de copias fueron frecuentes, por lo general con pérdida de 1p (25 %), ganancia de 1q (25 %), ganancia del cromosoma 8 (25 %) y ganancia del cromosoma 2 (16 %). Estas anomalías se observaron en su mayoría en pacientes con tumores de riesgo intermedio o riesgo alto, y hubo una relación clara entre la pérdida del cromosoma 1p o la ganancia del cromosoma 1q y desenlaces clínicos más precarios. La presencia simultánea de la ganancia de 1q y la pérdida de 1p se relacionó con un desenlace clínico muy desfavorable (tasas de SSC a 5 años y SG del 20 %). Con secuenciación de última generación, se identificaron fusiones oncogénicas en 8 de 10 muestras que incluyeron reordenamientos de BCOR y CIC, así como fusiones COL1A1::PDGFB, KIAA1549::BRAF y SAMD5::SASH1.

Sarcoma pleomórfico indiferenciado (histiocitoma fibroso maligno)

En un momento determinado, el histiocitoma fibroso maligno fue el tipo histológico más común en los adultos con sarcomas de tejido blando. Sin embargo, desde que se identificó en los primeros años de la década de 1960, ha persistido la controversia sobre el histiocitoma fibroso maligno en términos de su histogénesis y su validez como entidad clinicopatológica. La última clasificación de la OMS ya no incluye el histiocitoma fibroso maligno como una categoría diagnóstica diferenciada, sino como un subtipo de sarcoma pleomórfico indiferenciado.[11,362]

Esta entidad representa del 2 % al 6 % de todos los sarcomas de tejido blando en los niños.[363]

Características moleculares

En un análisis de 70 casos diagnosticados como histiocitosis fibrosa maligna (ningún tipo específico), histiocitoma fibroso maligno estoriforme o pleomórfico, sarcoma pleomórfico o sarcoma pleomórfico indiferenciado, se observó un cariotipo muy complejo sin anomalías recurrentes específicas.[364]

Los sarcomas indiferenciados con la amplificación 12q13–15, como MDM2 y CDK4, se clasifican mejor como liposarcomas desdiferenciados.[364] No se ha definido bien la relación entre este tumor y la familia de tumores indiferenciados o sin clasificar con características morfológicas de células fusiformes.

Factores de riesgo

Estos tumores pueden surgir en sitios previamente irradiados o como una neoplasia maligna secundaria en pacientes con retinoblastoma.[365]

Cuadro clínico inicial y tratamiento

Estos tumores suelen presentarse entre los 10 y 20 años. En una serie de 10 pacientes, la mediana de edad fue de 10 años y, por lo general, el tumor se localizó en las extremidades. En esta serie, todos los tumores eran localizados y 5 de 9 pacientes (a quienes se les dio seguimiento) estaban vivos y en primera remisión.[363] En otra serie de 17 pacientes pediátricos con histiocitoma fibroso maligno, la mediana de edad en el momento del diagnóstico fue de 5 años y se presentó compromiso de las extremidades en 8 casos.[366] Todos los pacientes con enfermedad metastásica murieron y 2 pacientes exhibieron una respuesta clínica al régimen de doxorrubicina.

Para obtener más información sobre el tratamiento del histiocitoma fibroso maligno óseo, consultar Tratamiento del osteosarcoma y el sarcoma pleomórfico indiferenciado óseo.

Tratamiento del sarcoma pleomórfico recidivante o resistente al tratamiento

La opción de tratamiento del sarcoma pleomórfico recidivante o resistente al tratamiento es la siguiente:

  1. Pembrolizumab.

La Sarcoma Alliance for Research through Collaboration dirigió un ensayo de fase II sobre el inhibidor del puntos de control pembrolizumab en pacientes de 18 años o más con sarcoma de tejido blando recidivante.[367][Nivel de evidencia C3] De 40 pacientes con sarcoma de tejido blando, 7 (18 %) presentaron una respuesta objetiva. De 10 pacientes con sarcoma pleomórfico indiferenciado, 4 (40 %) presentaron una respuesta objetiva, al igual que 2 (20 %) de 10 pacientes con liposarcoma y 1 (10 %) de 10 pacientes con sarcoma sinovial. Ninguno de los pacientes con leiomiosarcoma (n = 10) exhibió una respuesta objetiva.

Sarcoma de células redondas indiferenciado

Sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas con alteraciones genéticas enBCOR

Para obtener más información, consultar las secciones Sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas con alteraciones genéticas en BCOR y Características genómicas del sarcoma de Ewing en Tratamiento del sarcoma de Ewing y los sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas de hueso y tejido blando.

Sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas con alteraciones genéticas enCIC

Para obtener más información, consultar las secciones Sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas con alteraciones genéticas en CIC y Características genómicas del sarcoma de Ewing en Tratamiento del sarcoma de Ewing y los sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas de hueso y tejido blando.

