Fascitis plantar

Generalidades de la afección

Huesos del pie

¿Qué es la fascitis plantar?

La fascitis plantar es la causa más común de dolor en el talón. La fascia plantar es la banda plana de tejido (ligamento) que conecta el hueso del talón con los dedos de los pies. Sostiene el arco del pie. Si usted se distiende la fascia plantar, esta se debilita, se hincha y se irrita (se inflama). Entonces, el talón o la planta del pie le duelen cuando está de pie o camina.

La fascitis plantar es común en las personas de mediana edad. También se produce en las personas jóvenes que están de pie mucho tiempo, como los deportistas o los soldados. Puede producirse en un pie o en ambos pies.

¿Cuál es la causa de la fascitis plantar?

La fascitis plantar es causada por una distensión en el ligamento que sostiene el arco. Las distensiones reiteradas pueden causar pequeños desgarros en el ligamento. Estos pueden provocar dolor e hinchazón. Esto es más probable que suceda si:

  • Los pies giran demasiado hacia adentro cuando camina (pronación excesiva).
  • Tiene arcos altos o pies planos.
  • Camina, está de pie o corre durante largos períodos, especialmente en superficies duras.
  • Tiene sobrepeso.
  • Usa calzado que no le queda bien o que está gastado.
  • Tiene los tendones de Aquiles o los músculos de la pantorrilla tensos.

¿Cuáles son los síntomas?

La mayoría de las personas con fascitis plantar tiene dolor al dar los primeros pasos al levantarse de la cama o después de estar sentadas mucho tiempo. Podría sentir menos rigidez y dolor después de dar algunos pasos. Sin embargo, el pie podría dolerle más a medida que avance el día. Podría dolerle más al subir escaleras o después de estar de pie por mucho tiempo.

Si tiene dolor en el pie por la noche, podría tener otro problema, como artritis o un problema nervioso como síndrome del túnel del tarso.

¿Cómo se diagnostica la fascitis plantar?

Su médico le examinará los pies y lo observará de pie y caminando. También le hará preguntas acerca de:

  • Sus antecedentes de salud, como qué enfermedades o lesiones ha tenido.
  • Sus síntomas, como dónde está el dolor y en qué momento del día le duele más el pie.
  • Su nivel de actividad y qué tipos de actividad física hace.

Su médico podría realizarle una radiografía del pie si sospecha que hay un problema en los huesos del pie, como una fractura por esfuerzo.

¿Cómo se trata?

No hay un solo tratamiento que dé los mejores resultados para todas las personas con fascitis plantar. Sin embargo, hay muchas cosas que usted puede probar para que el pie mejore:

  • Dele descanso a los pies. Reduzca las actividades que hagan que le duelan los pies. Trate de no caminar ni correr en superficies duras.
  • Para reducir el dolor y la hinchazón, pruebe ponerse hielo en el talón. O tome un analgésico (medicamento para el dolor) de venta libre, como ibuprofeno (como Advil o Motrin) o naproxeno (como Aleve).
  • Haga estiramientos de los dedos del pie, estiramientos de la pantorrilla y estiramientos con toalla varias veces al día, especialmente cuando se despierte por la mañana. (Para los estiramientos de toalla, usted tira de ambos extremos de una toalla enrollada que coloca debajo de la región metatarsiana del pie).
  • Cómprese calzado nuevo. Elija calzado con buen soporte del arco y suela que amortigüe. O pruebe cuñas o plantillas (ortopédicas). Úselas en ambos zapatos, aunque solo le duela un pie.

Si estos tratamientos no le ayudan, su médico podría recomendarle tablillas (férulas) para usar por la noche, inyecciones de un medicamento (como un esteroide) en el talón u otros tratamientos. Es probable que no necesite cirugía. Los médicos solo la recomiendan para las personas que siguen teniendo dolor después de probar otros tratamientos por un período de 6 a 12 meses.

¿Cuánto tiempo tardará en desaparecer el dolor?

La fascitis plantar ocurre la mayoría de las veces debido a lesiones que se han sufrido con el tiempo. Con el tratamiento, usted tendrá menos dolor en algunas semanas. Sin embargo, podría llevar tiempo que el dolor desaparezca por completo. Podría llevar desde algunos meses hasta un año.

