Consumo de alcohol y drogas en adolescentes

Generalidades del tema

¿Qué es el uso de sustancias en la adolescencia?

Muchos adolescentes prueban el alcohol, el tabaco o las drogas. Algunos adolescentes prueban estas sustancias solo unas pocas veces y no vuelven a consumirlas. Otros no pueden controlar sus impulsos ni ansias por estas sustancias. Esto se conoce como un problema de consumo de sustancias.

Los adolescentes pueden probar una cantidad de sustancias, incluidos los cigarrillos, el alcohol, los productos químicos para el hogar (inhalantes), los medicamentos recetados y de venta libre, y las drogas ilegales. Los adolescentes usan alcohol más que cualquier otra sustancia. La marihuana es la droga ilegal que los adolescentes consumen más a menudo.

¿Por qué consumen los adolescentes drogas y alcohol?

Los adolescentes pueden usar una sustancia por muchas razones. Lo pueden hacer porque:

  • Quieren encajar con sus amigos o en ciertos grupos.
  • Les gusta la forma en que los hace sentir.
  • Creen que los hace más adultos.

Los adolescentes tienden a probar cosas nuevas y a correr riesgos, por lo que pueden tomar drogas o beber alcohol debido a que les parece emocionante.

Los adolescentes que tienen familiares con problemas con el alcohol o con otras drogas tienen más probabilidades de tener problemas graves de consumo de sustancias. Además, los adolescentes que sienten que no están conectados con sus padres ni que son valorados por ellos corren un riesgo mayor. Los adolescentes con autoestima baja o con problemas emocionales o de salud mental, como la depresión, también corren un mayor riesgo.

¿Qué problemas puede causar el uso de sustancias en la adolescencia?

El uso de sustancias puede provocar problemas graves, como un mal desempeño escolar, pérdida de amigos, problemas en el hogar y problemas legales duraderos. El uso del alcohol y de drogas es una de las principales causas de muerte o de lesiones en los adolescentes relacionadas con choques automovilísticos, suicidios, violencia y ahogamiento. El uso de sustancias puede aumentar el riesgo de embarazo y de infecciones de transmisión sexual (STI, por sus siglas en inglés), incluido el VIH, debido a relaciones sexuales sin protección. Aun el uso esporádico del alcohol por un adolescente aumenta el riesgo de futuros problemas con alcohol y drogas.

Aun el consumo casual de ciertas drogas puede causar problemas de salud graves, tales como una sobredosis o un daño cerebral. Hoy en día, muchas drogas ilegales se elaboran en laboratorios caseros, de modo que su intensidad puede variar en gran medida. Estas drogas también pueden contener bacterias, sustancias químicas peligrosas y otras sustancias no seguras.

¿Cuáles son las señales del uso de sustancias?

Es importante estar atento a las señales que le indiquen que su hijo puede estar consumiendo alcohol, drogas u otras sustancias. Algunas de las señales incluyen:

  • Ojos enrojecidos y dolencias, como sentirse demasiado cansado. Si su hijo adolescente utiliza a menudo gotas de venta libre para los ojos, puede estar intentando disimular el enrojecimiento de los ojos causado por fumar marihuana.
  • Pérdida de interés en la escuela, notas bajas y no asistir a clases o a la escuela.
  • Nuevos amigos que se interesan poco por sus familias o por las actividades escolares.
  • Trapos o papeles empapados en sustancias químicas, lo que puede significar que su hijo adolescente está inhalando vapores. Otras señales de esto son la presencia de pintura o de otras manchas en la ropa, en las manos o en la cara de su hijo adolescente.

¿Qué debe hacer si descubre que su hijo adolescente consume alcohol, tabaco o drogas?

Si su hijo adolescente consume alcohol, tabaco o drogas, tómelo en serio. Una de las cosas más importantes que puede hacer es hablar abiertamente con su hijo adolescente sobre el problema. Insístale en que haga lo mismo. Trate de no utilizar palabras duras ni acusadoras. Dele todo el apoyo posible durante este tiempo.

En la mayoría de los casos, un encuentro cara a cara hostil y cargado de enojo aleja a su hijo adolescente de la familia. Si no sabe qué hacer o si se siente incómodo, pídale ayuda a un pediatra, psicólogo o psiquiatra.