Sarcomas indiferenciado de células redondas pequeñas con fusiones deEWSR1que no afectan a ETS

Para obtener más información, consultar la sección Sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas con fusiones de EWSR1 con genes que no pertenecen a la familia ETS en Tratamiento del sarcoma de Ewing y los sarcomas indiferenciados de células redondas pequeñas de hueso y tejido blando.

Tumores vasculares

Los tumores vasculares abarcan desde los hemangiomas, que siempre se consideran benignos, hasta los angiosarcomas, que son muy malignos.[368] Los tumores vasculares malignos incluyen los siguientes subtipos:

  • Hemangioendotelioma epitelioide sin otra indicación.
  • Angiosarcoma.

Hemangioendotelioma epitelioide sin otra indicación

Incidencia y desenlace

En 1982, Weiss y Enzinger describieron por primera vez el hemangioendotelioma epitelioide en el tejido blando. Estos tumores a veces se presentan en pacientes más jóvenes, pero la incidencia máxima se ubica en la cuarta y quinta décadas de vida. Los tumores pueden tener una evolución poco activa o de gran malignidad; la tasa de supervivencia general a 5 años es del 73 %. Hay informes de casos de pacientes con lesiones múltiples que no recibieron tratamiento y que presentaron una evolución muy benigna. Sin embargo, otros pacientes presentan una evolución muy maligna. Si bien algunos patólogos han tratado de estratificar a los pacientes para evaluar los riesgos y ajustar el tratamiento, se necesita llevar a cabo más investigación sobre este tema.[369,370,371,372,373,374,375]

En una serie de casos multiinstitucional se informó de 24 pacientes en edades de 2 a 26 años con hemangioendoteliomas epitelioides.[376][Nivel de evidencia C2] La mayoría de los pacientes presentaba enfermedad multiorgánica. Se observó progresión en el 63 % de los pacientes, con un tiempo medio transcurrido hasta la progresión de 18,4 meses (intervalo, 0–72 meses).

La presencia de efusiones, un tamaño tumoral mayor de 3 cm y un índice mitótico alto (>3 mitosis/50 campos de gran aumento) se han relacionado con desenlaces desfavorables.[371]

Cuadro clínico inicial y evaluación diagnóstica

Los sitios comunes de compromiso son los siguientes: solo el hígado (21 %), el hígado y los pulmones (18 %), solo pulmones (12 %) y solo los huesos (14 %).[371,377,378] El cuadro clínico inicial depende del sitio comprometido, como sigue:

  • Hígado: los nódulos hepáticos exhiben vascularización central en la ecografía, lesiones contrastadas en la tomografía computarizada, además de señal T1 baja y señal T2 moderada en las imágenes por resonancia magnética. Estos quizás sean hallazgos fortuitos en pacientes asintomáticos, pero la mayoría de los pacientes por lo general presentan signos y síntomas de colestasis, como prurito, ictericia o ictericia escleral.
  • Pulmón: el hemangioendotelioma epitelioide pulmonar a veces es un hallazgo asintomático en una radiografía de tórax o se relaciona con dolor pleural, hemoptisis, anemia y fibrosis.
  • Huesos: las metástasis óseas a veces se relacionan con una fractura patológica. En las radiografías, hay lesiones osteolíticas bien definidas, múltiples o solitarias.
  • Tejido blando: el 30 % de los casos con compromiso de tejido blando se vinculan con metástasis y, cuando están presentes, tienen una evolución muy maligna con escasa respuesta a la quimioterapia.
  • Piel: las lesiones cutáneas se presentan en forma sobresaliente y nodular, o en placas calientes de color marrón rojizo.

Características histopatológicas y moleculares

Se encontró la fusión génica WWTR1::CAMTA1 en la mayoría de los pacientes. Con menos frecuencia, se notificó la fusión génica YAP1::TFE3.[369] No es posible dirigir el efecto de los medicamentos actuales de forma específica a estas fusiones. Se ha descrito monoclonalidad en las lesiones hepáticas múltiples, lo que indicaría un proceso metastásico.

Desde el punto de vista histológico, estas lesiones se caracterizan como lesiones epitelioides dispuestas en nidos, hebras y trabéculas, con pocos espacios vasculares. Las características que quizá se relacionen con un comportamiento clínico muy maligno incluyen atipia celular, una o más mitosis por 10 campos de gran aumento, un incremento en la proporción de células fusiformes, necrosis focal y formación ósea metaplásica.[371]

El número de pacientes pediátricos notificados en la bibliografía es limitado.