Cumpla con su tratamiento. Si no lo hace, podría tener dolor constante cuando está de pie o cuando camina. Mientras más pronto empiece el tratamiento, más pronto dejarán de dolerle los pies.

Herramientas de salud

Las Herramientas de salud le permiten tomar decisiones acertadas sobre salud o tomar medidas para mejorar su salud.

Los Puntos de decisión se centran en cualquier decisión clave sobre la asistencia médica que sea importante para distintos problemas de salud.
Las Medidas prácticas le ayudan a la gente a participar activamente en la gestión de una condición de salud.

Causa

No se comprende bien cuál es la causa de la fascitis plantar exactamente. Sin embargo, es probable que se produzca como resultado de pequeños desgarros repetidos en la fascia plantar. Normalmente cuando camina, la fascia plantar se estira a medida que el pie golpea el suelo. Si la fascia plantar se distiende por la manera en que camina o por el esfuerzo reiterado, puede debilitarse, hincharse e irritarse (inflamarse) y puede doler cuando está de pie o cuando camina.

Las condiciones o actividades que podrían provocar fascitis plantar incluyen:

  • Cosas que afectan el modo en que funcionan los pies (factores biomecánicos). Estas incluyen giros o rotaciones hacia adentro anormales del pie (pronación), arcos altos, pies planos, músculos de la pantorrilla tensos o tendones tensos en la parte posterior del talón (tendones de Aquiles).
  • Las actividades repetitivas, como los trabajos que requieren caminar o estar de pie en forma prolongada en superficies duras o irregulares, o deportes, como correr.
  • Cosas que implican un esfuerzo adicional en los pies, como tener sobrepeso o usar calzado que amortigua mal, que no calza bien o que está gastado.
  • El proceso natural del envejecimiento. La fascitis plantar es más común en los adultos de mediana edad.
  • En raras ocasiones, una sola lesión en el pie.

Síntomas

El síntoma clásico de la fascitis plantar es el dolor en el talón cuando da los primeros pasos después de levantarse de la cama o después de estar sentado durante un largo período. También podría tener:

  • Rigidez y dolor por la mañana o después de descansar que mejora luego de algunos pasos, pero empeora a medida que avanza el día.
  • Dolor que empeora cuando sube escaleras o cuando se pone de puntillas.
  • Dolor después de estar de pie durante largos períodos.
  • Dolor cuando comienza a hacer ejercicio que mejora o desaparece a medida que sigue el ejercicio, pero regresa cuando finaliza el ejercicio.

La fascitis plantar puede confundirse con otras afecciones con síntomas similares, como la artritis o un problema nervioso como el síndrome del túnel del tarso.

Qué sucede

La fascitis plantar suele producirse gradualmente. Podría tener dolor de talón solo cuando da los primeros pasos después de levantarse de la cama o después de estar sentado durante un largo período. Si usted no descansa los pies, el dolor empeorará. Otras cosas, como el esfuerzo reiterado de caminar, estar de pie, correr o saltar, empeorarán la lesión, la inflamación y el dolor. El ligamento lesionado podría nunca sanar por completo si no puede interrumpir la actividad o cambiar la condición que causó la lesión.

A medida que la fascitis plantar avanza:

  • El dolor en el talón empeora gradualmente.
  • Podría cambiar la manera de caminar para aliviar el dolor. Esto finalmente podría provocar más molestias y dolor, y otros problemas en el pie, en la pierna, en la cadera o en la espalda. Las actividades cotidianas o los deportes podrían volverse incluso más limitados.
  • Finalmente, podría tener dolor al realizar cualquier actividad en la que tenga que soportar peso. Es posible que ya no pueda correr ni saltar.
  • Podría formarse un espolón calcáneo como resultado de un esfuerzo continuo a medida que la fascia plantar tira del hueso del talón. (Por sí solo, un espolón calcáneo no causa fascitis plantar y no suele causar problemas. Y usted puede tener fascitis plantar y no tener un espolón calcáneo).

Si la afección no se trata, la fascitis plantar puede causar un dolor constante en el talón cuando está de pie o cuando camina.