El tipo de tratamiento que su hijo adolescente necesita depende del nivel del uso de sustancias. Por ejemplo, si su hijo adolescente ha probado las drogas o el alcohol solo unas pocas veces, hablar abiertamente con él o ella sobre el problema puede ser todo lo que tenga que hacer. Pero si su hijo adolescente tiene un problema de consumo de sustancias, entonces tiene que ser visto por un médico, un consejero o ambos. Si su hijo adolescente es dependiente de una droga o del alcohol, puede tener que hacer un tratamiento de desintoxicación o un tratamiento que reemplace la sustancia con medicamentos. Los medicamentos dan mejores resultados si se los combina con asesoría psicológica personalizada o familiar, o con ambas.

Volver a consumir sustancias, lo que se llama recaída, es común después del tratamiento. No es un fracaso por parte de su hijo adolescente ni del programa de tratamiento. La recuperación de un estado de dependencia es difícil y lleva tiempo. Sepa que puede haber reveses que su hijo adolescente deberá superar paso a paso.

¿Pueden prevenirse el consumo y el uso indebido de sustancias en la adolescencia?

A fin de ayudar a prevenir el uso de sustancias:

  • Hable con su hijo con suficiente anticipación sobre lo que usted espera de su comportamiento respecto del alcohol, del tabaco y de otras drogas. Si su hijo adolescente cree que usted le permitirá consumir sustancias, es más probable que pruebe las drogas o el alcohol.
  • Mantenga ocupado a su hijo adolescente con actividades significativas, como los deportes, los programas de la iglesia u otros grupos.
  • Espere que su hijo adolescente siga las reglas de la casa. Establezca consecuencias razonables para la conducta que debe cambiar y haga que se cumplan las consecuencias en forma sistemática.
  • Continúe hablando con su hijo adolescente. Elogie a su hijo adolescente incluso por las cosas pequeñas que haga bien.
  • Conozca a los amigos de su hijo. Tener amigos que no consumen cigarrillos, alcohol ni drogas puede ser la mejor forma de proteger a su hijo adolescente del uso de sustancias.

Herramientas de salud

Las Herramientas de salud le permiten tomar decisiones acertadas sobre salud o tomar medidas para mejorar su salud.

Las Medidas prácticas le ayudan a la gente a participar activamente en la gestión de una condición de salud.

Datos sobre el consumo de drogas y alcohol en adolescentes

Cómo afecta el uso de sustancias la salud de los adolescentes

El uso de sustancias puede llevar a problemas sociales y de salud a largo plazo, lesiones e incluso la muerte. El crecimiento y desarrollo pueden ser afectados por el tabaco, el alcohol y las drogas. Los adolescentes que usan estas sustancias pueden tener dificultades para encontrar su identidad, formar habilidades para relacionarse y sentirse emocionalmente estable. También pueden tener problemas preparándose para su futuro. El uso de sustancias puede afectar la memoria y el aprendizaje, lo cual puede afectar el trabajo escolar del adolescente.

Y el uso de sustancias puede avanzar muy rápido desde la experimentación o el uso ocasional al uso frecuente y la dependencia en los adolescentes en riesgo.

Tabaco

La nicotina es solo una de las miles de sustancias químicas en el tabaco, pero es el componente principal que actúa en el cerebro. Los pulmones absorben fácilmente la nicotina del humo de los cigarrillos, cigarros o pipas. Los tejidos de la boca también pueden absorber nicotina cuando una persona fuma cigarros o pipas o mastica tabaco.

La nicotina es una de las sustancias más adictivas. Algunos adolescentes muestran señales iniciales de dependencia a pocos días o semanas de empezar a fumar. El uso repetido de tabaco causa una necesidad de cantidades de nicotina cada vez más grandes para sentir el mismo efecto (tolerancia). Y el uso repetido causa síntomas de abstinencia si la persona trata de dejar de fumar.

Alcohol

El alcohol afecta todos los órganos del cuerpo, pero tiene sus efectos más graves en el hígado. El alcohol reduce la calidad del sueño, especialmente si una persona lo usa con frecuencia para ayudarse a conciliar el sueño. Puede causar problemas con el desarrollo del cerebro en los adolescentes. Algunos adolescentes que toman alcohol regularmente pueden no aprender a manejar situaciones estresantes sin tomar alcohol.