Tratamiento del hemangioendotelioma epitelioide

Las opciones de tratamiento del hemangioendotelioma epitelioide son las siguientes:

  1. Observación.
  2. Cirugía.
  3. Inmunoterapia.
  4. Terapia dirigida.
  5. Quimioterapia.
  6. Radioterapia.

Para los casos de poca malignidad, se justifica la observación. La cirugía se realiza siempre que la resección sea posible. El trasplante de hígado se ha utilizado para lesiones hepáticas muy malignas, con metástasis o sin estas.[371,379,380,381]

Para los casos de gran malignidad se han usado fármacos múltiples, como interferón, talidomida, sorafenib, pazopanib y sirólimus.[379,382,383] Los casos de una malignidad aún mayor se tratan con quimioterapia del tipo que se usa para el angiosarcoma.

En una serie de casos multiinstitucional, se informó de 24 pacientes en edades de 2 a 26 años con hemangioendotelioma epitelioide.[376][Nivel de evidencia C2] Entre ellos, 3 pacientes que se trataron con sirólimus alcanzaron una enfermedad estable o una respuesta parcial por más de 2,5 años. Un informe de 2020 sobre el tratamiento con sirólimus en niños tuvo como objetivo aportar información a la experiencia previa con sirólimus en adultos. En una revisión retrospectiva, se identificaron 6 pacientes pediátricos con hemangioendotelioma epitelioide diseminado tratados con sirólimus. En 4 de los 6 pacientes, se observaron respuestas parciales o estabilización de la enfermedad.[384]

Los pacientes o familiares que deseen explorar otras terapias para la enfermedad deben contemplar la participación en ensayos con abordajes terapéuticos nuevos porque no hay fármacos estándar que hayan demostrado actividad clínica significativa.

Independientemente de si se decide continuar con una terapia dirigida a la enfermedad en el momento de la progresión, el objetivo principal del tratamiento sigue siendo el cuidado paliativo. Esto garantiza que se aumenta al máximo la calidad de vida mientras se intenta reducir el estrés de la enfermedad terminal.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica para el hemangioendotelioma epitelioide

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

Ensayos clínicos en curso

Realizar una búsqueda avanzada en inglés de los ensayos clínicos sobre cáncer auspiciados por el NCI que ahora aceptan pacientes. La búsqueda se puede simplificar por ubicación del ensayo, tipo de tratamiento, nombre del fármaco y otros criterios. También se dispone de información general sobre los ensayos clínicos.

Angiosarcoma

Incidencia y cuadro clínico inicial

El angiosarcoma es un tumor vascular raro (representa un 2 % de los sarcomas) y de gran malignidad que a veces se presenta en cualquier parte del cuerpo, pero es más común en los tejidos blandos. Se calcula que la incidencia del angiosarcoma es de 2 casos por millón de personas. En los Estados Unidos, cada año afecta a alrededor de 600 personas que suelen tener entre 60 y 70 años.[385]

Los angiosarcomas son muy infrecuentes en los niños. No está claro si la fisiopatología de los angiosarcomas en niños es diferente a la de los angiosarcomas en adultos. Se notificaron casos en recién nacidos y lactantes mayores que presentaron al inicio lesiones cutáneas y hepáticas múltiples, algunas de las cuales expresan GLUT1.[386,387,388,389] La mayoría de los angiosarcomas comprometen la piel y el tejido blando superficial, aunque también afectan el hígado, el bazo y el pulmón; con poca frecuencia afectan el hueso.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo establecidos incluyen los siguientes:[390]

  • Exposición al cloruro de vinilo.
  • Exposición a la radiación.
  • Linfedema crónico por cualquier causa, incluso el síndrome de Stewart-Treves.

Características histopatológicas y moleculares

Los angiosarcomas son tumores mayormente aneuploides. Los escasos casos de angiosarcoma que surgen de lesiones benignas, como los hemangiomas, siguen una vía distintiva que se necesita investigar. En el angiosarcoma inducido por radiación, se observa amplificación de MYC. Las mutaciones KDR::VEGFR2 y las amplificaciones de FLT4::VEGFR3 se han observado con una frecuencia de menos del 50 %.[390]

Es posible que el diagnóstico histopatológico sea muy difícil porque a veces hay áreas de atipia variada. Una característica común del angiosarcoma es una red irregular de canales en un modelo de disección a lo largo de haces de colágeno dérmico. Hay variación de forma celular, tamaño celular, mitosis, múltiples capas de endotelio y formación papilar. También puede haber células epitelioides. La necrosis y la hemorragia son comunes. Los tumores se tiñen para analizar el factor VIII, el CD31 y el CD34. Algunas lesiones hepáticas se parecen a los hemangiomas infantiles y tienen expresión focal de GLUT1. La nomenclatura de estas lesiones hepáticas ha sido difícil y confusa con el uso de la terminología antigua que se propuso en 1971 (por ejemplo, hemangioendotelioma tipo I: hemangioma infantil; hemangioendotelioma tipo II: angiosarcoma de grado bajo; hemangioendotelioma de tipo III: angiosarcoma de grado alto).[387]

Tratamiento del angiosarcoma

Las opciones de tratamiento del angiosarcoma son las siguientes:

  1. Cirugía (enfermedad localizada).
  2. Radioterapia (enfermedad cutánea localizada en adultos).
  3. Cirugía, quimioterapia y radioterapia (enfermedad metastásica).