Qué aumenta el riesgo

Usted tiene mayores probabilidades de llegar a tener fascitis plantar si:

  • Es de mediana edad o mayor.
  • Camina girando o rotando hacia adentro el pie (pronación) o tiene arcos altos o pies planos.
  • Tiene sobrepeso o aumenta mucho de peso repentinamente.
  • Tiene los tendones de Aquiles (que unen los músculos de la pantorrilla con los huesos de los talones) tensos o los músculos de la pantorrilla tensos.
  • Tiene hábitos o realiza actividades que aumentan el esfuerzo en los pies, como:
    • Usar calzado con poca amortiguación.
    • Caminar o correr sin estar en condiciones para realizar dichas actividades.
    • Cambiar la superficie donde camina o donde corre (por ejemplo, de césped a hormigón).
    • Tener un trabajo que implique estar de pie en forma prolongada en superficies duras.
  • Es deportista o miembro del cuerpo militar. Algunos deportistas, especialmente los corredores, tienen más probabilidades de tener fascitis plantar debido a:
    • Cosas que afectan la manera en que los pies golpean el suelo, como no tener la flexibilidad suficiente en el pie y en el tobillo o tener músculos más fuertes en una pierna que en la otra.
    • La naturaleza repetitiva de las actividades deportivas.
    • El entrenamiento inadecuado.

Si usted es corredor, sus probabilidades de tener fascitis plantar aumentan si:

  • Cambia en forma abrupta la intensidad con la que corre o el tiempo que corre.
  • Corre en colinas empinadas.
  • Usa zapatillas para correr que no tienen una suela que amortigüe, que no tienen buen soporte del arco o que están gastadas.

¿Cuándo debe llamar al médico?

Si piensa que podría tener fascitis plantar, llame a su médico. Cuanto antes un médico diagnostique y trate su problema, más pronto tendrá un alivio del dolor.

Llame a su médico de inmediato si tiene dolor en el talón con fiebre, con enrojecimiento o sensación de calor en el talón, o con entumecimiento u hormigueo en el talón.

Llame a su médico si tiene:

  • Dolor que continúa cuando no está de pie ni está cargando peso sobre el talón.
  • Una lesión en el talón que produce dolor cuando carga peso sobre el talón.
  • Dolor en el talón que no mejora después de una semana, aunque haya probado con descanso, hielo, analgésicos (medicamentos para el dolor) de venta libre (como ibuprofeno o acetaminofén) y con otros tratamientos en el hogar.

Llame a su médico si se le ha diagnosticado fascitis plantar y el tratamiento en el hogar que acordaron no le está ayudando a controlar su dolor en el talón.

Espera vigilante

Si usted tiene dolor en el talón:

  • Primero, intente descansar y colóquese hielo en el talón. Si es posible, interrumpa o reduzca las actividades que causan el dolor, como correr, estar de pie durante largos períodos o caminar en superficies duras.
  • Pruebe distintos zapatos. Asegúrese de que tengan buen soporte de arco y suelas con buena amortiguación. O si su calzado actual está en buena forma, pruebe con cuñas o plantillas (ortopédicas) para amortiguar el talón.
  • Cambie a otras actividades o ejercicios que no ejerzan presión sobre el talón. Después de que sus síntomas hayan desaparecido completamente, reanude en forma gradual la actividad que le estaba causando dolor.
  • Si usted es deportista, no ignore el dolor ni trate de "aguantarlo". Esto puede provocar un problema crónico que sea más difícil de tratar en forma exitosa.

A quién consultar

Los siguientes profesionales de la salud pueden evaluar y diagnosticar la fascitis plantar y recomendar tratamiento no quirúrgico:

Si los tratamientos no quirúrgicos no alivian su dolor, su médico podría remitirlo a un especialista como un ortopedista o un podiatra. Si usted es deportista, su médico podría remitirlo a un especialista en medicina del deporte para que busque problemas en la forma en que los pies golpean el suelo, en la forma que tienen los pies o en su rutina de entrenamiento.

Los siguientes profesionales de la salud pueden operar:

  • Cirujano podiátrico
  • Cirujano ortopédico, especialmente uno que se especialice en afecciones del pie y del tobillo
  • Cirujano de medicina del deporte

Exámenes y pruebas

Para diagnosticar la fascitis plantar, su médico le hará preguntas acerca de sus síntomas y de sus antecedentes de salud. También le realizará un examen físico de los pies que incluye ver la forma en que se para y cómo camina.

Las radiografías no son útiles para diagnosticar la fascitis plantar, debido a que no muestran los ligamentos claramente. Sin embargo, su médico podría realizar radiografías si sospecha que hay una fractura por esfuerzo, un quiste óseo u otros problemas óseos en el pie o en el tobillo. Las radiografías podrían mostrar si existe un espolón calcáneo, pero un espolón calcáneo no significa necesariamente que una persona tenga fascitis plantar.