El alcohol es un sedante. De modo que tomar alcohol le dificulta a una persona pensar y actuar rápidamente. Retrasa el pensamiento y el movimiento, y hace que la persona esté menos alerta. Las probabilidades de choques automovilísticos son más altas cuando una persona maneja después de tomar alcohol.

Tomar alcohol puede llevar a adolescentes a tener relaciones sexuales sin protección. Esto aumenta la posibilidad de embarazo e infecciones de transmisión sexual (STI).

Marihuana

La marihuana puede dificultar la memoria, la habilidad para resolver problemas y el aprendizaje. También puede causar oscilaciones del estado de ánimo, ansiedad y depresión.

Cocaína

La cocaína puede causar latidos cardíacos anormales, a veces causando un ataque cardíaco mortal, convulsiones o un ataque cerebral.

Otras sustancias

Otras sustancias que usan los adolescentes incluyen:

  • Inhalantes (pegamentos, aerosoles, gasolina, pinturas y diluyentes para pintura). Estos son algunas de las sustancias más consumidas por los estudiantes en los primeros años de la escuela secundaria ya que no cuestan mucho y son fáciles de conseguir. Contienen sustancias tóxicas que pueden causar daño cerebral o, en raras ocasiones, incluso la muerte con el primer uso.
  • Drogas de club, como el éxtasis (MDMA) y las drogas del violador como el flunitrazepam (Rohypnol) y el ácido gammahidroxibutírico (GHB). La cantidad de adolescentes que usan estas drogas es reducida en comparación con la cantidad que consume cigarrillos, alcohol y marihuana. Pero estas drogas de club pueden ser peligrosas, especialmente en caso de sobredosis o cuando se combinan con alcohol u otras drogas.
  • Metanfetamina (llamada comúnmente "meta", "crank" o "speed"). La metanfetamina puede causar convulsiones, ataque cerebral, problemas mentales graves (incluidos la paranoia, las alucinaciones y los delirios) y problemas de salud a largo plazo.
  • Alucinógenos, incluidos la ketamina, el LSD y la PCP (fenciclidina). Pueden ocurrir problemas graves y prolongados, como psicosis o situaciones retrospectivas alucinógenas, luego de que un adolescente usa LSD.
  • Opioides, como codeína, heroína y morfina. Los adolescentes que consumen estas drogas pueden robar, prostituirse o recurrir a otra conducta peligrosa o ilegal para comprar drogas.
  • Medicamentos recetados, como diazepam (por ejemplo, Valium), hidrocodona y acetaminofén (Norco), y oxicodona (OxyContin). Los adolescentes también usan medicamentos de venta libre, tales como jarabes para la tos y pastillas para el resfriado.
  • Esteroides anabólicos, que los adolescentes utilizan para desarrollar los tejidos musculares y reducir la grasa corporal. Los esteroides pueden causar cáncer de hígado y aumentar el riesgo de ataque cardíaco y ataque cerebral.

Por qué consumen algunos adolescentes alcohol y drogas

Los factores personales, familiares y comunitarios aumentan el riesgo de un adolescente de consumir sustancias y, posiblemente, de llegar a tener un problema.

Factores de riesgo personales

Estos incluyen:

  • Genética. A menudo, las personas que tienen problemas de consumo de alcohol y drogas tienen antecedentes familiares de uso de sustancias.
  • Temperamento y personalidad. La rebeldía, la resistencia a la autoridad, los sentimientos de fracaso y no tener relaciones íntimas pueden llevar a un adolescente a consumir drogas.
  • Ciertos problemas de salud. Los adolescentes que tienen trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), trastorno de conducta, depresión o sentimientos de depresión a largo plazo (distimia), trastorno por estrés postraumático o trastorno de ansiedad sin tratar son más propensos a usar alcohol o drogas. El alcohol y las drogas pueden empeorar estas afecciones.
  • Expectativas respecto a las drogas. Los adolescentes suelen tener ideas equivocadas sobre los efectos nocivos de las sustancias. Y suelen creer que "todos lo hacen" y por eso ellos también deberían hacerlo.
  • Primer consumo a una edad temprana. El consumo de alcohol o de otras drogas desde muy pequeño aumenta en gran medida el riesgo de un adolescente de tener un problema de uso de sustancias.