Es posible curar la enfermedad localizada mediante cirugía radical. La resección quirúrgica completa parece ser fundamental para la supervivencia a largo plazo de pacientes con angiosarcomas y linfangiosarcomas, pese a las pruebas de que el tumor se encoge en algunos pacientes tratados con terapia local o sistémica.[388,391,392,393] En una revisión de 222 pacientes (mediana de edad de 62 años; intervalo de 15–90 años), se observó una tasa de supervivencia general específica para la enfermedad (SEE) del 38 % a los 5 años. La tasa de SEE a 5 años fue del 44 % en 138 pacientes con tumores localizados resecados, pero solo del 16 % en 43 pacientes con metástasis en el momento del diagnóstico.[393] Hay poca información sobre el uso del trasplante de hígado para los angiosarcomas localizados.[394][Nivel de evidencia C1] Sin embargo, en un informe de casos, se indicó que el trasplante de hígado tal vez contribuya a prolongar la supervivencia sin enfermedad.[395][Nivel de evidencia C2]

Es posible tratar la enfermedad localizada con radioterapia, en especial los angiosarcomas cutáneos. La mayoría de los casos notificados son de adultos.[396]

El tratamiento multimodal con cirugía, quimioterapia sistémica y radioterapia se utiliza para la enfermedad metastásica, a pesar de que rara vez es curativo.[397,398] El objetivo del tratamiento en pacientes con angiosarcomas metastásicos es el control de la enfermedad. La supervivencia sin progresión publicada es entre 3 y 7 meses [399] y la mediana de supervivencia general (SG) es de 14 a 18 meses.[400] En adultos y niños, las tasas de SG a 5 años son del 20 % al 35 %.[388,389,401]

Un niño con diagnóstico de angiosarcoma secundario a una transformación maligna de un hemangioma infantil, respondió al tratamiento con bevacizumab (anticuerpo monoclonal contra el factor de crecimiento endotelial vascular) combinado con quimioterapia sistémica.[386,397] En un informe de 8 casos de angiosarcomas de hígado en niños, se resaltó el uso indebido del término hemangioendotelioma así como la importancia del diagnóstico y tratamiento tempranos de estos tumores.[402]

Los inhibidores biológicos de la angiogénesis han mostrado actividad en adultos con angiosarcomas.[387,401]

Se notificó el caso de 1 paciente pediátrico con angiosarcoma cardiaco metastásico que recibió tratamiento exitoso con quimioterapia convencional, radiación, cirugía y terapias dirigidas, incluso pazopanib.[403]

Los pacientes o familiares que deseen explorar otras terapias para la enfermedad deben contemplar la participación en ensayos con abordajes terapéuticos nuevos porque no hay fármacos estándar que hayan demostrado actividad clínica significativa.

Independientemente de si se decide continuar con una terapia dirigida a la enfermedad en el momento de la progresión, el objetivo principal del tratamiento siguen siendo los cuidados paliativos. Esto garantiza que se aumenta al máximo la calidad de vida mientras se intenta reducir el estrés de la enfermedad terminal.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica para el angiosarcoma

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación se presenta un ejemplo de ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  1. NCT02834013 (Nivolumab and Ipilimumab in Treating Patients With Rare Tumors): este es un estudio de fase II de nivolumab e ipilimumab para el tratamiento de pacientes con tumores poco frecuentes. Es posible que la inmunoterapia con anticuerpos monoclonales como nivolumab e ipilimumab ayude al sistema inmunitario a combatir el cáncer e interfiera en la multiplicación y la diseminación de las células tumorales. Este estudio es para pacientes de 18 años o más.

Ensayos clínicos en curso

Realizar una búsqueda avanzada en inglés de los ensayos clínicos sobre cáncer auspiciados por el NCI que ahora aceptan pacientes. La búsqueda se puede simplificar por ubicación del ensayo, tipo de tratamiento, nombre del fármaco y otros criterios. También se dispone de información general sobre los ensayos clínicos.

Ensayos clínicos en curso

Realizar una búsqueda avanzada en inglés de los ensayos clínicos sobre cáncer auspiciados por el NCI que ahora aceptan pacientes. La búsqueda se puede simplificar por ubicación del ensayo, tipo de tratamiento, nombre del fármaco y otros criterios. También se dispone de información general sobre los ensayos clínicos.