Si el diagnóstico no es claro, podrían realizársele otras pruebas. Las pruebas que se realizan en raras ocasiones incluyen una ecografía, exámenes de imágenes por resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés), análisis de sangre, gammagrafías óseas y pruebas vasculares, que pueden evaluar el flujo de sangre en el pie y en la parte baja de la pierna. Si su médico sospecha compresión nerviosa, quizás le hagan pruebas neurológicas.

Generalidades del tratamiento

Las metas del tratamiento de la fascitis plantar son:

  • Aliviar la inflamación y el dolor en el talón.
  • Permitir que sanen los pequeños desgarros en el ligamento de la fascia plantar.
  • Mejorar la fuerza y la flexibilidad, y corregir los problemas en los pies, como la pronación excesiva para que no esfuerce el ligamento de la fascia plantar.
  • Permitirle volver a sus actividades normales.

La mayoría de las personas se recuperan por completo en el término de un año. De cada 100 personas con fascitis plantar, alrededor de 95 pueden aliviar el dolor en el talón con tratamientos no quirúrgicos. Solo alrededor de 5 de cada 100 personas necesitan cirugía.nota 1

El tratamiento que usted comienza apenas observa los síntomas es más exitoso y lleva menos tiempo que el tratamiento que se demora.

Tratamiento inicial

Hay muchos métodos que puede probar para aliviar el dolor en el talón por la fascitis plantar. Aunque no se haya probado su eficacia en estudios científicos, estos métodos, usados solos o en combinación, dan resultados para la mayoría de las personas.nota 2

  • Descanse los pies. Limite o, si es posible, interrumpa las actividades cotidianas que están causándole dolor de talón. Trate de evitar correr o caminar en superficies duras, como hormigón.
  • Para reducir la inflamación y aliviar el dolor, aplíquese hielo en el talón. También puede probar con un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE), como ibuprofeno (Advil o Motrin, por ejemplo) o naproxeno (Aleve, por ejemplo). Los AINE vienen en pastillas y en una crema que usted se frota en la zona adolorida.
  • Use calzado que tenga buena amortiguación y el soporte de arco adecuado para el pie. El calzado deportivo o el calzado con buena amortiguación suelen ser buenas opciones.
  • Pruebe con cuñas o plantillas (ortopédicas) para ayudar a proteger el talón. Puede comprarlas en muchas tiendas de calzado deportivo y en farmacias. Úselas en ambos zapatos, aunque solo le duela un pie.
  • Colóquese el calzado tan pronto como se levante de la cama. Caminar descalzo o usar pantuflas podría empeorar su dolor.
  • Haga ejercicios simples, como estiramientos de los dedos del pie, estiramientos de la pantorrilla y estiramientos con toalla varias veces al día, especialmente cuando se despierte por la mañana. Estos ejercicios pueden ayudar a que el ligamento sea más flexible y a fortalecer los músculos que sostienen el arco. (Para estiramientos con toalla, usted tira de ambos extremos de una toalla enrollada que coloca debajo de la región metatarsiana del pie).

Evite usar únicamente calor en el pie, como el calor de una almohadilla térmica o de una bolsa térmica durante al menos los primeros 2 o 3 días. El calor tiende a empeorar los síntomas en algunas personas. Si realiza baños de contraste, que alternan agua caliente con agua fría, asegúrese de terminar con un remojo en agua fría. Si prueba una almohadilla térmica, úsela a un nivel bajo.

Si su peso es el responsable de un esfuerzo adicional en los pies, su médico podría recomendarle que intente realizar un programa para adelgazar.