Factores de riesgo familiares

Es más probable que los adolescentes consuman alcohol o drogas si:

  • El padre o la madre consume o usa alcohol u otras sustancias de manera indebida.
  • Un padre o adolescente tiene depresión, ansiedad o trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés).
  • Piensan que sus padres creen que es de esperar y es normal que los adolescentes experimenten con el alcohol y las drogas.
  • Su familia tiene frecuentes conflictos, abuso físico o sexual o estrés.
  • Los padres no se involucran lo suficiente con sus hijos y no los supervisan. Los castigos severos o no sistemáticos, o ser demasiado laxo, también pueden aumentar el riesgo de consumo indebido de drogas y alcohol.

Factores de riesgo en la comunidad

Estos incluyen:

  • Acceso a las sustancias en el hogar y la comunidad.
  • Influencia de los compañeros. Un adolescente puede desear encajar con un grupo de compañeros, y estos compañeros usan sustancias.
  • Promoción del alcohol, los cigarrillos y las drogas en los medios de comunicación. El entretenimiento y otros medios de comunicación muestran el alcohol y el consumo de cigarrillos como "cool" y como una forma de ganar popularidad, éxito y atractivo sexual.

Estrategias de prevención

Los adolescentes que no consumen alcohol, cigarrillos ni otras drogas tienen menos probabilidades de consumirlas de adultos. Los esfuerzos para prevenir el uso de sustancias en la adolescencia deben comenzar temprano en la vida, con educación, fomento de comportamientos saludables, y buenos lazos familiares.

La autoestima positiva, una familia solidaria y modelos positivos de conducta ayudan a los adolescentes a adquirir confianza para tomar buenas decisiones.

Si usted vive en un vecindario con un alto riesgo de consumo o si su hijo adolescente corre un alto riesgo de un problema de uso de sustancias, un programa comunitario puede ayudar a su hijo adolescente a aprender habilidades para evitar el uso de sustancias.

Incluso niños pequeños de edad escolar tienen opiniones sobre el consumo de sustancias. Así que comience temprano a ayudar a su hijo a aprender las habilidades necesarias para evitar el uso de sustancias.

Sea un modelo a seguir y manténgase conectado

  • Sea un modelo a seguir. Como padre, su actitud respecto del alcohol, de los cigarrillos y de las drogas es uno de los factores que más influirán en el hecho de que su hijo consuma sustancias. Si tiene un problema de uso de sustancias, consiga ayuda. Si deja de consumir sustancias, es más probable que su hijo consiga ayuda antes si comienza a usar una sustancia.
  • Comparta sus creencias. Aunque es posible que no actúen de esa manera, la mayoría de los niños escuchan lo que sus padres les dicen. Hable con su hijo adolescente sobre los efectos de las sustancias sobre las emociones, el trabajo escolar y la salud. Si en su familia hay antecedentes de problemas de uso de sustancias, hable con su hijo adolescente sobre su mayor riesgo de tener los mismos problemas.
  • Manténgase conectado. Conozca a los amigos de su hijo adolescente. Sepa dónde está su hijo en todo momento. Establezca horas en las que espera que la familia esté reunida, como a las horas de comer. Planifique salidas familiares u otras actividades divertidas en familia.
  • Sea justo y consecuente. Los extremos de disciplina pueden aumentar el riesgo de uso de sustancias. Establezca consecuencias razonables para las conductas inaceptables y respételas en todos los casos. Felicite a su hijo adolescente por sus éxitos. Haga que su hijo adolescente siga las reglas de la casa. Use un contrato entre padres e hijos adolescentes para anotar las conductas esperadas y las consecuencias en caso de que no se siga el plan.
  • Promueva las actividades. Mantenga ocupado a su hijo adolescente con actividades significativas, como los deportes, los programas de la iglesia o la participación en otros grupos. Los adolescentes que se sienten bien consigo mismos tienen menos probabilidades de consumir alcohol y drogas.
  • Infórmese. Aprenda sobre las sustancias que los adolescentes usan más comúnmente. Hable con su médico. Averigüe cómo funcionan las drogas, cuáles son sus nombres de la calle y cuáles son los signos de estar bajo la influencia.