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  399. North PE, Waner M, Mizeracki A, et al.: A unique microvascular phenotype shared by juvenile hemangiomas and human placenta. Arch Dermatol 137 (5): 559-70, 2001.
  400. Boye E, Yu Y, Paranya G, et al.: Clonality and altered behavior of endothelial cells from hemangiomas. J Clin Invest 107 (6): 745-52, 2001.
  401. Ravi V, Patel S: Vascular sarcomas. Curr Oncol Rep 15 (4): 347-55, 2013.
  402. Grassia KL, Peterman CM, Iacobas I, et al.: Clinical case series of pediatric hepatic angiosarcoma. Pediatr Blood Cancer 64 (11): , 2017.
  403. Koo J, Knight-Perry J, Galambos C, et al.: Pediatric Metastatic Cardiac Angiosarcoma Successfully Treated With Multimodal Therapy: Case Report and Review of Literature. J Pediatr Hematol Oncol 43 (2): e203-e206, 2021.

Tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil metastásico

Las opciones de tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil metastásico son las siguientes:

  1. Tratamiento multimodal con quimioterapia, radioterapia y resección quirúrgica de las metástasis pulmonares.

Para obtener información sobre las opciones de tratamiento, consultar las secciones sobre cada tipo de tumor en este resumen.

El pronóstico de los niños con sarcomas de tejido blando metastásico es precario.[1,2,3,4,5,6] Estos niños deben recibir tratamiento combinado con quimioterapia, radioterapia y resección quirúrgica de las metástasis pulmonares. En un ensayo prospectivo aleatorizado, la quimioterapia con vincristina, dactinomicina, doxorrubicina y ciclofosfamida, con dacarbazina o sin esta, produjo respuestas favorables de los tumores en un tercio de los pacientes con enfermedad irresecable o metastásica. Sin embargo, la tasa estimada de supervivencia a 4 años fue precaria y menos de un tercio de los niños sobrevivió.[6,7,8] En un ensayo prospectivo de niños con sarcoma de tejido blando metastásico, los pacientes se asignaron al azar a recibir quimioterapia multifarmacológica con adición de bevacizumab o sin este.[9] No hubo diferencia en las tasas de supervivencia sin complicaciones o de supervivencia general entre los dos grupos del estudio.

Metástasis pulmonares

En general, se debe considerar el uso de un procedimiento quirúrgico con resección de toda la enfermedad macroscópica, en niños con metástasis pulmonares aisladas.[10] En los pacientes con metástasis pulmonares múltiples o recidivantes, es posible realizar procedimientos quirúrgicos adicionales si se considera que la morbilidad es aceptable. En una revisión retrospectiva, los pacientes con sarcoma sinovial y metástasis pulmonares sometidos a resección completa de todas las metástasis pulmonares presentaron una supervivencia superior a la de aquellos con resecciones incompletas.[10][Nivel de evidencia C1] La segmentectomía formal, la lobectomía y la disección ganglionar mediastínica son innecesarias.[11]

Un abordaje alternativo es la radioterapia enfocada (radioterapia estereotáctica fraccionada), que se usó de forma exitosa para controlar lesiones en adultos. La tasa estimada de supervivencia a 5 años después de una toracotomía con metastasectomía pulmonar osciló entre el 10 % y el 58 % en los estudios de adultos.[12]

Referencias:

  1. Demetri GD, Elias AD: Results of single-agent and combination chemotherapy for advanced soft tissue sarcomas. Implications for decision making in the clinic. Hematol Oncol Clin North Am 9 (4): 765-85, 1995.
  2. Elias A, Ryan L, Sulkes A, et al.: Response to mesna, doxorubicin, ifosfamide, and dacarbazine in 108 patients with metastatic or unresectable sarcoma and no prior chemotherapy. J Clin Oncol 7 (9): 1208-16, 1989.
  3. Edmonson JH, Ryan LM, Blum RH, et al.: Randomized comparison of doxorubicin alone versus ifosfamide plus doxorubicin or mitomycin, doxorubicin, and cisplatin against advanced soft tissue sarcomas. J Clin Oncol 11 (7): 1269-75, 1993.
  4. Rao BN: Nonrhabdomyosarcoma in children: prognostic factors influencing survival. Semin Surg Oncol 9 (6): 524-31, 1993 Nov-Dec.
  5. deCou JM, Rao BN, Parham DM, et al.: Malignant peripheral nerve sheath tumors: the St. Jude Children's Research Hospital experience. Ann Surg Oncol 2 (6): 524-9, 1995.
  6. Pappo AS, Rao BN, Jenkins JJ, et al.: Metastatic nonrhabdomyosarcomatous soft-tissue sarcomas in children and adolescents: the St. Jude Children's Research Hospital experience. Med Pediatr Oncol 33 (2): 76-82, 1999.
  7. Pratt CB, Pappo AS, Gieser P, et al.: Role of adjuvant chemotherapy in the treatment of surgically resected pediatric nonrhabdomyosarcomatous soft tissue sarcomas: A Pediatric Oncology Group Study. J Clin Oncol 17 (4): 1219, 1999.
  8. Pratt CB, Maurer HM, Gieser P, et al.: Treatment of unresectable or metastatic pediatric soft tissue sarcomas with surgery, irradiation, and chemotherapy: a Pediatric Oncology Group study. Med Pediatr Oncol 30 (4): 201-9, 1998.
  9. Ferrari A, Merks JHM, Chisholm JC, et al.: Outcomes of metastatic non-rhabdomyosarcoma soft tissue sarcomas (NRSTS) treated within the BERNIE study: a randomised, phase II study evaluating the addition of bevacizumab to chemotherapy. Eur J Cancer 130: 72-80, 2020.
  10. Stanelle EJ, Christison-Lagay ER, Wolden SL, et al.: Pulmonary metastasectomy in pediatric/adolescent patients with synovial sarcoma: an institutional review. J Pediatr Surg 48 (4): 757-63, 2013.
  11. Putnam JB, Roth JA: Surgical treatment for pulmonary metastases from sarcoma. Hematol Oncol Clin North Am 9 (4): 869-87, 1995.
  12. Dhakal S, Corbin KS, Milano MT, et al.: Stereotactic body radiotherapy for pulmonary metastases from soft-tissue sarcomas: excellent local lesion control and improved patient survival. Int J Radiat Oncol Biol Phys 82 (2): 940-5, 2012.

Tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil progresivo o recidivante

Con la posible excepción de los lactantes con fibrosarcoma infantil, el pronóstico de los pacientes con enfermedad progresiva o recidivante es precario. No hay ensayos prospectivos en los que se demuestre que la mejora del control local de los sarcomas de tejido blando en los niños mejorará la supervivencia. Por consiguiente, el tratamiento se debe individualizar según el sitio de recidiva, las características biológicas del tumor (por ejemplo, grado, invasión y tamaño), tratamientos previos y consideraciones específicas del paciente. Todos los pacientes con tumores recidivantes deberán considerar la opción de participar en ensayos clínicos.

Las opciones de tratamiento de la enfermedad progresiva o recidivante son las siguientes:

  1. Cirugía.
    1. Resección quirúrgica de una recidiva local.
      • En una revisión italiana de 73 pacientes con tumores malignos de vaina del nervio periférico, se encontró que la mayoría de las recaídas fueron locales. El análisis multivariante mostró que los factores vinculados a una mejor supervivencia fueron ausencia de invasión tumoral en el momento del diagnóstico inicial (T1), recidiva más de 12 meses después del diagnóstico inicial y logro de una segunda respuesta completa con resección quirúrgica de las recidivas. Solo el 15,8 % de los pacientes sometidos a resecciones quirúrgicas completas de las recidivas locales estaban vivos a los 5 años.[1][Nivel de evidencia C1]
    2. Resección quirúrgica de una recidiva pulmonar aislada.
      • En algunos pacientes, es posible que la metastasectomía pulmonar logre un control prolongado de la enfermedad.[2] En un análisis retrospectivo grande de pacientes con sarcoma de tejido blando recidivante, se observó que la recidiva local aislada tiene un pronóstico más favorable y que la resección de las metástasis pulmonares mejora la probabilidad de supervivencia.[3] En 31 niños y adolescentes menores de 23 años con metástasis pulmonares de sarcoma sinovial, la resección completa de las metástasis pulmonares prolongó la supervivencia en comparación con otros 10 pacientes que no eran aptos para una metastasectomía.[4][Nivel de evidencia C1]
    3. Resección quirúrgica de la recidiva local seguida de radioterapia o braquiterapia (si no se administró antes radioterapia).
    4. Amputación de extremidad (solo para algunos niños con sarcomas de extremidades que recibieron antes radioterapia).
  2. Quimioterapia.
    • Gemcitabina y docetaxel.[5]
    • Trabectedina.[6,7,8]
    • Participación en un ensayo clínico de nuevos regímenes quimioterapéuticos.
  3. Inhibidores de tirosina–cinasas.
    • Pazopanib. En un ensayo de fase I de pazopanib, se notificó una respuesta parcial en 1 paciente con tumor desmoplásico de células redondas pequeñas y se notificó una estabilización prolongada de la enfermedad en 8 pacientes con sarcoma recidivante.[9][Nivel de evidencia B4]

      Se aprobó el uso de pazopanib en el tratamiento de pacientes con sarcoma de tejido blando recidivante. El ensayo clínico que llevó a la aprobación se limitó a pacientes adultos. En el estudio se observó estabilización de la enfermedad y aumento del tiempo transcurrido hasta la progresión; pero no se demostró mejora de la supervivencia general.[10]

      Un niño de 13 años y una niña de 14 años con sarcoma sinovial multirrecidivante y metástasis pulmonares respondieron al pazopanib durante 14 y 15 meses, respectivamente.[11][Nivel de evidencia C2]