Tratamiento continuo

Si los métodos no quirúrgicos como descansar, aplicarse hielo y realizar ejercicios de estiramiento ayudan a aliviar los síntomas de la fascitis plantar, siga usándolos. Si no ha mejorado después de 6 semanas, es posible que su médico le recomiende seguir con esos métodos, pero que agregue otros tratamientos no quirúrgicos, como:

  • Plantillas ortopédicas a medida. Las plantillas ortopédicas a medida requieren una receta. Si su pie tiene una forma inusual, o si usted tiene un determinado problema que el dispositivo ayudará a corregir, una plantilla a medida podría calzar mejor y controlar el dolor mejor que una plantilla sin receta.
  • Tablillas (férulas) nocturnas. Una tablilla nocturna sostiene el pie con los dedos hacia arriba y con el pie y el tobillo en un ángulo de 90 grados. Esta posición aplica un estiramiento constante y suave en la fascia plantar.
  • Un yeso para caminar en la parte baja de la pierna. Los yesos son algo más costosos y molestos que otros tratamientos no quirúrgicos. Y después de que se retira el yeso, necesitará cierta rehabilitación para recuperar la fuerza y la amplitud de movimiento. Sin embargo, un yeso le obliga a descansar el pie.

La instrucción formal de fisioterapia puede ayudar a asegurarse de que estire adecuadamente su tendón de Aquiles y el ligamento de la fascia plantar. Los médicos suelen considerar la cirugía solo para casos graves que no mejoran.

Tratamiento si la afección empeora

Su médico puede sugerir inyecciones de corticosteroides si ha probado otros tratamientos no quirúrgicos por varias semanas sin éxito.nota 1 Las inyecciones pueden aliviar el dolor, pero el alivio es a menudo a corto plazo. Además, las inyecciones mismas pueden ser dolorosas y repetir las inyecciones puede hacer daño a la almohadilla del talón y la fascia plantar.

De cada 100 personas con fascitis plantar, alrededor de 95 pueden aliviar el dolor en el talón con tratamientos no quirúrgicos. Solo alrededor de 5 de cada 100 personas necesitan cirugía.nota 1 Si usted es una de las pocas personas cuyos síntomas no mejoran en 6 a 12 meses con otros tratamientos, es posible que su médico le recomiende una cirugía de liberación de la fascia plantar. La liberación de la fascia plantar implica cortar parte del ligamento de la fascia plantar para liberar la tensión y aliviar la inflamación del ligamento.

Para pensar

Si está tratando de bajar de peso y tiene fascitis plantar cuando comienza a hacer ejercicio, especialmente al trotar, hable con su médico acerca de otros tipos de actividad que apoyen sus esfuerzos por bajar de peso sin hacer que su dolor en el talón empeore. Una actividad, como nadar, que no implica esfuerzo en los pies podría ser una buena opción.

Si su fascitis plantar está relacionada con los deportes o con su trabajo, es posible que le sea difícil detener o reducir su actividad para dejar que sus pies sanen. Sin embargo, descansar los pies es muy importante para evitar el dolor duradero en el talón. Es posible que su médico o un especialista en medicina del deporte puedan sugerirle un plan para alternar entre sus actividades regulares y otras que no empeoran su dolor.

Si hace ejercicio con frecuencia, pregúntele a su médico si son adecuadas la fisioterapia o la remisión a un especialista en medicina del deporte, un podiatra o un ortopedista.

Algunas preguntas que quizás quiera hacer sobre el ejercicio incluyen:

  • ¿Debo reducir el ejercicio? ¿Cuántos días por semana, por cuánto tiempo y qué ejercicio debería hacer en su lugar?
  • ¿Debo aplicarme hielo en el pie después de hacer ejercicio? Si debo hacerlo, ¿por cuánto tiempo cada vez y por cuánto tiempo debo continuar haciéndolo?
  • ¿Debo usar medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) ya sea antes o después de hacer ejercicio?
  • ¿Hay ejercicios que pueda hacer para aumentar la flexibilidad de mi pie y mi tobillo? ¿Cuáles son, y con qué frecuencia y por cuánto tiempo debo hacerlos?

Prevención

Las siguientes medidas ayudarán a prevenir la fascitis plantar o a evitar que la afección empeore si ya la tiene:

  • Cuídese los pies. Use zapatos con buen soporte de arco y amortiguación para el talón. Si su trabajo requiere que se encuentre de pie sobre superficies duras, póngase de pie sobre un tapete de goma gruesa para reducir el esfuerzo en los pies.
  • Haga ejercicios para estirar el tendón de Aquiles en la parte posterior del talón. Esto es especialmente importante antes de los deportes, pero es útil también para las personas que no son deportistas. Pídale recomendaciones a su médico sobre una rutina de estiramiento.
  • Manténgase en un peso saludable para su estatura.
  • Establezca buenos hábitos de ejercicio. Aumente sus niveles de ejercicio en forma gradual y use calzado que le dé apoyo.
  • Si corre, alterne correr con otros deportes que no causen dolor en el talón.
  • Colóquese calzado que le dé apoyo tan pronto como se levante de la cama. Caminar descalzo o usar pantuflas implica realizar esfuerzo con los pies.