Hable sobre las consecuencias personales y legales

  • Consecuencias personales. Explíquele que algunos comportamientos, como las relaciones sexuales inseguras, pueden provocar consecuencias que duran de por vida. Hable sobre cómo puede afectar el futuro de su hijo adolescente el consumo de sustancias mientras intenta desarrollar habilidades de adultos, como graduarse de la escuela secundaria, ir a la universidad o conseguir un trabajo.
  • Consecuencias legales. Recuérdele a su hijo que usar cualquier sustancia es ilegal para los adolescentes. Hable sobre el aumento en el riesgo de choques automovilísticos, violencia y arrestos a causa del consumo de sustancias.

¿Consume su hijo adolescente alcohol o drogas?

A veces, es difícil saber si su hijo adolescente consume alcohol o drogas. Los padres pueden preocuparse de que sus hijos adolescentes estén involucrados con drogas o alcohol si se vuelven retraídos o tienen una actitud negativa. Pero estos comportamientos son comunes en adolescentes que están pasando por tiempos difíciles.

Es importante no acusar a su hijo injustamente. Trate de averiguar por qué ha cambiado el comportamiento de su hijo adolescente. Dígale que usted está preocupado.

Los expertos recomiendan que los padres busquen un patrón o una serie de cambios en la apariencia, comportamiento y actitud, no solo uno o dos de los cambios enumerados aquí.

Cambio en la apariencia

  • Menos atención a la hora de vestirse y de arreglarse
  • Falta de apetito o pérdida de peso de origen desconocido
  • Ojos enrojecidos y vidriosos, y uso frecuente de gotas para los ojos y pastillas de menta para el aliento

Cambio en el comportamiento

  • Disminución de la asistencia y del rendimiento en la escuela
  • Pérdida de interés en la escuela, en los deportes o en otras actividades
  • Comienza a actuar de manera secreta, o tiene una conducta engañosa o disimulada
  • Aislamiento de la familia y de los amigos
  • Nuevos amigos y reticencia a presentarlos
  • Mentiras o robos

Cambio en la actitud

  • Conducta irrespetuosa
  • Estado de ánimo o actitud que empeora
  • Falta de preocupación sobre el futuro

Cómo adoptar medidas

Cualquier consumo de alcohol, cigarrillos o drogas en la niñez o adolescencia es un problema, a menos que resulte ser un incidente de una sola vez. Si usted sospecha u observa señales de que su hijo adolescente consume sustancias, verifíquelo. No espere a que se convierta en un problema mayor.

Un análisis casero para detectar drogas ofrece información temprana e inmediata acerca de si una muestra de orina contiene drogas como anfetamina, cocaína y marihuana. Pero no muestra qué droga se ha usado, y algunas pruebas no son precisas.

Cuándo consultar a un profesional de la salud

Si cree que su hijo adolescente consume alcohol o drogas, reúna toda la información posible antes de llevar a su hijo adolescente a ver a un profesional de la salud. Esto ayudará a asegurar un diagnóstico preciso.

Los profesionales de la salud que pueden diagnosticar y tratar problemas de uso de sustancias incluyen:

La asesoría psicológica profesional para los problemas de consumo de sustancias, tanto individual como grupal, puede ser llevada a cabo por un:

Pruebas

Si el profesional de la salud cree que su hijo adolescente puede tener un problema de consumo de sustancias, hará preguntas sobre los antecedentes de salud de su hijo y le hará un examen físico. Hará preguntas sobre la actitud de su hijo adolescente respecto al consumo de sustancias, sus antecedentes de consumo y todos los efectos del uso de drogas. El profesional de la salud querrá hablar con su hijo adolescente en privado.

No suelen hacerse análisis de orina, de sangre ni de cabello para detectar drogas (prueba de toxicología) o un análisis sanguíneo para detectar alcohol para diagnosticar problemas de consumo de sustancias. Los profesionales de la salud generalmente no harán estos análisis sin el consentimiento del adolescente. El consentimiento de los padres no es suficiente, a menos que exista una razón médica o legal para realizar el análisis.

El profesional de la salud puede tratar de averiguar si su hijo tiene trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), trastorno de conducta, depresión, estado de ánimo depresivo a largo plazo (trastorno distímico), trastornos de ansiedad o trastorno por estrés postraumático. Estos problemas de salud son comunes en adolescentes que usan sustancias. El médico de su hijo va a querer tratar estos problemas y el uso de sustancias.

Remisión

Su médico puede remitirlo a un profesional que tenga experiencia en problemas de drogas y alcohol en adolescentes.