  4. Inhibidores de punto de control inmunitario.
    • Pembrolizumab. La Sarcoma Alliance for Research through Collaboration dirigió un ensayo de fase II sobre el inhibidor de puntos de control pembrolizumab en pacientes de 18 años o más con sarcoma de tejido blando recidivante.[12][Nivel de evidencia C3] De 40 pacientes con sarcoma de tejido blando, 7 (18 %) presentaron una respuesta objetiva. De 10 pacientes con sarcoma pleomórfico indiferenciado, 4 (40 %) presentaron una respuesta objetiva, al igual que 2 (20 %) de 10 pacientes con liposarcoma y 1 (10 %) de 10 pacientes con sarcoma sinovial. Ninguno de los pacientes con leiomiosarcoma (n = 10) exhibió una respuesta objetiva.
  5. Radioterapia.
    • La radioterapia dirigida (radioterapia estereotáctica) es una alternativa para los sitios de metástasis; en particular, el pulmón.[13] La radioterapia dirigida también es una opción para el control local de los sitios de metástasis, como los pulmones, los huesos y el encéfalo,[14,15] en especial, para los pacientes en quienes la morbilidad por la resección es un motivo de preocupación o en quienes tienen una esperanza de vida limitada.[13]

La resección es el tratamiento estándar de los sarcomas de tejido blando infantil no rabdomiosarcomatosos recidivantes. Si el paciente aún no ha recibido radioterapia, se debe considerar el uso de radiación posoperatoria tras la resección local del tumor recidivante. En adultos se ha evaluado el tratamiento con procedimientos para conservar una de las extremidades acompañados de braquiterapia posoperatoria, pero no se ha estudiado de forma extensa en niños. La amputación quizás sea la única opción terapéutica para algunos niños con sarcoma de extremidad que recibieron radioterapia antes.

En los resultados publicados de 2 estudios se abordan los desenlaces de niños con sarcoma sinovial recidivante. La mayoría de los pacientes de uno de los estudios presentaron recaída a distancia (29 de 44 pacientes),[16] mientras que la mayoría de los pacientes del otro estudio presentaron recaída local (27 de 37 pacientes).[17] La recidiva a distancia resultó ser una variable de pronóstico precario, mientras que la resecabilidad del tumor en el momento de la recidiva (según se manifestó por recidiva en una extremidad) se relacionó con desenlaces más favorables en ambos estudios.

Opciones de tratamiento en evaluación clínica

La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) se encuentra en el portal de Internet del NCI. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consultar el portal de Internet ClinicalTrials.gov.

A continuación, se presenta un ejemplo de ensayo clínico nacional o institucional en curso:

  • APEC1621 (NCT03155620) (Pediatric MATCH: Targeted Therapy Directed by Genetic Testing in Treating Pediatric Patients with Relapsed or Refractory Advanced Solid Tumors, Non-Hodgkin Lymphomas, or Histiocytic Disorders): en el NCI–Children's Oncology Group Pediatric Molecular Analysis for Therapeutic Choice (MATCH), que se conoce como Pediatric MATCH, se emparejarán fármacos de terapia dirigida con cambios moleculares específicos identificados en el tumor (resistente al tratamiento o recidivante) de un paciente. Los niños y adolescentes de 1 a 21 años son aptos para participar en este ensayo.

    Los pacientes que presentan tumores con variantes moleculares comprendidas en los grupos de tratamiento abiertos en este ensayo podrán inscribirse para recibir tratamiento en el Pediatric MATCH. Para obtener más información en inglés, consultar el portal de Internet del NCI y el portal de Internet ClinicalTrials.

Ensayos clínicos en curso

Realizar una búsqueda avanzada en inglés de los ensayos clínicos sobre cáncer auspiciados por el NCI que ahora aceptan pacientes. La búsqueda se puede simplificar por ubicación del ensayo, tipo de tratamiento, nombre del fármaco y otros criterios. También se dispone de información general sobre los ensayos clínicos.

Referencias:

  1. Bergamaschi L, Bisogno G, Manzitti C, et al.: Salvage rates and prognostic factors after relapse in children and adolescents with malignant peripheral nerve sheath tumors. Pediatr Blood Cancer 65 (2): , 2018.
  2. Belal A, Salah E, Hajjar W, et al.: Pulmonary metastatectomy for soft tissue sarcomas: is it valuable? J Cardiovasc Surg (Torino) 42 (6): 835-40, 2001.
  3. Zagars GK, Ballo MT, Pisters PW, et al.: Prognostic factors for disease-specific survival after first relapse of soft-tissue sarcoma: analysis of 402 patients with disease relapse after initial conservative surgery and radiotherapy. Int J Radiat Oncol Biol Phys 57 (3): 739-47, 2003.
  4. Stanelle EJ, Christison-Lagay ER, Wolden SL, et al.: Pulmonary metastasectomy in pediatric/adolescent patients with synovial sarcoma: an institutional review. J Pediatr Surg 48 (4): 757-63, 2013.
  5. Maki RG, Wathen JK, Patel SR, et al.: Randomized phase II study of gemcitabine and docetaxel compared with gemcitabine alone in patients with metastatic soft tissue sarcomas: results of sarcoma alliance for research through collaboration study 002 [corrected]. J Clin Oncol 25 (19): 2755-63, 2007.
  6. Le Cesne A, Cresta S, Maki RG, et al.: A retrospective analysis of antitumour activity with trabectedin in translocation-related sarcomas. Eur J Cancer 48 (16): 3036-44, 2012.
  7. Garcia-Carbonero R, Supko JG, Maki RG, et al.: Ecteinascidin-743 (ET-743) for chemotherapy-naive patients with advanced soft tissue sarcomas: multicenter phase II and pharmacokinetic study. J Clin Oncol 23 (24): 5484-92, 2005.
  8. Garcia-Carbonero R, Supko JG, Manola J, et al.: Phase II and pharmacokinetic study of ecteinascidin 743 in patients with progressive sarcomas of soft tissues refractory to chemotherapy. J Clin Oncol 22 (8): 1480-90, 2004.
  9. Glade Bender JL, Lee A, Reid JM, et al.: Phase I pharmacokinetic and pharmacodynamic study of pazopanib in children with soft tissue sarcoma and other refractory solid tumors: a children's oncology group phase I consortium report. J Clin Oncol 31 (24): 3034-43, 2013.
  10. van der Graaf WT, Blay JY, Chawla SP, et al.: Pazopanib for metastatic soft-tissue sarcoma (PALETTE): a randomised, double-blind, placebo-controlled phase 3 trial. Lancet 379 (9829): 1879-86, 2012.
  11. Casanova M, Basso E, Magni C, et al.: Response to pazopanib in two pediatric patients with pretreated relapsing synovial sarcoma. Tumori 103 (1): e1-e3, 2017.
  12. Tawbi HA, Burgess M, Bolejack V, et al.: Pembrolizumab in advanced soft-tissue sarcoma and bone sarcoma (SARC028): a multicentre, two-cohort, single-arm, open-label, phase 2 trial. Lancet Oncol 18 (11): 1493-1501, 2017.
  13. Dhakal S, Corbin KS, Milano MT, et al.: Stereotactic body radiotherapy for pulmonary metastases from soft-tissue sarcomas: excellent local lesion control and improved patient survival. Int J Radiat Oncol Biol Phys 82 (2): 940-5, 2012.
  14. Howard TP, Boyle PJ, Marcus KJ, et al.: Clinical outcomes for pediatric patients receiving radiotherapy for solid tumor central nervous system metastases. Pediatr Blood Cancer 68 (12): e29331, 2021.
  15. Cameron AL, Elze MC, Casanova M, et al.: The Impact of Radiation Therapy in Children and Adolescents With Metastatic Rhabdomyosarcoma. Int J Radiat Oncol Biol Phys 111 (4): 968-978, 2021.
  16. Ferrari A, De Salvo GL, Dall'Igna P, et al.: Salvage rates and prognostic factors after relapse in children and adolescents with initially localised synovial sarcoma. Eur J Cancer 48 (18): 3448-55, 2012.
  17. Soole F, Maupain C, Defachelles AS, et al.: Synovial sarcoma relapses in children and adolescents: prognostic factors, treatment, and outcome. Pediatr Blood Cancer 61 (8): 1387-93, 2014.

Actualizaciones más recientes a este resumen (10 / 13 / 2023)

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  • Denise Adams, MD (Children's Hospital Boston)
  • Louis S. Constine, MD (James P. Wilmot Cancer Center at University of Rochester Medical Center)
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  • Andrea A. Hayes-Dixon, MD, FACS, FAAP (Howard University)
  • William H. Meyer, MD
  • Paul A. Meyers, MD (Memorial Sloan-Kettering Cancer Center)
  • Thomas A. Olson, MD (Aflac Cancer and Blood Disorders Center of Children's Healthcare of Atlanta - Egleston Campus)
  • Alberto S. Pappo, MD (St. Jude Children's Research Hospital)
  • Stephen J. Shochat, MD (St. Jude Children's Research Hospital)
  • Malcolm A. Smith, MD, PhD (National Cancer Institute)

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PDQ® sobre el tratamiento pediátrico. PDQ Tratamiento del sarcoma de tejido blando infantil. Bethesda, MD: National Cancer Institute. Actualización: <MM/DD/YYYY>. Disponible en: https://www.cancer.gov/espanol/tipos/sarcoma-de-tejido-blando/pro/tratamiento-tejido-blando-infantil-pdq. Fecha de acceso: <MM/DD/YYYY>.

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Última revisión: 2023-10-13