Si siente que las actividades laborales causaron su dolor en el talón, pídale información a su departamento de recursos humanos acerca de las diferentes maneras de hacer su trabajo que no harán que su dolor en el talón empeore. Si hace deportes, podría convenirle consultar a un especialista en entrenamiento deportivo sobre programas de entrenamiento y acondicionamiento para evitar que la fascitis plantar recurra.

Tratamiento en el hogar

Las primeras medidas que su médico le recomendará para tratar la fascitis plantar son algunas que puede realizar usted mismo. Distintas personas descubren que un método o una combinación de métodos dan mejores resultados para ellas.

Pruebe los siguientes métodos:

  • Descanse los pies. Interrumpa o reduzca cualquier actividad que podría estar causando su dolor en el talón.
  • Use calzado que le dé apoyo. Use zapatos que tengan buen soporte de arco y amortiguación para el talón. O bien compre plantillas (ortopédicas). Las plantillas podrían estar hechas de plástico, goma o fieltro. Las plantillas pueden reducir el esfuerzo y la distensión del ligamento de la fascia plantar.
  • Aplíquese hielo en el talón. El hielo puede ayudar a reducir la inflamación. Los baños de contraste, que alternan agua caliente con agua fría, también pueden ser útiles. El calor por sí solo puede hacer que los síntomas empeoren en algunas personas. Por eso, siempre termine un baño de contraste con un remojo en agua fría. Si el hielo no ayuda después de 2 o 3 días, pruebe calor, como una almohadilla térmica a un nivel bajo.
  • Tome ibuprofeno (como Advil o Motrin), naproxeno (como Aleve) u otro medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE) para reducir el dolor y la inflamación. Los AINE vienen en pastillas y en una crema que usted se frota en la zona adolorida. Sea prudente con los medicamentos. Lea y siga todas las instrucciones de la etiqueta.
  • Use tablillas (férulas) nocturnas. Las tablillas nocturnas estiran suavemente el ligamento de la fascia plantar y el tendón de Aquiles, y evitan que se contraigan durante la noche.
  • Haga ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento. Los ejercicios para estirar el tendón de Aquiles y la fascia plantar aumentarán su flexibilidad. Los ejercicios para fortalecer los músculos del pie y del tobillo ayudarán a sostener el arco.

Con frecuencia, los deportistas tienen problemas en los pies debido a que entrenan con calzado que está gastado o no calza en forma adecuada. Reemplace sus zapatos cada pocos meses, porque el acolchonamiento se gasta. Además, reemplace su calzado si la suela o el talón se han gastado. Si bien es costoso reemplazar los zapatos, es menos caro —y menos doloroso— que un problema de talón de larga duración. Otras técnicas de entrenamiento razonables, como evitar las superficies irregulares o duras, pueden ayudar a prevenir que ocurra o vuelva a ocurrir la fascitis plantar.

Si su peso implica un esfuerzo adicional en los pies, su médico podría recomendarle que intente realizar un programa para adelgazar.

Para tener éxito en el tratamiento de la fascitis plantar, deberá:

  • Ser paciente y constante. La mayoría de los casos de fascitis plantar desaparecen con el tiempo si hace estiramientos en forma regular, usa un buen calzado y descansa los pies para que puedan sanar.
  • Comenzar el tratamiento de inmediato. No ignore simplemente el dolor y espere que desaparezca. Cuanto más espera para comenzar el tratamiento, más tiempo tardará en que dejen de dolerle los pies.

El proceso de sanación lleva tiempo, de algunos meses a un año. Pero debería comenzar a sentir menos dolor en el transcurso de algunas semanas de comenzar el tratamiento. Si no ha mejorado después de probar estos métodos durante 6 semanas, su médico le sugerirá otros tratamientos.

Medicamentos

Es posible que su médico le recomiende medicamentos para aliviar el dolor y la inflamación causados por la fascitis plantar. El tratamiento con medicamentos no cura la fascitis plantar. Sin embargo, al reducir el dolor, los medicamentos podrían hacer que sea más fácil para usted seguir otras medidas del tratamiento, como los estiramientos. No debe usar medicamentos como una forma de continuar las actividades que causan dolor en el talón.