Detección temprana

Idealmente, cuando su hijo está en la escuela primaria, su médico comenzará a hacerle preguntas sobre la actitud de su hijo respecto al alcohol, los cigarrillos y las drogas. A medida que su hijo crece, el médico continuará tratando este tema en las consultas médicas. Conseguir ayuda a una edad temprana es muy importante. Eso es porque el uso temprano de sustancias aumenta la probabilidad de que su hijo se convierta en dependiente del alcohol o tenga otras conductas riesgosas.

Un profesional de la salud que sospecha que usted u otro familiar tienen un problema de consumo de sustancias hablará sobre la necesidad de tratamiento. Obtener tratamiento temprano para usted (u otro familiar) reduce el riesgo de que su hijo tenga un problema de consumo de sustancias. Además, es más probable que su hijo obtenga tratamiento en forma temprana si empieza a tener un problema de consumo de sustancias.

Cómo encontrar el tratamiento adecuado para su hijo adolescente

Usted puede ayudar a encontrar el tratamiento adecuado para su hijo, y ayudarle a tener éxito durante y después del tratamiento.

  • Consiga el tratamiento adecuado. Hable con un profesional de la salud sobre las opciones de tratamiento disponibles en su área. Los programas para adultos no satisfacen las necesidades de los adolescentes. Por lo general, ponen énfasis en los efectos de un problema de consumo de sustancias a largo plazo sobre la salud y las relaciones, que no es una preocupación para los adolescentes. Si necesita elegir un programa hospitalizado o ambulatorio, busque un programa que tenga las características que su hijo necesita. Estos pueden incluir un programa escolar u oportunidades para que los padres se involucren.
  • Participe en el tratamiento y en el programa de atención después del tratamiento. Hágale saber a su hijo adolescente que usted lo apoya. Puede llevar mucho tiempo para que su hijo adolescente recupere la confianza, que usted lo perdone y que su hijo se perdone a sí mismo.
  • Obtenga ayuda para su familia. Hable con un profesional de la salud sobre cómo obtener ayuda para usted y para su familia. Sus familiares necesitan saber que no provocaron la enfermedad, pero que su comportamiento puede afectar la enfermedad. Los grupos de apoyo como Al-Anon y Alateen pueden ser muy útiles para los familiares.
  • Ayude a establecer una dirección. Tener un sentido de dirección en la vida es importante para que su hijo se mantenga alejado de las drogas. El tratamiento generalmente incluye ayuda para identificar talentos y fortalezas. Estos pueden usarse ​​para encontrar los intereses sanos, pasatiempos y empleos.

Tratamiento para el nivel de uso

El tipo de tratamiento que su hijo recibe dependerá de la gravedad de su problema de sustancias.

  • Experimentación. Si su hijo adolescente ha comenzado a experimentar con sustancias, la educación a través de un programa escolar o de la comunidad puede ser todo lo que necesita. Algunas escuelas tienen programas para estudiantes que tienen problemas de consumo de alcohol y de drogas, que brindan apoyo y educación sobre las drogas.
  • Uso semanal. Por lo general, si su hijo adolescente usa una sustancia al menos semanalmente, se necesita algún tipo de tratamiento. Es importante prestar mucha atención a las inquietudes de su hijo adolescente, que pueden estar relacionadas con problemas emocionales o de autoestima. Busque actividades que su hijo adolescente pueda sustituir por el uso de sustancias. El tratamiento ayuda a motivar a los adolescentes a dejar de consumir sustancias y aprender habilidades para rechazar las drogas en el futuro. El asesoramiento familiar también debe ser parte del tratamiento.
  • Dependencia del alcohol o de las drogas. Su hijo adolescente va a necesitar tratamiento en un programa estructurado y puede necesitar ayuda médica para los síntomas de abstinencia. Si su hijo adolescente es dependiente de la heroína u otro opioide, puede ser remitido a un programa de tratamiento con metadona. Estos programas utilizan los medicamentos metadona, buprenorfina o antidepresivos como el bupropión (Wellbutrin) para ayudar a las personas a sobrellevar los síntomas de abstinencia provocados por el consumo de opioides.
  • Dependencia del tabaco. Su hijo puede obtener ayuda para dejar de fumar y prevenir problemas graves de salud. Para obtener más información, vea el tema Cómo dejar de fumar.

Tipos de programas

Existen varios tipos de programas de tratamiento para el uso de sustancias en la adolescencia.