Las opciones de medicamentos incluyen:

  • Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como ibuprofeno (Advil o Motrin, por ejemplo) o naproxeno (Aleve, por ejemplo). Puede comprar estos medicamentos sin una receta médica. Con frecuencia, los AINE se usan si solo ha tenido síntomas de fascitis plantar durante algunos días o semanas. Es menos probable que den resultado si ha tenido síntomas durante más de 6 a 8 semanas. Los AINE vienen en pastillas y en una crema que usted se frota en la zona adolorida.
  • Inyecciones de corticosteroides. Es posible que su médico le recomiende inyecciones si ha probado otros tratamientos durante varias semanas sin éxito.nota 3 Los médicos podrían recomendar inyecciones más pronto para algunas personas.

Se están estudiando las inyecciones de toxina botulínica para ser usadas en fascitis plantar.

Cirugía

Por lo general, no se necesita cirugía para la fascitis plantar. Alrededor de 95 de cada 100 personas que tienen fascitis plantar pueden aliviar el dolor en el talón sin cirugía. Su médico podría considerar una operación si el tratamiento no quirúrgico no ha ayudado y el dolor en el talón limita sus actividades cotidianas. Algunos médicos consideran que debería probar un tratamiento no quirúrgico durante al menos 6 meses antes de pensar en la cirugía.nota 1

Los principales tipos de cirugía para la fascitis plantar son:

En el pasado, los expertos pensaban que los espolones calcáneos causaban fascitis plantar. En la actualidad, los expertos suelen considerar que los espolones calcáneos son el resultado de la fascitis plantar, no la causa. Muchas personas con grandes espolones calcáneos nunca tienen dolor en el talón ni fascitis plantar. Por lo tanto, la cirugía para extraer espolones calcáneos se realiza en raras ocasiones.

Otro tratamiento

La fisioterapia podría ser útil para algunas personas que tienen fascitis plantar. Puede ser especialmente útil para las personas que tienen problemas con la mecánica del pie (problemas biomecánicos), como tendones de Aquiles tensos.

Una técnica que se llama terapia extracorpórea por ondas de choque (ESWT, por sus siglas en inglés) usa ondas sonoras pulsadas para tratar la fascitis plantar. Se está investigando todavía, pero algunos estudios demuestran que la ESWT puede ayudar a reducir los síntomas de fascitis plantar que no ha respondido a otros tratamientos.nota 4, nota 5 Se están estudiando nuevos tratamientos de ondas de choque. La mayoría de los tipos de terapia de onda de choque, que a veces se llama ESWT "concentrada", requieren anestésicos. Otro tipo, que se llama ESWT radial, puede realizarse sin anestésico, ya que la onda de choque es menos concentrada.

Referencias

Citas bibliográficas

  1. American Academy of Orthopaedic Surgeons and American Academy of Pediatrics (2010). Plantar fasciitis. In JF Sarwark, ed., Essentials of Musculoskeletal Care, 4th ed., pp. 839–844. Rosemont, IL: American Academy of Orthopaedic Surgeons.
  2. Thomas JL, et al. (2010). The diagnosis and treatment of heel pain: A clinical practice guideline-revision 2010. Journal of Foot and Ankle Surgery, 49(3, Suppl): S1–S19.
  3. American Academy of Orthopaedic Surgeons and American Academy of Pediatrics (2010). Plantar fasciitis. In JF Sarwark, ed., Essentials of Musculoskeletal Care, 4th ed., pp. 839–844. Rosemont, IL: American Academy of Orthopaedic Surgeons.
  4. Malay DS, et al. (2006). Extracorporeal shockwave therapy versus placebo for the treatment of chronic proximal plantar fasciitis: Results of a randomized, placebo-controlled, double-blinded, multicenter intervention trial. Journal of Foot and Ankle Surgery, 45(4): 196–210.
  5. Gerdesmeyer L, et al. (2008). Radial extracorporeal shock wave therapy is safe and effective in the treatment of chronic recalcitrant plantar fasciitis: Results of a confirmatory randomized placebo-controlled multicenter study. American Journal of Sports Medicine. Published online October 1, 2008.

Créditos

Revisado: 18 julio, 2023

Autor: El personal de Healthwise
Comité de revisión clínica
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