Programas para pacientes hospitalizados

Los programas para pacientes hospitalizados son altamente estructurados y están cuidadosamente supervisados en un hospital o centro de tratamiento. El adolescente permanece allí día y noche durante el tratamiento, que normalmente dura alrededor de 4 semanas. Por lo general, estos programas tienen un programa de atención poshospitalario que brinda apoyo y aliento.

  • Los programas brindan educación y asesoría psicológica individual, familiar y grupal. A menudo, se basan en los principios de Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos.
  • Otro tipo de programa para pacientes hospitalizados es la comunidad terapéutica, que no se realiza en un hospital. Los adolescentes hacen una serie de tareas con retroalimentación constante de sus compañeros. Estos programas pueden durar hasta 2 años. Algunos adolescentes optan por quedarse y trabajar en el programa después del tratamiento.
  • Los programas de reto en regiones salvajes combinan una experiencia en una zona salvaje y algún tipo de tratamiento. El objetivo es ayudar a los adolescentes con problemas a comunicarse mejor con su familia, controlar su ira y construir relaciones sanas. Existe una variedad de programas. Su calidad varía ampliamente. Son costosos y tienden a limitar el contacto con los padres. Hable con un profesional de la salud si está considerando enviar a su hijo a uno de estos programas.

Programas para pacientes ambulatorios

Los programas para pacientes ambulatorios varían desde programas muy estructurados con psicoterapia y terapia familiar, hasta centros sin cita previa.

  • Estos programas requieren que el adolescente pase 8 horas o más en el centro durante el día, pero el adolescente regresa al hogar durante la noche. Por lo general, los programas de tratamiento diurno tienen las mismas características (asesoría psicológica individual, grupal y familiar) que los programas para pacientes hospitalizados. Pero el tratamiento de día suele costar menos.
  • Los programas ambulatorios de menor intensidad se han diseñado para los jóvenes que no necesitan tanto tiempo en el tratamiento de día ni estar las 24 horas del día en el centro de tratamiento. El tratamiento incluye el asesoramiento individual o de grupo, y terapia familiar. El tratamiento en la propia comunidad del adolescente hace más fácil la participación de la familia.

Cualquier tipo de programa que elija, debería abarcar los temas de desarrollo de los adolescentes, como la presión de sus compañeros y la necesidad de desafiar límites. El tratamiento también tiene que señalar una forma en la que su hijo adolescente pueda continuar con su educación. Esto puede aumentar la confianza en sí mismo y la autoestima si puede hacer al menos pequeñas tareas académicas durante el tratamiento.

Qué hacer si su hijo adolescente tiene una recaída

Lograr que un adolescente deje de consumir alcohol, cigarrillos u otras drogas es solo el primer paso. El consumo de sustancias llena una necesidad emocional. Esa necesidad debe encontrarse y satisfacerse de una manera saludable para que su hijo pueda mantenerse alejado de la sustancia.

Volver al uso de sustancias (con una recaída) después del tratamiento es común. No se considera un fracaso del tratamiento. La mayoría de las recaídas ocurren dentro de los primeros 3 meses después del tratamiento. En la mayoría de los casos, los adolescentes necesitan realizar un tratamiento más de una vez y seguir un proceso de recuperación largo.

Su hijo adolescente tiene menos probabilidades de tener una recaída si:

  • El programa de tratamiento motiva al adolescente a dejar de consumir y a aprender las técnicas para manejar las ansias de drogas, las situaciones de alto riesgo y las recaídas.
  • Su hijo adolescente puede comprometerse a mantenerse alejado de las sustancias de 12 a 24 meses.
  • Su hijo adolescente tiene o descubre un pasatiempo o un interés saludables.
  • Su hijo adolescente consigue tratamiento para otros problemas de salud que pueda tener, como trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), depresión o sentimientos de depresión a largo plazo (distimia), trastorno por estrés postraumático o trastorno de ansiedad.
  • Su hijo adolescente participa de un programa de atención después del tratamiento o de administración de caso.

Créditos

Revisado: 15 noviembre, 2023

Autor: El personal de Healthwise Comité de revisión clínica
Todo el material educativo de Healthwise es revisada por un equipo que incluye médicos, enfermeras, profesionales sanitarios avanzados, dietistas registrados y otros profesionales de atención médica.